La oposición venezolana en España se moviliza contra un "fraude electoral" en su país

Madrid, 29 jul (EFE).- La oposición venezolana que reside en España, donde están exiliados líderes antichavistas como Leopoldo López y Antonio Ledezma, se movilizó este lunes para denunciar un "megafraude" en las elecciones en Venezuela, cuyo resultado dividió a las fuerzas españolas según su orientación política.

Ledezma, exalcalde de Caracas y representante de la oposición venezolana en el exterior, fue uno de los asistentes a una manifestación en Madrid para pedir apoyo internacional para investir presidente al candidato opositor Edmundo González frente a Nicolás Maduro, proclamado vencedor de los comicios del domingo.

El Comité Nacional Electoral venezolano le da como ganador con un 51,20 por ciento de los votos, pero los participantes en la marcha denunciaron que González alcanzó el 70 por ciento y Maduro apenas el 30.

"Vamos a seguir luchando", fue una de las consignas de la protesta, que respaldaron representantes del conservador Partido Popular (PP) español y del ultraderechista Vox.

Al respecto, Ledezma aclaró que "todos los partidos españoles fueron invitados", en alusión a la ausencia del socialista PSOE del presidente del Gobierno español Pedro Sánchez.

Los manifestantes corearon gritos de "Edmundo presidente" y "libertad", mientras ondeaban banderas venezolanas y cantaban el himno de su país, algunos entre lágrimas ante el temor que de fuera su "última oportunidad de recuperar la democracia y volver a Venezuela".

Más de 400.000 venezolanos residen en España.

"En pide de lucha"

Antes de la manifestación, Ledezma y otros opositores habían llamado a mantenerse "en pie de lucha" frente al "autogolpe" de Maduro, exhortando a organismos internacionales como la ONU a "la revisión de cada una de las actas" de votación.

En esa línea, Leopoldo López denunció un "fraude que no es sostenible" ni ante los venezolanos y ni frente a la comunidad internacional.

El ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, pidió que se respete la voluntad democrática de Venezuela con "la presentación de las actas de todas las mesas electorales para garantizar resultados plenamente verificables".

Albares reclamó que "se mantengan la calma y el civismo con los que transcurrió la jornada electoral", tras la que surgieron protestas como una cacerolada en Caracas al conocerse el resultado.

El líder de los conservadores españoles, Alberto Núñez Feijóo, advirtió de que "Venezuela votó ayer masivamente en paz a favor de una transición a la libertad. Hay fundadas razones para pensar que el resultado anunciado por el régimen no responde a lo que votó el pueblo".

Los conservadores, principal fuerza de oposición en España, han expresado su apoyo a la oposición venezolana reiteradamente y han protestado porque Caracas no permitió la entrada en el país de una delegación del PP que pretendía realizar una misión de observación electoral que no había sido autorizada por el Gobierno de Maduro.

Un representante de este partido demandó al Gobierno español, una coalición de izquierda, que llame a consultas al embajador de España en Venezuela.

Reacciones divididas

Por el contrario, el portavoz de la formación de izquierda Sumar Enrique Santiago, que forma parte de la coalición gubernamental, dio la enhorabuena por la victoria de Maduro e instó a la oposición venezolana a aceptar los datos.

También en la izquierda, la dirigente de Podemos Irene Montero indicó que la comunidad internacional y los observadores internacionales "deben garantizar" el respeto de los resultados dentro y fuera del país.

El foro de Madrid, impulsado por Vox, aseguró que hubo un fraude masivo, en una declaración firmada por casi trescientos parlamentarios y cargos públicos de 26 países de Europa y América, como La Libertad Avanza de Argentina, Comunidad Ciudadana y Creemos de Bolivia, Centro Democrático de Colombia y los partidos Republicano de Chile, Nacional de Honduras, PAN de México, Colorado de Paraguay, Avanza País de Perú, PQDC de República Dominicana y Nacional de Uruguay.

(c) Agencia EFE