Ladridos de un perro conducen a una madre a un espeluznante hallazgo en un canal de Florida

La angustiosa búsqueda de un niño de dos años que había desaparecido sin dejar rastro, llegó a un desgarrador final cuando los ladridos de un perro condujeron a encontrar su cuerpo sin vida en un apartado canal de la Florida, según la policía.

Se sospecha que el pequeño se ahogó aproximadamente a las 6 p.m. del sábado, 20 de julio, después que salió del patio de la casa de su familia en el área de Osteen, dijo en Facebook la policía del Condado Volusia. Osteen está a unas 35 millas al noreste de Orlando.

El hallazgo del cadáver del niño lo hicieron agentes y voluntarios que registraban la propiedad de 10 hectáreas, cuyo único acceso es a través de un camino sin pavimentar que no tiene salida.

“Cerca de las 6:15 p.m., la madre del niño se percató de que uno de los perros de la familia estaba mojado y que el otro ladraba a la orilla de un canal. Entonces vio al niño en el agua y corrió a sacarlo”, reportó la policía.

“La mujer y un vecino lo llevaron a la orilla, donde los agentes comenzaron a. tratar de revivirlo dándole respiración artificial. Debido a lo accidentado del terreno y a la distancia de una vía principal, los agentes lo transportaron en un auto patrullero al tiempo que seguían intentando salvarle la vida hasta que llegara el personal de rescate”.

El niño fue trasladado a un hospital del área donde los médicos lo declararon muerto a las 7:04 p.m.

Se cree que la tragedia fue accidental, aunque los investigadores no han dicho cómo el pequeño llegó hasta el agua.

“Los resultados de la investigación indican que estaba jugando con los perros en un patio cercado mientras su madre mantenía la puerta trasera abierta y lo vigilaba con regularidad”, dijeron las autoridades.

“Al parecer, mientras jugaba, el niño pudo abrir una verja y caminar unos 300 pies hasta un canal que está obstruido de la vista por árboles y arbustos”.

Traducción de Jorge Posada