La nueva pero inacabada capital de Indonesia Nusantara celebra el día de la Independencia
En un escenario de grúas y edificios gubernamentales a medio construir, Indonesia conmemoró su 79º Día de la Independencia el sábado en Nusantara, la futura capital diseñada para aliviar la presión sobre la hundida Yakarta. Este evento histórico, que tuvo lugar en medio de la construcción en curso, simboliza el ambicioso proyecto de Indonesia para redefinir su futuro urbano y gubernamental.
El Presidente Joko Widodo y su Gabinete asistieron a la ceremonia en el nuevo Palacio Presidencial, una estructura imponente con forma de Garuda, el águila mitológica protectora de Indonesia. Este edificio, aún en construcción, se erige como un símbolo de las aspiraciones del país para su nueva capital.
Originalmente planeada como la inauguración oficial de Nusantara, la celebración se vio reducida debido a retrasos en la construcción. El evento, que inicialmente esperaba contar con 8.000 invitados, se limitó a 1.300 debido a la infraestructura insuficiente, subrayando los desafíos que enfrenta este ambicioso proyecto.
Dónde está Nusantara y qué proyectos de construcción llevan a cabo
Nusantara, ubicada en la isla de Borneo, se concibe como una ciudad futurista y ecológica, diseñada para abordar los apremiantes problemas de Yakarta, incluida la amenaza de que un tercio de la ciudad actual pueda quedar sumergida para 2050 debido a la extracción incontrolada de aguas subterráneas y el aumento del nivel del mar causado por el cambio climático.
La construcción de Nusantara, que abarca 2.600 kilómetros cuadrados de selva de Borneo, comenzó a mediados de 2022. Los planificadores visualizan una ciudad verde, abundante en bosques y parques, impulsada por energías renovables y con una gestión inteligente de residuos. Sin embargo, el proyecto ha enfrentado críticas de ecologistas y comunidades indígenas, quienes argumentan que daña el medio ambiente, amenaza especies en peligro de extinción como los orangutanes y desplaza a pueblos indígenas que dependen de la tierra.
La financiación del proyecto, con un presupuesto estimado de 33.000 millones de dólares, depende en gran medida de la inversión del sector privado, con el Gobierno contribuyendo solo el 20%. Para atraer inversores, Widodo ha introducido recientemente incentivos, incluyendo derechos de tierra de hasta 190 años y sustanciales beneficios fiscales.
A pesar de los desafíos, el presidente Widodo ya ha comenzado a trabajar en el nuevo palacio presidencial de Nusantara, celebrando su primera reunión de gabinete allí el martes pasado. Este movimiento simbólico subraya la determinación del Gobierno para avanzar con el proyecto, a pesar de las incertidumbres y retrasos.
Con una población de aproximadamente 275 millones de habitantes, Indonesia es la economía más grande del sudeste asiático. El proyecto Nusantara representa no solo un cambio geográfico, sino también una visión audaz para el futuro del país. Sin embargo, con Widodo programado para dejar el cargo en octubre después de 10 años de liderazgo, el futuro de Nusantara y su cronograma de finalización permanecen inciertos.