Yahoo Noticias Exservidores de la nación exigen a Bienestar pruebas de sus faltas en el trabajo, tras señalamientos de la Secretaría
Exservidores de la nación que fueron despedidos por pedir vacaciones, horarios fijos y materiales para sus labores pidieron a la Secretaría de Bienestar mostrar las actas administrativas que sustenten los señalamientos en su contra, luego de que la institución afirmó que no se les renovó el nombramiento en el cargo por su falta de disposición al trabajo.
De acuerdo con los extrabajadores, derivado de que comenzaron con la conformación de un sindicato de servidores de la nación para exigir derechos laborales, recibieron “amenazas, hostigamiento laboral sistemático, humillaciones y malos tratos”, que terminaron con el despido de 12 personas en junio pasado.
Animal Político consultó a la Secretaría de Bienestar sobre las denuncias de los exservidores de la nación, a lo que la dependencia respondió que no hubo despidos, sino que se terminó su nombramiento, además de que tenían “retrasos, faltas injustificadas o negativas a trabajar”, versión que negaron las personas afectadas.
“Hay procedimientos claramente establecidos en a ley”
Ángel Sánchez, uno de los afectados, afirmó que “no hay fundamento en los argumentos de Bienestar, toda vez que nosotros fuimos despedidos de manera injusta e ilegal, hay procedimientos que están establecidos claramente en la ley, que establece que ante las faltas de los trabajadores se debe proceder con un acta administrativa, lo que no ocurrió en ninguno de los casos”.
Acerca de la falta de renovación de los nombramientos, Sánchez comentó que incluso el aviso del despido fue irregular, “porque fue así nada más de palabra, así manejan muchas cosas, y no les dan sustento por escrito”. Sin embargo, a pesar de que no recibieron la notificación en un documento, ya no les permitieron volver a su lugar de trabajo.
Alfredo Hamden, exservidor de la nación, pidió a la Secretaría de Bienestar “que exhiba el expediente de cada uno de nosotros para que compruebe lo que mencionó, de lo contrario estará mintiendo”.
“En mi caso, el despido fue una cuestión de acoso por la conformación del sindicato, quienes decidimos organizarnos sufrimos hostigamiento, nos aislaron en el espacio de trabajo para que no pudieran hablarnos otros compañeros, no podíamos pasar al baño como el resto de las personas y, finalmente, el 1 de julio ya no me permitieron trabajar”, refirió Hamden.
Otro de los servidores despedidos, Ángel Gutiérrez, también consideró que su despido estuvo relacionado con su adherencia al sindicato, por lo que reclamó que “se tiene que respetar la ley y es eso lo que le pedimos a la delegada de Jalisco y a Bienestar, porque los derechos laborales no son una dádiva ni una recompensa”.
Exservidores reclaman reconocimiento de incapacidades y horas extra
Marcela Martínez comentó que fue notificada por teléfono de que no sería renovado su nombramiento, por supuestas faltas, aunque ella presentó la documentación para que se tomara en cuenta que estuvo de incapacidad.
“Me enfermé y mandé por correo electrónico mis justificantes de incapacidad a recursos humanos, e incluso a la delegada, pero de todos modos me dijeron que me iban a dar de baja, lo que me parece injusto, por eso exijo que demuestren con actas administrativas lo que ellos dicen, porque desde mi experiencia lo que ocurrió fue acoso laboral”, agregó Martínez.
En el caso de Abraham Ramos, reconoció que en una ocasión tuvo un retraso, mismo que pidió que se considerara cubierto con las horas extras de trabajo, ya que afirmó que las jornadas de trabajo que cubrían llegaban a ser de hasta 15 horas.
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“Desde que comenzamos con el sindicato los tratos fueron despectivos, y cuando pedí hablar con mi jefe directo me mencionó que conmigo tenían un problema por participar en protestas, motivo por el que yo cuestioné si eso era ilegal, y en ese momento, como esta persona se dio cuenta que estaba grabando la plática bajó el tono”, detalló Ramos.
Después de ese episodio, el hostigamiento en su contra siguió, hasta el día en que lo despidieron, “quiero pensar que con el objetivo de no hacer crecer la semilla de la rebeldía entre nuestros compañeros, por la lucha por nuestros derechos”.
Y es que, según Rogelio Andrade, otro de los servidores despedidos, en los centros de trabajo “no teníamos papelería, agua, ni siquiera rollos de papel para el baño, todo lo teníamos que comprar, al igual que nuestros uniformes”, aunque “como vigilantes de los recursos del pueblo nos dábamos cuenta de que había fugas del dinero destinado para cubrir los gastos de todos estos materiales”.
Piden intervención de AMLO y Sheinbaum
El pasado 17 de agosto, los extrabajadores de Bienestar entregaron una carta al presidente Andrés Manuel López Obrador y a la presidenta electa Claudia Sheinbaum, en la que les solicitaron intervenir para la regulación de las condiciones laborales de quienes se encargan de entregar los programas sociales, así como la reinstalación de quienes fueron cesados.
En la carta entregada, los extrabajadores lamentaron que desde 2018, cuando pasaron de ser promotores del voto a servidores de la nación, “hemos esperado que se regularice nuestra situación laboral, de conformidad con lo señalado en el Artículo 123 de la Constitución, en el apartado B; es un anhelo legítimo aspirar a las prestaciones laborales que tienen los servidores públicos y buscar mejorar la calidad de vida de nuestras familias”.
“Los servidores de la nación somos parte de este gran movimiento, somos miles de hombres y mujeres que participamos en esta revolución pacífica. Sabemos los desafíos que enfrentan, tengan la seguridad de que estaremos como siempre del lado correcto de la historia, luchando a ras de suelo por esta cuarta transformación”, solicitaron al presidente y la presidenta electa.
“Les pedimos con todo respeto que no nos olviden, que no nos desechen, que no permitan que los delegados y funcionarios que representan a la institución sigan abusando de nosotros y pisoteando nuestros derechos más elementales”, expresaron.
En los próximos días, los extrabajadores agrupados en el Sindicato Nacional de Servidores de la Nación (SINASEN) viajarán de Jalisco a la Ciudad de México para protestar por su situación laboral, y acudirán a las oficinas de la Organización Internacional del Trabajo para entregar un escrito en el que hagan de conocimiento de este organismo lo ocurrido en la Secretaría de Bienestar.
“Todos los días hay despidos, pero en nuestro caso, fue por solicitar condiciones dignas de trabajo, por ejercer nuestra libertad de expresión, y eso no puede ser algo mínimo, menos en un gobierno de izquierda”, apuntó Alfredo Hamden.
