Entre peticiones de sanciones a Irán, Italia busca que el G7 haga una llamada a la moderación

ARCHIVO - El ministro italiano de Exteriores, Antonio Tajani, escucha a preguntas en una conferencia de prensa en el Ministerio de Exteriores en Roma, el miércoles 17 de enero de 2024. (AP Foto/Domenico Stinellis, Archivo)

ROMA (AP) — Las peticiones de nuevas sanciones contra Irán por sus ataques contra Israel y de prestar más ayuda a Ucrania para combatir la guerra de Rusia lideraban la agenda de los ministros de exteriores del Grupo de los Siete, reunidos desde el miércoles en la isla turística italiana de Capri.

En un encuentro durante el turno de presidencia de Italia, se esperaba que los miembros del G7 hicieran una petición conjunta a Israel de que muestre moderación tras el ataque iraní sin precedentes del fin de semana, en el que Teherán lanzó cientos de drones, misiles balísticos y de crucero hacia Israel.

El ministro italiano de Exteriores, Antonio Tajani, dijo que había hablado el martes con su homólogo israelí, Israel Katz, y había instado al país no sólo a desescalar cualquier reacción al ataque iraní, sino a cancelar los planes de ofensiva sobre la ciudad de Rafah, en el sur de Gaza.

En declaraciones a la cadena estatal RAI, Tajani dijo que esperaba que se enviara un mensaje similar desde la cumbre de cancilleres en Capri.

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La guerra de Israel en Gaza está ya en su sexto mes, y el ataque de Teherán aumentó la sensación de urgencia de la cumbre de tres días. La ministra alemana de Exteriores, Annalena Baerbock, hizo una visita de última hora a Israel antes de viajar a Capri el miércoles por la noche.

“Hablaremos sobre cómo puede evitarse una nueva escalada con más y más violencia”, señaló. “Lo que importa ahora es detener a Irán sin fomentar una escalada adicional”, dijo Baerbock, que pidió nuevas sanciones contra Teherán.

Alemania, un firme aliado de Israel, está entre los líderes en la Unión Europea y Reino Unido que instan a Israel a reducir tensiones y no tomar represalias por el ataque de Teherán, repelido en su mayor parte gracias a la asistencia de Estados Unidos y otros aliados.

El secretario británico de Exteriores, David Cameron, dijo que pediría “sanciones coordinadas contra Irán” en la reunión. Afirmó que Teherán orquesta “mucha de la actividad maligna en esta región”, desde la actividad de Hamás en Gaza a Hezbollah en el sur de Líbano y los rebeldes hutíes en Yemen, que atacan al tráfico naviero en el mar Rojo.

“Deben recibir un mensaje claro e inequívoco del G7, y espero que eso ocurra”, dijo Cameron a los medios durante una visita a Israel.

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Otro tema prioritario es la guerra en Ucrania iniciada hace dos años por Rusia. El ministro ucraniano de Exteriores, Dmytro Kuleba, está invitado a la cita el jueves. Se espera que reitere la necesidad de su país de material militar esencial como artillería, munición y sistemas antiaéreos mientras Rusia emprende ofensivas en el frente.

Estados Unidos y varios países europeos están barajando propuestas para utilizar los beneficios generados por miles de millones de euros de activos rusos congelados para ayudar a comprar armas y otros fondos para Ucrania, unas iniciativas que han ganado impulso en un momento en el que Ucrania se ve peligrosamente falta de municiones y los esfuerzos estadounidenses de reunir fondos para armas se estancan en el Congreso.

Los líderes de la UE tenían previsto comentar la propuesta en una cumbre del bloque el miércoles en Bruselas. Por su parte, el jefe de política exterior de la Unión Europea, Joseb Borrel, acudiría a la cumbre en Capri.

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Fatima Hussein en Washington y Kirsten Grieshaber en Berlín contribuyeron a este despacho.