Han desatado la bestia. Peleador de la UFC busca la redención en el Apex Center de Las Vegas

Ignacio “La Jaula’’ Bahamondes afirma que todo cambió en el peor momento.

El chileno, de 26 años, viene de perder por decisión ante L’udovit Klein, un resultado que detuvo el impulso que construyó durante un período de dos años, a base de sacrificio, sudor y sangre.

Bahamondes siempre ha sabido recuperarse luego de cada una de sus derrotas y ahora espera hacer lo mismo este sábado cuando se enfrente a Christos Giagos en el evento UFC Fight Night: Allen contra Curtis 2, que tendrá lugar en el Apex Center de Las Vegas.

Bahamondes ha mostrado progreso de pelea en pelea, pero nunca olvidará que sus verdaderos inicios fueron en Miami cuando lo dejó todo atrás en busca de un sueño que va tomando forma y que, de llegar a cumplirse, lo situaría como el ejemplo que desea ser para la juventud de América Latina.

¿Cómo piensas sacarte la espina de la derrota?

“Desde que terminó la pelea lo dije: acaban de desatar a la bestia. Siempre que pierdo vuelvo mucho mejor que antes. A nadie le gusta perder, pero me ayudó a ser mejor dentro y fuera de la jaula. Soy una persona completamente distinta, maduré bastante en este tiempo. Vinieron cosas malas, pero eso me ayudó a ser más fuerte, más maduro y a crecer como persona y deportista’’.

¿Qué cambio veremos en esta pelea?

“Se vinieron cosas malas, pero eso me ayudó a ser más fuerte, más maduro y a crecer como persona y deportista. .Este sábado van a ver a una Jaula mucho más rápido, más fuerte, más inteligente y con el instinto asesino de siempre’’.

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¿Pero te podría nublar esa bestia el plan de pelea?

“Este juego no es solo pelear y agarrarse a trompadas, sino pelear con inteligencia. Eso es lo que importa. Saber ocupar tus ventajas y atacar las debilidades del otro. Entonces, siempre con la mente fría, puños calientes, básicamente’’.

¿Cómo fue la preparación específica para Giagos?

“Es un peleador muy completo que sabe golpear arriba, sabe luchar, entra a los derribos. Lo principal de este campamento fue usar todas mis herramientas en el momento exacto, ser inteligente, controlar los tiempos de la pelea. Eso va a marcar la diferencia desde el inicio’’.

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¿Qué significa esta pelea en este momento de tu carrera?

“Creo que la UFC me mandó esta pelea de prueba. Ellos quieren ver si puedo seguir al siguiente escalón o no. Estoy muy ansioso porque estoy listo para los mejores del mundo y Giagos es uno de los mejores del mundo. Estoy listo para enfrentarlo, darlo todo y salir con la mano en alto, apuntando al cielo’’.

Sé que entrenaste con el ecuatoriano Michael Morales.

“Sí, él estuvo de paso aquí en Valle Flow. Fueron como dos semanas. Es un joven muy talentoso. Su lucha es muy buena, es fuerte, grande. Estuvimos muy felices de tenerlo acá y compartir algunos rounds con él’’.

Sabemos que Belal Muhammad es una especie de mentor.

“Belal siempre me está empujando. Es quien más me cuesta en el gimnasio, el que más me está empujando la cabeza, me hace cansar, me saca lo mejor de mí. Le doy gracias a Dios por tener a alguien como él para compartir sangre, sudor y lágrimas a veces. De él he aprendido no solo cosas del deporte, sino de la vida, de su mentalidad. Todos los días aprendo mucho de él’’.

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¿Sientes que la gente te reconoce más, los fanáticos?

“Este deporte está creciendo muy rápido, más en Latinoamérica que está llena de talentos, solo faltaba que explotara y eso es lo que ha pasado en estos últimos años. Lo tenemos en la sangre. Somos peleadores desde chicos. Solo crecer en un país Latinoamérica tienes que ser guerrero. Tenemos la lucha de todos los días. Eso nos hace más fuerte. No nos rendimos con nada’’.

Brandon Moreno, Ilia Topuria, Chito Vera, ¿qué dejaría Bahamondes?

“Quiero que mi nombre esté marcado con oro en el libro de las artes marciales mixtas en Chile y en el mundo. Quiero ser ejemplo para las generaciones que vienen. Tengo una hermanito que viene peleando, mis sobrinos vienen peleando y quiero ser el mejor ejemplo dentro y fuera de la jaula. Que me vean como un atleta profesional. Hoy en día hay demasiados malos ejemplos. Yo quiero guiarlos por el buen camino. Ser un hombre correcto, de fe, que trabaja duro por lo que quiere y lo logra’’.