Joe Biden confirma que sigue en carrera para la presidencia tras el debate: “Ya no hablo tan fluido como antes, pero sé cómo hacer este trabajo”

Biden, en un acto de campaña en Carolina del Norte este viernes 28 de junio.
Biden, en un acto de campaña en Carolina del Norte este viernes 28 de junio. - Créditos: @MANDEL NGAN

WASHINGTON.- A sabiendas de la debacle que desató su actuación en el debate con Donald Trump, y ante el pánico desatado entre los demócratas, el presidente, Joe Biden, dejó en claro este viernes que no se bajará de la carrera por la presidencia en un enérgico discurso en un acto de campaña en Carolina del Norte, su primer intento por contener la inédita crisis en la que quedó sumida su campaña.

“Amigos, sé que no soy un hombre joven, para decir lo obvio”, dijo Biden al cerrar su discurso, despertando una ovación en la multitud, que le gritaba ”¡Cuatro años más! ¡Cuatro años más!”. “Ya no camino tan rápido como antes. Ya no hablo tan claro como antes. Ya no debato tan bien como antes –admitió el mandatario, criticado como nunca–. Pero sé lo que sé. ¡Sé decir la verdad! ¡Sé cómo hacer este trabajo! ¡Sé cómo hacer las cosas! ¡Sé cómo millones de estadounidenses saben que cuando te derriban, te levantas!”, disparó, desafiante, cerrando uno de sus puños.

Biden respondió con esa frase y con la energía que le faltó en el debate al tsunami de desesperación desatado por los demócratas luego del duelo con Trump que mostró su peor versión. El presidente estuvo muy lejos de despejar las dudas que arrastró al debate, al mostrarse en varios tramos de la discusión desorientado, sin reflejos, con la mirada baja o perdida, y con fuertes dificultades para brindar respuestas articuladas, coherentes o contundentes aun en algunos de los temas en los que tenía la ventaja, como el acceso al aborto o la defensa de la democracia. Trump ofreció su habitual libreto de mentiras, hipérboles, declaraciones falsas, exageradas, o, también, desopilantes, pero dejó una imagen de solidez que Biden nunca llegó a conjurar, aun cuando era su principal misión.

En su discurso de este viernes en Carolina del Norte, uno de los estados “pendulares” en los que se decidirá la elección presidencial, Biden recopiló cada una de las mentiras de Trump, y volvió a decir que tiene “la moral de un gato de callejón”, en un intento por marcar el contraste que su campaña esperaba dejar en el debate, pero que Biden nunca logró amarrar del todo. Su desempeño terminó por capturar toda la atención, y marcó toda la discusión posterior al duelo. Así y todo, Biden se mostró decidido a seguir adelante.

“Estoy acá en Carolina del Norte porque planeo ganar esta elección en noviembre”, dijo Biden al comienzo del acto. “Vamos a preservar, proteger y defender nuestra democracia. Esto es lo que está en juego en esta elección: su libertad, su democracia y todo Estados Unidos”, dijo Biden, en un discurso en el que se mostró más enérgico y cómodo que en el estudio de CNN en el que se llevó a cabo el debate presidencial, aunque tosió varias veces.

“¿Vieron a Trump anoche?”, preguntó en otro momento, en relación al debate. “Batió un nuevo récord de más mentiras dichas en un solo debate”, insistió.

Punto de quiebre

El histórico debate marcó un punto de quiebre en la campaña presidencial, pero no por los motivos que esperaban la campaña de Biden. Lejos de su plan original, el equipo del mandatario tuvo que salir este viernes a reafirmar que Biden no se bajará y será el candidato presidencial demócrata, pese a la brutal presión desde todos los frentes. David Plouffe, estratega de la segunda campaña presidencial de Barack Obama, recurrió a un código de guerra utilizado por las Fuerzas Armadas para las peores crisis para describir el estado de la campaña demócrata: “DEFCON 1″.

“Por supuesto que no abandonará”, dijo el portavoz de la campaña de Biden, Seth Schuster, según indicó el sitio The Hill. Pero esa conversación ya estaba igual instalada, con un gran denominador común: la respuesta final sólo la tiene el propio Biden.

El equipo de Biden intentaba mantener el rumbo, pese a todo. Jen O’Malley Dillon, presidenta de la campaña demócrata, había sacado un comunicado unos minutos después de finalizado el debate que dejaba al descubierto el mensaje que quería instalar la campaña, inocuo y desconectado de la realidad luego de la actuación de Biden.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y la primera dama, Jill Biden, llegan a un mitin posterior al debate en Raleigh, Carolina del Norte, el 28 de junio de 2024
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y la primera dama, Jill Biden, llegan a un mitin posterior al debate en Raleigh, Carolina del Norte, el 28 de junio de 2024 - Créditos: @MANDEL NGAN

“Esta noche, el presidente Biden presentó una visión positiva y ganadora para el futuro de Estados Unidos, una visión en la que todos los estadounidenses tienen una oportunidad justa de alcanzar el sueño americano, en la que cada uno de nuestros derechos está protegido y en la que nuestro presidente lucha para fortalecer nuestra democracia, no derribarla”, dijo Dillon. “La actuación de Trump esta noche le recordó al pueblo estadounidense por qué lo despidieron hace cuatro años, y reforzó lo mucho que hay en juego este noviembre para el futuro de nuestro país”, agregó. Justamente por todo lo que está en juego, un coro creciente de voces pedía que Biden diera un paso al costado.

Un correo difundido por el cuartel de campaña demócrata en medio de las especulaciones sobre el futuro de Biden intentó mantener el foco en Trump. El mensaje enumeró algunas de las mentiras que el magnate lanzó durante el choque. Y uno de los voceros de Biden, James Singer, dijo: “Donald Trump es una amenaza para nuestra democracia, nuestra economía, nuestros derechos y la idea misma de Estados Unidos. No puede ser nuestro presidente”. Y cerró: “El debate de anoche sólo lo dejó más claro a los ojos del pueblo estadounidense”. Para muchos, incluso demócratas, el debate sólo arraigó las dudas sobre el propio Biden.