Hace dos semanas ocurrió con Francisco Comesaña, un ignoto hasta en el propio tenis nacional, y nada menos que en el estreno en Wimbledon. Ahora ocurrió con Thiago Tirante, algo más conocido en el ambiente, pero todavía nuevo en las alturas del ATP Tour. Por segunda vez en tres semanas del circuito, entonces, un argentino se impuso al ruso Andrey Rublev, el octavo tenista del ranking mundial. Y además, campeón del Masters de Madrid de este año, coronado hace un par de meses.

Tirante tiene 23 años y el que consiguió en el octavo de final del torneo ATP 250 de Bastad, Suecia, fue su apenas sexto éxito en el escalón mayor del tenis. El platense de 1,85 metros venció en un encuentro largo, como es lógico, por 7-6 (7-5), 3-6 y 6-4. Resultó, claro, el mayor triunfo de su carrera. De hecho, fue el primero sobre un jugador del top 20.

Compacto de la victoria de Thiago Tirante sobre Andrey Rublev

“Jugué muy bien. Fue mi primer partido ante tanta gente, y por eso estaba muy nervioso”, reconoció algo inusual Tirante. Esperable sensación, por cierto. “Fue mi primer enfrentamiento con un jugador del top 10″, apuntó. Después de 2 horas y 23 minutos de acción, el argentino dejó fuera de combate a quien era el primer favorito del certamen. Y se mostró feliz: “Estoy muy contento de jugar acá mi mejor tenis. No tuve buenas semanas últimamente y ésta es la mejor de mi vida. Siempre recordaré Suecia”, expresó exultante.

El tamaño de su victoria se mide también en que el bonaerense figura 121º en el escalafón internacional, y en que antes de 2024 sumaba apenas dos éxitos en el nivel de ATP Tour. Este año ya acumula cuatro, y muestra nítidamente su progreso: en marzo Tirante llegó a entrar al top 100 del ranking, y en abril ganó el Challenger 125 de México.

El festejo de Tirante, incrédulo

Ahora, en el cuarto de final, le tocará otro rival mucho más encumbrado que él, pero también mucho menos fuerte que Rublev: el español Roberto Carballés Baena, que figura 54º en el ranking y derrotó al kazajo Denis Yevseyev (160º) por 2-6, 6-3 y 6-2. En otra llave del cuadro hubo otro tanteador resonante: también perdió Casper Ruud, que está un solo puesto detrás de Rublev en el ordenamiento de ATP. El noruego, segunda cabeza de serie, cayó frente a otro latinoamericano, el brasileño Thiago Monteiro (85º), por 6-3 y 6-3.

Argentinos en Hamburgo

También el ATP 500 de Hamburgo, un certamen de categoría superior al de Bastad, llevó buenas noticias al tenis argentino. Dos de sus representantes pasaron a los cuartos de final; uno, con un triunfo muy contundente sobre un local, y el otro, con un récord en la temporada.

A Sebastián Báez le costó el serbio Dusan Lajovic, que anduvo por las canchas sudamericanas en la gira del polvo de ladrillo del verano. El bonaerense necesitó 2 horas y 40 minutos para despachar al 55º del ranking, y con un 6-4, 7-5 y 6-2 superó la rueda de octavos de final. Así, el tenista de San Martín se convirtió en el máximo ganador de partidos sobre tierra batida en el año: Báez consiguió 22 éxitos en esa superficie y superó a Ruud, que registra 21, y al italiano, oriundo de Villa Gesell, Luciano Darderi, que apiló 19. El propio Darderi es el próximo adversario de Báez, que está 18º en el ranking y en 2024 resultó campeón en Río de Janeiro y en Santiago.

Resumen del triunfo de Sebastián Báez contra Dusan Lajovic

El otro vencedor argentino del día en el norte alemán es Francisco Cerúndolo, que respondió a su condición de 4º favorito con un avasallante 6-0 y 6-2 sobre el invitado y local Maximilian Merterer (108º). “Siempre es difícil el primer partido cuando uno cambia de superficie. Hoy me moví mejor que el día anterior, con más confianza”, comentó el diestro porteño, que se enfrentará en un cuarto de final con Pedro Martínez (49º). El español doblegó al francés Ugo Blanchet (161º) por 6-4, 0-6 y 7-5.