Israel recupera los cuerpos de seis rehenes sin vida en Gaza
Israel anunció el domingo la recuperación de los cuerpos de seis rehenes en Gaza, entre ellos un joven estadounidense-israelí cuyo caso había llamado la atención internacional. Este descubrimiento ha intensificado las tensiones en la región y ha provocado llamados a protestas masivas contra el Gobierno israelí.
Hersh Goldberg-Polin, de 23 años y originario de Berkeley, California, se convirtió en uno de los rostros más reconocibles de la crisis de rehenes. Capturado durante el ataque de Hamás el 7 de octubre en un festival de música en el sur de Israel, Goldberg-Polin perdió parte de su brazo izquierdo en el incidente. Su caso ganó notoriedad internacional cuando sus padres se reunieron con líderes mundiales, incluyendo una emotiva aparición en la convención demócrata el mes pasado.
Junto con Goldberg-Polin, las autoridades israelíes identificaron a los otros rehenes como Ori Danino, Eden Yerushalmi, Almog Sarusi, Alexander Lobanov y Carmel Gat. Todos ellos fueron capturados durante el ataque del 7 de octubre, ya sea en el festival de música o en comunidades cercanas.
El Ejército israelí informó que los cuerpos fueron hallados en un túnel en la ciudad de Rafah, en el sur de Gaza, a aproximadamente un kilómetro de donde otro rehén fue rescatado con vida la semana pasada. Según fuentes militares, se cree que los rehenes fueron asesinados por terroristas de Hamás poco antes de que las fuerzas israelíes llegaran a ellos.
Reacciones y consecuencias políticas sobre el alto el fuego
Este trágico descubrimiento ha desencadenado una ola de indignación y dolor en Israel. Muchas familias de rehenes y gran parte del público israelí culpan al primer ministro Benjamin Netanyahu por no lograr un acuerdo para la liberación de los rehenes. El incidente ha intensificado las críticas al manejo de la crisis por parte del Gobierno y ha llevado a protestas masivas.
Netanyahu ha comentado en un vídeo esta mañana: "Quien mata rehenes no quiere un trato (de alto el fuego)".
La guerra tiene una terrible estadística con la muerte de más de 1.200 israelíes y 40.000 palestinos, según fuentes locales. El conflicto ha desplazado a la mayoría de los 2,3 millones de habitantes de Gaza y ha sumido al territorio en una catástrofe humanitaria.
Las negociaciones para un acuerdo de alto el fuego y liberación de rehenes han sido largas y complicadas. Hamás ha ofrecido liberar a los rehenes a cambio del fin de la guerra y la liberación de prisioneros palestinos. Sin embargo, Netanyahu ha insistido en continuar las operaciones militares, argumentando que la presión es necesaria para asegurar el retorno de los rehenes.