Erik Lamela tuvo una emotiva despedida de Sevilla y respondió sobre un posible regreso a River

Erik Lamela, en su despedida de Sevilla
Erik Lamela, en su despedida de Sevilla

En los tres años que estuvo en Sevilla, Erik Lamela no consiguió la continuidad que hubiese querido a causa de las lesiones. Desde la primera temporada, una recuperación en un hombro le impidió estar en varios partidos. En este último curso, diversas afecciones, musculares, en la espalda y en un pie, lo marginaron en 23 encuentros. Cuando el físico le respondió plenamente, en la temporada pasada, tuvo varios cotejos de corrido, con algunas apariciones estelares, que le valieron quedar en la historia del club, que este martes le dio la despedida que se reserva a los futbolistas que marcaron algún hito.

Lamela se abraza con En-Nesyri, delantero de Sevilla
Lamela se abraza con En-Nesyri, delantero de Sevilla

En el antepalco del estadio Ramón Sánchez Pizjuán, “Coco” Lamela recibió el afecto y los buenos deseos de los principales dirigentes de Sevilla y de sus compañeros. Su contrato vence el 30 de junio, momento en el que pasará a ser agente libre. “Solo tengo palabras de agradecimiento por esta despedida, me emocionó mucho el video. Como todas las despedidas, tienen algo de tristeza. Entiendo que los ciclos se terminan. Desde el primer momento me recibieron de la mejor manera, me hicieron sentir como en mi casa para que yo solo me ocupara de jugar al fútbol. Hay gente muy valiosa que no es conocida, pero que nos hace las cosas más fáciles, como los cocineros, los utileros, la gente de lavandería, los fisioterapeutas, doctores. Le agradezco a Monchi (el exdirector deportivo, ahora en Aston Villa). Pasé tres años maravillosos en este club”, expresó Lamela cuando le tocó subir al estrado, luego de la presentación y la emisión de un video con diferentes momentos de sus tres temporadas.

Lamela y River

El paso de Lamela por Sevilla quedará fuertemente vinculado con un momento puntual. Para Sevilla, la Europa League es una competencia especial, fuente de muchas satisfacciones y la plataforma para proyectarse a Europa. De los siete títulos de Europa League que obtuvo en su historia, cinco fueron en la última década. Se transformó en una especialista en esa copa. Y en la última consagración, Lamela ocupó un lugar central en la semifinal frente a Juventus, que tenía a Ángel Di María y Leandro Paredes. La ida en Turín y el desquite en España finalizaron 1-1. En el alargue, Lamela, que había reemplazado a Lucas Ocampos, puso el 2-1 con un cabezazo que hizo estremecer a todo Nervión. Fue el tanto de la clasificación a la final de Budapest, en la que se impuso a Roma en la definición por penales, con una conversión del media-punta surgido en River.

“Ganar el año pasado la Europa League hizo que este club se meta de lleno en mi corazón. Fue algo inolvidable, pude llevar a mis padres, a mi mujer e hijos. Me quedó la espinita de la Supercopa de Europa (derrota ante Manchester City). Soy feliz de haber devuelto un poquito de todo lo que este club me dio a mí, como la ciudad en general, donde nació mi última hija. Fue un honor y privilegio haber vestido esta camiseta. Gracias eternas”, expresó Lamela, que recibió una camiseta enmarcada con el N° 92, la cantidad de partidos oficiales disputados, en los que anotó 16 goles y dio siete asistencias.

El gol de Lamela con el que entró en la historia de Sevilla

Con 32 años cumplidos en marzo, Lamela debe definir su futuro futbolístico. Todavía no lo tiene decidido. Entre las consultas que le hizo la prensa, una estuvo referida a la posibilidad de un regreso a River, que se reforzará en varias líneas para los play-off de la Copa Libertadores. “No lo sé sinceramente, no quiero crear falsas expectativas (por la vuelta a River). Estoy en un momento en el que solo pienso en recuperarme de esta pequeña lesión. Ya arranco a correr en estos días, tengo todas las vacaciones para prepararme para la próxima pretemporada. El club que me quiera tendrá que contactarse conmigo y si hay interés yo voy a poner el mío. No tengo definido mi futuro”, respondió Lamela, que cuando tenía 14 años y estaba en las divisiones inferiores River le aseguró un contrato ante una oferta de Barcelona para que se trasladara con toda su familia a la ciudad catalana.

Lamela, con su esposa, sus tres hijos y la Europa League que Sevilla conquistó hace un año
Lamela, con su esposa, sus tres hijos y la Europa League que Sevilla conquistó hace un año

Lamela, con 18 años, participó en 32 partidos de la temporada 2010/11 y en los dos encuentros de la Promoción ante Belgrano que marcaron el descenso de River. En agosto de 2011 fue transferido a Roma en 17 millones de euros y en 2013 pasó por 30 millones a Tottenham, donde estuvo ocho temporadas y en 2011 recibió el Premio Puskas al mejor gol por una definición de rabona.

En los saludos grabados por sus compañeros, aparecen los testimonios de Ocampos y Marcos Acuña, que reveló el nuevo apodo que le pusieron en Sevilla: “Perri”, por perrito. Lamela lleva 13 años en el fútbol europeo y pasó por tres ligas distintas. Hoy, su experiencia y pegada de zurda ya están en el mercado de pases.