Velez vs. Argentinos: el papelito que ayudó a Marchiori en los penales, y la polémica por la expulsión de Braian Romero

El papel de ayuda que recibió Marchiori, el arquero de Vélez, en la definición por penales contra Argentinos
El papel de ayuda que recibió Marchiori, el arquero de Vélez, en la definición por penales contra Argentinos - Créditos: @Redacción LA NACION

La historia, dicen, comenzó hace unos 18 años, con aquel cruce en el que Alemania le ganó por penales a la Argentina en el Mundial 2006, en suelo germano, la tarde en la que Jens Lehmann, el arquero de Alemania, pasó a la historia como el que recibió un trozo de papel que indicaba adónde podían patear los futbolistas de nuestro país. “Todos los penales argentinos en los últimos tres años habían sido estudiados”, le contó Lehmann, que atajó los remates de Roberto Ayala y Esteban Cambiasso, hace algunos años, a LA NACION.

Desde entonces, en varias definiciones por penales, alrededor del mundo, se repitió la escena del arquero leyendo un ‘machete’ acercado por alguien del cuerpo técnico, con los nombres de los posibles pateadores y el lugar al que pueden ejecutar o cómo suelen rematar. La primera semifinal de la Copa de la Liga, entre Vélez y Argentinos Juniors, no fue la excepción. Y antes de comenzar el desempate desde los doce pasos, se pudo ver algo de la ‘ayuda memoria’ que recibió Tomás Marchiori, el arquero de Vélez.

“32 (el número de camiseta) Gondou (Z, por zurdo) cruza”, marcaba el papelito. Un acierto: efectivamente, el delantero de Argentinos cruzó el remate, y Marchiori se arrojó a su izquierda para tapar un penal decisivo, el cuarto del Bicho, que dejaba el duelo match-point. La lista también menciona a Leonardo Heredia, con la mención “cruza”; en este caso, el atacante levantó su tiro sobre el travesaño. En tanto, Marchiori se arrojó bien al palo que eligió Gastón Verón, pero el remate tuvo buena dirección y potencia, y no lo pudo alcanzar, mientras que Franco Moyano tiró fuerte y el medio.

La definición por penales llegó tras noventa minutos de un partido tenso y con varias emociones, más allá del 0 a 0 que no se movió en el marcador. Y que bien temprano tuvo una acción inusual, como lo es la expulsión de un jugador casi en el arranque del juego.

Apenas iban 11 minutos cuando Braian Romero, uno de los responsables de que el equipo de Liniers pudiera llegar hasta estas instancias, fue muy fuerte a disputar una pelota con Román Vega. El delantero del Fortín elevó demasiado su botín e impactó de lleno sobre la pantorrilla izquierda de su rival.

Inicialmente, el árbitro Facundo Tello lo amonestó. Pero el airado reclamo de los jugadores de Argentinos y la revisión del VAR provocó que el juez principal fuera llamado por Mauro Vigliano (a cargo del VAR) y Hernán Mastrángelo (AVAR) para observar la acción.

Tello fue entonces hasta el monitor, donde volvió a ver la jugada y cambió el color de su tarjeta de amarilla a roja. Romero, sorprendido como todos sus compañeros, le plantearon entonces al árbitro que quizás la decisión era demasiado castigo. Sin embargo, no hubo vuelta atrás.

Desconsolado, Romero se fue rumbo al vestuario cubriéndose el rostro con la camiseta y pidiéndole perdón a los hinchas, consciente de que además de dejar a su equipo con un hombre menos durante gran parte del partido ante el Bicho, en caso de que Vélez avance a la final tampoco podrá ser parte del duelo decisivo.