Con héroes inesperados, los Lakers dan el primer golpe ante los Grizzlies

Con Rui Hachimura y Austin Reaves como héroes inesperados, los Lakers de Los Angeles vencieron con autoridad 128-112 este domingo en Memphis a unos Grizzlies que además, de empezar los playoffs con derrota, perdieron por lesión a su estrella, Ja Morant.

El explosivo base de Memphis se hizo daño en la mano derecha tras una fea caída cuando quedaban 5.48 en el último cuarto y ya no regresó a la cancha en el resto del encuentro.

Estos renacidos Lakers, que han llegado a las eliminatorias como séptimos del Oeste tras su desastroso inicio (2-10), firmaron una gran actuación colectiva con dos fantásticos recitales de Hachimura (29 puntos con un brillante 5 de 6 en triples) y Reaves (23 puntos, 9 de ellos seguidos en el último cuarto).

También selló una tarde excelente Anthony Davis, gigante bajo los aros con 22 puntos, 12 rebotes y 7 tapones, en tanto que LeBron James aportó 21 puntos y 11 rebotes.

Los Lakers arrebataron así el factor cancha a unos Grizzlies (segundos del Oeste) que fueron el mejor equipo en casa en la temporada regular (35-6).

Jaren Jackson Jr. encabezó a Memphis con 31 puntos, Desmond Bane consiguió 22 puntos y Morant sumó 18 tantos antes de lesionarse.

El español Santi Aldama, que en algunos tramos defendió a Davis, consiguió 8 puntos y 6 rebotes en unos Grizzlies desacertados en el triple (13 de 36) e inferiores a los angelinos en el rebote (40 por 53).

GOLPE EN LA MESA DE LOS LAKERS

Los Lakers no parecieron intimidados por el ruidoso e intenso ambiente del FedExForum de Memphis y dominaron el primer cuarto impulsados por el potente arranque de Davis (8 puntos, 5 rebotes y 3 tapones en el primer cuarto).

Los Grizzlies llegaron a verse 10 puntos abajo en el periodo inicial pero estrecharon el marcador camino del segundo cuarto (30-25) gracias a la producción en el interior de Jackson Jr. (8 puntos).

El conjunto de Taylor Jenkins empezó a acusar la falta de altura y músculo de su rotación, especialmente con la ausencia de los lesionados Steven Adams y Brandon Clarke.

Además, Dillon Brooks sumó su tercera falta cuando todavía quedaban 9 minutos para el descanso.

Los angelinos aprovecharon todo esto haciéndose fuertes en la zona con ejemplos claros como un taponazo de LeBron a Bane.

Sin embargo, los de Darvin Ham se enredaron a mediados del segundo cuarto con una sucesión de pérdidas de balón, errores de concentración, fallos en el triple (triste 5 de 18 en la primera mitad) y faltas en ataque que permitieron que los Grizzlies, con 19 puntos de un Jackson Jr. sensacional, se marcharan al descanso por delante (65-59).

Aun así, el gran susto para los Lakers fue que, a un minuto del descanso, Davis se fue el vestuario tras hacerse daño en el brazo derecho.

“No puedo mover mi brazo”, decía el pívot mientras abandonaba la cancha con lo que parecía algún tipo de pinchazo, pero tras unos minutos de escalofríos para los fans de púrpura y oro Davis estuvo de vuelta cuando arrancó la segunda mitad.

En la reanudación, Bane entró en combustión con 7 puntos seguidos para Memphis y Morant conectó dos triples seguidos.

La respuesta de los Lakers llegó de la mano de un muy inspirado Hachimura, fabuloso con cuatro triples en el tercer cuarto y que condujo a su equipo al último cuarto con ventaja (90-96).

La lesión de Morant a mediados del último cuarto marcó un desenlace del encuentro en el que se creció de forma espectacular Reaves, quien, además de maravillar con 9 puntos seguidos en el tramo final, se lució además con un precioso pase por la espalda para un triple frontal de Hachimura.

Davis seguía siendo un titán en defensa y los Grizzlies, ya sin Morant, claudicaron ante unos Lakers que cerraron el último cuarto con un contundente 22-32 para empezar los playoff con paso firme.