La penosa descalificación de AMLO... hacia alguien que ni conoce

Fotos_ Cuartoscuro
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La Organización de las Naciones Unidas (ONU) reconoce que en el mundo actualmente existen 194 países soberanos, con independencia y gobierno propio. De ellos, solo tienen defensoría de los derechos humanos 89 naciones que, según los especialistas, solo pueden cumplir con su función si son independientes del poder y tienen capacidad para razonar y convencer con sus argumentos. Su fuerza radica en su legitimidad.

Ante la controvertida designación del Senado para que Rosario Piedra Ibarra ocupe la presidencia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) renunció al Consejo Consultivo, Alberto Athié Gallo, por considerar que es una imposición de los senadores de Morena, con lo que se “consuma el golpe a la autonomía del organismo”.

“Este es un golpe muy serio, tal vez el más serio que ha tenido la Comisión en sus años recientes, a lo cual, no solo yo, sino otros consejeros, nos hemos opuesto, no es la primera vez, ya ha habido otros intentos”.

Alberto Athié fue uno de aspirantes a ocupar la presidencia de la CNDH. Informó a la prensa que él y otros participantes preparan “un amparo apoyados por la Barra Nacional de Abogados para conseguir que determine la reposición del proceso limpio, democrático y abierto, donde los senadores voten públicamente por quien pueda ser el mejor candidato”.

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Señaló que para limpiar el proceso Rosario Piedra debe renunciar al cargo para que se convoque a nuevas elecciones. (Excelsior, 14 de noviembre de 2019)

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Un reportero preguntó al presidente López Obrador, en su conferencia mañanera, cuál era su opinión sobre la renuncia de Alberto Athié al Consejo Consultivo de la CNDH. A lo que contesto: “Imagínense un consejo de la CNDH. Estoy seguro que nadie sabe de él, yo ni sabía”. Su respuesta fue complementada con otros comentarios en los que afirmó que “organismos independientes como la CNDH y el Banco de México (Banxico) trabajaban encubiertamente o abiertamente a favor del régimen.”

En esa ocasión una reportera informó a López Obrador que Alberto Athié y José Barba Martín, en junio de 2017, habían presentado una denuncia en la Procuraduría General de la República (PGR) en contra del cardenal Norberto Rivera Carrera por no informar a las autoridades que 15 sacerdotes habían cometido pederastia y que, también Athié, había actuado contra los abusos de Marcial Maciel, superior de Los Legionarios de Cristo. (Reporte Indigo, 14 de noviembre de 2019)

La respuesta de López Obrador fue comentada negativamente en redes sociales en donde se planteó ¿Cómo es posible que Andrés Manuel López Obrador descalifique a alguien que no conoce? La respuesta sería que es posible por su megalomanía o por su ignorancia.

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A la renuncia de Alberto Athié se sumaron un día después las consejeras Mariclaire Acosta Urquidi, María Ampudia González, Angélica Cuellar y María Olga Noriega Sáenz.

En su texto enviado al Senado señalan que el nombramiento de Rosario Piedra es el inicio del “sometimiento abierto del organismo a quienes actualmente detentan el poder político. En consecuencia, no será posible mantener el principio de autonomía de gestión de la institución”. (Animal Político, 14 de noviembre de 2019)

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Al comentar López Obrador la renuncia de las cuatro consejeras comentó: “Ellos estaban ahí, eran los meros meros, o sea era lo mismo. Todas esas comisiones, ya lo hemos hablado aquí, los organismos, los institutos, con todo respeto, vean los antecedentes, se disfrazaban de sociedad civil cuando en realidad estaban participando abierta o encubiertamente a favor del régimen”. (Animal Político, 14 de noviembre de 2019)

Es un hecho que organismos como el Banco de México, la CNDH, el INE, el INAI y otros, creados por el Estado para transparentar la administración pública y combatir los abusos del poder, han sido útiles para poner límites al autoritarismo que caracteriza al presidencialismo mexicano.

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Lo observado en el casi primer año de gobierno de López Obrador es la demolición de esas instituciones, lo que en el caso de la CNDH configuraría la evidencia de que a la 4T le estorban los contrapesos “disfrazados de sociedad civil” que el Estado creó y que en los últimos años fueron relevantes para que él llegara al poder.

Poco a poco se regenera el autoritarismo del presidencialismo, es la manera de mandar “al diablo las instituciones”. Es el escenario en el que solo se escucha una voz. Empieza a las siete de la mañana.