Fracasa una moción de censura de la oposición japonesa contra el Gobierno de Kishida
Tokio, 20 jun (EFE).- El principal partido de la oposición de Japón presentó este jueves una moción de censura contra el Gobierno que lidera Fumio Kishida, que fracasó con los votos en contra de la coalición gobernante, que ostenta la mayoría parlamentaria, y que buscaba la convocatoria de elecciones anticipadas.
"El Gabinete de Kishida es reacio a implementar reformas políticas y ya no podemos confiarles la dirección del país. Deberían dimitir inmediatamente o disolver la Cámara de Representantes y pedir la confianza del pueblo", dijo Kenta Izumi, líder del principal partido opositor, el Partido Demócrata Constitucional de Japón, sobre la motivación en declaraciones recogidas por la cadena estatal NHK.
Esta es la primera vez que se presenta una moción desde el intento fallido del pasado diciembre, que llevó, sin embargo, a la sustitución de varios miembros del Ejecutivo de Kishida, incluido el entonces portavoz y número dos del Gobierno, Hirokazu Matsuno.
La iniciativa fue rechazada por 288 votos en contra, en su mayoría del gobernante Partido Liberal Democrático (PLD) y su socio en coalición, el budista Komeito, que cuentan con la mayoría de escaños, y 167 a favor, detalló la citada cadena.
"El Gobierno está trabajando con temas pendientes que no podemos dejar, por lo que rechazaremos la moción y continuaremos con las reformas políticas para recuperar la confianza del pueblo japonés", dijo hoy el actual portavoz gubernamental, Yoshimasa Hayashi, en una rueda de prensa a primera hora del día, tras presentarse la moción.
El partido gobernante viene sufriendo una serie de escándalos después de que saliera a la luz una demanda penal contra varias facciones del partido alegando que varias de ellas y de sus miembros no habrían declarado correctamente ingresos millonarios procedentes de eventos de recaudación de fondos para la formación realizados al menos entre 2018 y 2022.
El caso llevó a Kishida a tomar la decisión de abandonar la jefatura de su facción (una agrupación política dentro del mismo partido) para distanciarse de las sospechas, pero el movimiento podría dificultar su continuidad como líder.
La legislatura del actual primer ministro nipón, quien lleva meses con cifras de aprobación popular bajo mínimos, expira en octubre de 2025, pero en 2024 deberá afrontar unas primarias internas en el PLD para poder mantenerse al frente del Gobierno.
En Japón es el líder del partido más votado quien ostenta la jefatura de Gobierno, por lo que su salida al frente del PLD conllevaría la investidura de un nuevo primer ministro, su sucesor, hasta el vencimiento de la legislatura o la convocatoria de elecciones generales.
(c) Agencia EFE