Estudiantes que denunciaron a Diego N por violencia digital entregan pliego petitorio al IPN; exigen apoyos y reparación del daño
Estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) que denunciaron a Diego N por cometer el delito contra la intimidad sexual en su contra entregaron un pliego petitorio a Mauricio Jasso, secretario general de esa institución educativa, para pedir apoyo académico a las víctimas, reparación del daño y que el agresor no pueda reingresar a dicha institución.
Esto tras convocar a una movilización contra la violencia digital en la Escuela Superior de Comercio y Administración (ESCA) Santo Tomás, de donde Diego N fue dado de baja definitiva el 16 de octubre de 2023 por las acusaciones de alterar con inteligencia artificial las fotografías de sus compañeras estudiantes para crear contenido sexual íntimo y comercializarlas.
Alrededor de las 2:30 de la tarde, las estudiantes víctimas leyeron el pliego petitorio junto a integrantes de la Asamblea Colectiva de Justicia Digital, la cual se conformó luego de que el 6 de octubre de 2023 alumnas de Mercadotecnia Digital detectaron en flagrancia a Diego N, entonces compañero de la misma carrera.
Cerca de las tres de la tarde las manifestantes cerraron Avenida de los Maestros en el cruce con Manuel Carpio. Dulce María Monroy Becerril, directora de la ESCA Santo Tomás, ofreció hablar con ellas.
Sin embargo, las estudiantes víctimas y las manifestantes de la Asamblea Colectiva de Justicia Digital pidieron reunirse con los secretarios general y académico del IPN. Dieron como tiempo límite las 4:10 de la tarde o cerrarían Circuito.
Minutos antes de las cuatro de la tarde, el secretario general Mauricio Jasso ofreció un diálogo. Así ingresaron a la institución nueve personas entre estudiantes víctimas, madres de familia e integrantes de la asamblea y la protesta que bloqueaba la circulación en ambos sentidos fue retirada.
¿Qué dice el pliego petitorio entregado al IPN por estudiantes víctimas de violencia digital?
Diego N fue absuelto de cometer el delito contra la intimidad sexual a dos estudiantes del IPN por el juez Francisco Salazar Silva el 4 de diciembre de 2024 y por eso la Asamblea Colectiva de Justicia Digital solicitó la adopción de cinco medidas en un pliego petitorio.
Por ejemplo, la prohibición definitiva del reingreso de Diego N al IPN porque “representaría un acto de revictimización para las estudiantes afectadas y una amenaza directa para la seguridad de toda la comunidad estudiantil”.
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El segundo punto es la implementación de un programa de apoyo académico prioritario que incluya revalidación de materias y flexibilización de requisitos académicos para las víctimas, horarios y evaluaciones adaptadas a sus necesidades. También piden acompañamiento psicológico especializado, continuo y gratuito.
El tercer punto del pliego petitorio es sobre garantías de seguridad para las estudiantes; es decir, protocolos de atención en casos de violencia de género, espacios seguros y un sistema de denuncia digital accesible y confidencial, con seguimiento transparente, para casos de violencia digital.
El cuarto punto del pliego petitorio es sobre capacitación institucional en violencia digital y perspectiva de género obligatoria para docentes, personal administrativo y autoridades. Este punto también incluye campañas de sensibilización.
“Demandamos que el IPN reconozca públicamente su responsabilidad al no garantizar la protección adecuada para las alumnas frente a este caso y otros similares”, se lee en el quinto punto del documento.
Esto implica un plan de acción contra la violencia digital con metas, plazos y recursos. Además exigen garantías de no represalias hacia las estudiantes que se han organizado para exigir justicia y participar en la asamblea.
Víctimas de caso Diego N de violencia digital anuncian descanso mediático
Durante la movilización contra la violencia digital en la ESCA Santo Tomás, las víctimas que denunciaron a Diego N anunciaron que tomarán un descanso de la exposición mediática y pública.
“Esta decisión no implica que abandonaremos el caso ni que nuestra lucha se debilite; al contrario, nuestra determinación de alcanzar justicia sigue más viva y fuerte que nunca”, pronunciaron.
Entre los motivos de este descanso están los ataques de grupos de choque y los procesos judiciales que atraviesan.
“No es una despedida, es un momento de pausa. Nuestra lucha no termina hasta que haya justicia”, dijeron las sobrevivientes de violencia digital.