El Papa defendió la bendición católica a las parejas homosexuales y atacó a sus críticos

El papa Francisco
El papa Francisco - Créditos: @FILIPPO MONTEFORTE

CIUDAD DEL VATICANO (Reuters).- Tras la polémica que ocasionó, el papa Francisco volvió a hablar hoy sobre la bendición a parejas del mismo sexo y posiblemente en su defensa más enérgica de la medida dijo que ve “hipocresía” en las críticas a su decisión de permitirles realizar esa práctica a los sacerdotes.

Las bendiciones LGBTQ+ fueron autorizadas en diciembre de 2023 por un documento del Vaticano llamado Fiducia Supplicans [Confianza suplicante], que encontró una resistencia significativa en la Iglesia católica, en particular de los obispos africanos.

“Nadie se escandaliza si doy mi bendición a un hombre de negocios que explota a la gente, lo cual es un pecado muy grave. Pero se escandalizan si se las doy a un homosexual”, declaró Francisco a la revista italiana Credere este miércoles y sentenció: “Esto es hipocresía” . Ese medio de prensa católico publicó extractos de la entrevista al Sumo Pontífice, un día antes de su publicación completa.

El Santo Padre también dijo que “siempre” acoge a las personas LGBT+ y a los divorciados vueltos a casar en el sacramento de la confesión, según otro pasaje publicado por medios vaticanos.

“A nadie se le debe negar la bendición. Todos, todos, todos”, indicó el Sumo Pontífice, repitiendo un lema de tres palabras que utilizó en agosto durante un festival de la juventud católica en Portugal. Francisco, que al principios de su pontificado pronunció la famosa frase “¿quién soy yo para juzgar?” cuando se le preguntó sobre la homosexualidad, hizo de la promoción de una Iglesia católica más acogedora y menos crítica una de sus misiones.

Mientras, los conservadores alegan que esto puede socavar las enseñanzas morales de la institución. No obstante, el Papa defendió la Fiducia Supplicans en varias ocasiones, aunque también reconoció la oposición a esta medida cuando sostuvo, por ejemplo, que las bendiciones no equivalen a una aprobación formal para las uniones del mismo sexo. “Cuando una pareja se presenta espontáneamente para pedirlas, no se bendice la unión, sino simplemente a las personas que juntas la solicitaron. No la unión, sino las personas”, aclaró el pasado 26 de enero.

La Iglesia católica enseña que el sexo gay es pecaminoso y desordenado, y que las personas con atracción hacia el mismo sexo que no se consideran pecaminosas deben intentar ser castas.

En otra entrevista publicada la semana pasada Francisco dijo que esperaba que los críticos de las bendiciones LGBTQ+ terminaran comprendiéndolas, pero que los africanos eran un “caso especial”. Es que obispos de África rechazaron de hecho la Fiducia Supplicans. En algunos países de ese continente, la homosexualidad está severamente castigada, con penas de prisión o incluso de muerte.