Víctor Laplace, sobre Nélida Lobato: "Cuando se murió, tuve que subir al escenario con el corazón destrozado"

Víctor Laplace señaló a Nélida Lobato como uno de sus grandes amores

Víctor Laplace recordó esta tarde sus inicios artísticos en su Tandil natal, cuando hacía recitados en la metalúrgica de esa ciudad. Mucho tiempo ha pasado desde entonces, y hoy se ha convertido en un actor prolífero, que filmó más de cien películas y protagonizó otras tantas obras de teatro y programas de televisión. "No hay nada que me guste más que armar un proyecto y realizarlo con gente joven, porque me nutro", contó en Pampita Online, y adelantó que la próxima semana estrena un film que dirigió, El plan divino, protagonizado por Gastón Pauls.

"Estoy feliz con todo lo que hago, con mi nieta Aurora que pronto cumple dos años. Soy un abuelo baboso y quiero hacerme el guapo. Pero ella me agarra de la mano y me lleva. Es divina la criatura y mi hijo Damián, está muerto de amor. Y Renata Schussheim es la abuela conmigo, y es un placer compartirlo con ella. La familia es muy importante", destacó Laplace.

Emocionado, el actor contó que sus dos grandes amores fueron la artista plástica y la fallecida vedette Nélida Lobato. "Me gustan las mujeres fuertes porque ahí uno se nutre y aprende. Aprendí a ser hombre con Nélida. Quiero decir que ella no me decía nada y yo pensaba: 'Me está queriendo decir tal cosa'. Yo era un joven peronista, contestatario. Y un día me dijo que teníamos que ir al Lido de París. Ahí, de pronto, pusieron dos faroles en la mesa que compartíamos y dije: 'Guau, esta mujer es muy grosa", contó.

Laplace junto a Nélida Lobato, en una publicidad de whisky de finales de los 70

Además Laplace recordó: "Cuando Nélida se murió, tuve que subir al escenario con el corazón destrozado. Merecía salir adelante porque era fuerte, no fumaba, comía sano y tuvo cáncer al hígado. Me pasaron cosas duras en la vida, estuve exiliado, por ejemplo, y me recupero gracias al análisis, al yoga y a mi entorno".

El actor se retrotrajo en el tiempo y recordó momentos románticos. "Una vez me fui a España por amor y estuve un año y medio con una actriz española. Morí de amor. A veces hay un final de las cosas y otras no. Me emociona ver parejas que hace años que están juntos y van agarraditos de la mano", señaló.

Sin embargo, Laplace asegura que por el momento su estado civil es más cercano a la soltería que a otra cosa. "Tengo muchas amigas. Creo mucho en la amistad entre el hombre y la mujer. No sé qué es el poliamor. Yo soy monógamo. Quise siempre largo tiempo una sola mujer, aunque a veces me desbanco, pero vuelvo. Hoy tengo amigas. Siempre tuve mujeres fuertes, inteligentes, bellas y eso es un valor agregado", reflexionó.

También recordó su infancia: "Papá era joyero relojero y mamá, ama de casa, y cantaba tangos muy bien. Papá amaba mucho a mamá y le dibujaba una maceta con un cactus y la cara de él, y le decía que en ese dibujo iba el alma". Si bien contó que tuvo una buena relación con su papá, eligió criar de una forma diferente a su único hijo, Damián. "Tuve el privilegio de tener con mi hijo una relación que en mi época no teníamos. Recuerdo que yo le preguntaba a mi papá por qué mamá caminaba un metro atrás, y él me contestaba: 'Por las dudas'. Y nunca entendí. Cuando me vine a Buenos Aires mi mamá me decía: 'Te vas a un lugar de gente rara hijo'", rememoró con una sonrisa.

Finalmente, contó que le maravilló la película Guasón, y que le gustaría hacer un personaje tan fuerte como el que compone Joaquin Phoenix en la pantalla. "Me pareció extraordinario. Y se me ocurrió una idea interesante que ya estamos desarrollando con dos amigos. Se trata de un tipo que cree que es un prócer y es un actor de tercera categoría", adelantó.