Orbán dice que Hungría pagará la multa del TJUE pero de una forma que "duela" a Bruselas

Budapest, 14 jun (EFE).- El primer ministro de Hungría, el ultranacionalista Viktor Orbán, aseguró este viernes que aunque su país pagará la multa dictada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) por incumplir la legislación migratoria de la UE, lo hará de una manera que "le duela a Bruselas".

"No podemos no pagar", reconoció Orbán en declaraciones a la radio pública Kossuth, aunque anunció que está pensando en una solución que sea "más dolorosa para Bruselas que para Hungría".

Orbán subrayó que se trata de una multa gigante que el mismo tiempo es "impactante y demente".

El TJUE condenó a Hungría el jueves pagar 200 millones de euros y a una multa coercitiva de un millón de euros por cada día que no cambie su legislación tras haber ignorado una condena anterior por violar el derecho comunitario sobre protección de inmigrantes.

Según el Tribunal, Hungría no ejecutó deliberadamente una sentencia de diciembre de 2020 sobre protección internacional de migrantes.

La sentencia se refiere a las limitaciones del acceso a los procedimientos de protección internacional con la creación de zonas de tránsito, ya clausuradas, que estaban situadas cerca de la frontera entre Hungría y Serbia, donde los solicitantes debían esperar el fin de sus casos.

Hungría también aplica "devoluciones en caliente" hacia terceros países, principalmente Serbia, una práctica criticada tanto por la UE como por ONG humanitarias.

Este comportamiento constituye una amenaza importante para la unidad del Derecho de la Unión que afecta de manera extraordinariamente grave tanto a intereses privados, en particular a los de los solicitantes de asilo, como al interés público, concluyó el TJUE.

En una primera reacción, tanto Orbán como su ministro de Gobernación, Gergely Gulyás, hablaron de "chantaje" y subrayaron que el Gobierno no cederá en su postura de no dejar entrar inmigrantes que hayan pasado por algún país seguro antes de llegar a Hungría.

Orbán volvió a acusar al Tribunal y a la UE de servir los intereses de George Soros -su enemigo político- al que acusa de tener un plan para traer a Europa un millón de inmigrantes por año.

"La sentencia fue dictaminada por el Tribunal de Soros. Bruselas está llena de gente de Soros", dijo el ultranacionalista y aseguró que el magnate estadounidense de origen húngaro quiere que la "Europa cristiana" se convierta en un continente de población "mixta".

"Bruselas no tiene derecho de decirnos con quién debemos vivir", enfatizó el primer ministro.

(c) Agencia EFE