Un informe del Servicio Meteorológico Nacional prevé un verano atípico
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) publicó este viernes el pronóstico trimestral para los meses de noviembre, diciembre y enero. El informe marca en el mapa argentino, con un rojo que va suave a intenso, la probabilidad de que las temperaturas de este verano sean más altas de lo habitual, y marca un escenario particular para el centro y noroeste argentino.
“En la mayor parte del territorio se esperan temperaturas de normales a superiores de lo normal. La zona que tiene mayor probabilidad de tener temperaturas superiores a las normales es la franja central del país (Mendoza, San Juan, San Luis, Santa Fe, Córdoba, La Pampa, Buenos Aires y Entre Ríos) y el Noroeste (Catamarca, Jujuy, La Rioja, Salta, Santiago del Estero, Tucumán)”, afirma Cindy Fernández, meteoróloga del SMN.
Las temperaturas “normales” dependen de la localidad. Puntualmente en la Capital Federal y alrededores, lo habitual para noviembre, diciembre y enero es que haya temperaturas mínimas promedio de entre 19°C y 20°C y máximas promedio de entre 29°C y 30°C. “Se espera que, en promedio, en los próximos meses las temperaturas sean más elevadas que estos valores. Es altamente probable que este verano sea muy caluroso, No se puede saber todavía qué tan caluroso porque eso varía semana a semana”, suma Fernández.
El pronóstico hace sentido si se observa el recorrido climático histórico de los últimos veranos. De acuerdo a los registros del SMN, los veranos en nuestro país están tendiendo a ser cada vez más cálidos. Entre los veranos más calurosos de los que se tenga registro, figuran en el primer y segundo puesto el del año pasado y el del anteaño, y en el cuarto puesto, el del 2021-2022.
“Hay una tendencia de que las temperaturas del mundo vayan aumentando, relacionado con el cambio climático, con lo cual también es probable que el verano que viene sea peor que este”, afirma Fernández.
En términos de precipitaciones, en tanto, el pronóstico trimestral muestra una tendencia de que en la región pampeana y en la patagónica se den lluvias inferiores a las normales, mientras que en el resto del territorio se esperan condiciones de lluvias normales.
¿Viene La Niña?
La llegada de La Niña, esperada desde hace meses, todavía es una incógnita. Si bien desde principios de 2024 la mayoría de los modelos climáticos preveían que este fenómeno climático, que genera veranos más secos y cálidos, arribará a fin de año, los pronósticos actuales lo ponen cada vez más en duda. Las predicciones que se esperaban para esta época del año no se cumplieron, y entonces los modelos climáticos comienzan a cambiar.
“Por ahora no ha comenzado ni está cerca de comenzar. El océano continúa con condiciones neutrales. Para declarar el fenómeno, tienen que cumplirse condiciones simultáneas, incluido el enfriamiento del Océano Pacífico, el cual tiene que perdurar cinco seis meses. Si bien hay una posibilidad de que el Pacífico se siga enfriando, por ahora no se ve que el enfriamiento persista el tiempo suficiente para que se declare La Niña”, sostiene Fernández.
Desde el SMN, las cada vez más bajas probabilidades de que se desarrolle La Niña durante el próximo verano son una buena noticia, ya que este fenómeno climático genera déficit de lluvias y favorece las olas de calor.
El hecho de no tener un verano con La Niña, sin embargo, no implica que las temperaturas no vayan a ser elevadas. De hecho se prevén temperaturas altas similares a las del año pasado, en que hubo olas de calor durante todos los meses del verano.
A corto plazo, destaca el pronóstico, se espera que en la ciudad de Buenos Aires la próxima semana de un respiro al calor extremo que venía habiendo. Se esperan a partir de este fin de semana temperaturas por debajo de lo normal para esta época del año. Sin embargo, durará poco. Los pronósticos oficiales muestran que tras este intervalo las temperaturas volverán a subir.