Mónica tenía la sonrisa más contagiosa
Kevin Ruiz
ECATEPEC, Méx., noviembre 11 (EL UNIVERSAL).- Mónica Citlalli llegó de nueva cuenta a su hogar, al lado de su familia y amigas, luego de días de búsqueda, incertidumbre y dolor. Pasadas las 21:00 horas el féretro con su cuerpo arribó a la calle Artículo 3 en la colonia El Salado, Ecatepec, proveniente de la Ciudad de México en donde la hallaron.
El dolor, el llanto, nunca hizo romper la amabilidad de la familia de Mónica, a pesar de ya no tenerla. Cuando el cortejo fúnebre arribó, todos se rompieron, vecinos escoltaron la carroza, movieron sillas, hasta dejar libre el espacio para recibirla.
"Una porra para mi hermana", gritó una mujer, "que viva Citlalli, que viva", "un gran aplauso para la maestra de inglés". Un día antes del funeral, Raquel, una de las mejores amigas de Moni, pasó la noche escuchando los audios que ella le mandó por WhatsApp un día antes de desaparecer.
Estos audios son el último recuerdo que le queda de su mejor amiga; afirma que se arrepiente de no tener un audio con su risa, la cual describe como la más contagiosa que jamás escuchó.
Raquel vio por última vez a Mónica Citlalli el domingo 30 de octubre. Al día siguiente habría de salir a las seis de la mañana, a impartir sus dos turnos como maestra de inglés. Pero aquél día, no regresó a casa.
Recuerda que su amiga estaba muy emocionada por asistir al próximo concierto del cantante Bad Bunny, y que fue su novio, quien se encuentra desaparecido, el que compró los boletos para ambos.
A Mónica Citlalli le importaban mucho sus uñas, procuraba siempre tenerlas bien pintadas. Esa fue una de los primeras características que notó Maciel, su hermana, a través de una foto, cuando ya circulaba la información de que había sido hallada.
"Era mi hermana la que estaba tirada como un bulto, como basura. Dónde cabe en la cabeza que tuvieran la sangre para dejarla tirada como basura, la verdad que no se hace, la verdad que no es de humanos, no es de humanos", dijo Maciel.
La madre de Mónica Citlalli, Felipa Reséndiz, no pierde la fe y se muestra fuerte, dice que "tal vez es una prueba que Dios no está poniendo". Guarda el llanto porque tiene que seguir adelante, tiene aún a su nieta, y mientras "nosotros vivamos no le va a faltar nada".
Su novio está desaparecido. Jesús Alexis Álvarez Ortiz, pareja sentimental de Mónica Citlalli, la maestra de inglés que fue asesinada y su cuerpo encontrado el miércoles en Tlalpan, también fue reportado como desaparecido desde el 5 de noviembre, según la fecha de búsqueda que emitió el gobierno del Estado de México.
La última vez que vieron al joven de 27 años ocurrió en la colonia Jardines de Morelos de Ecatepec. En uno de los antebrazos tiene tatuado el nombre de Citlalli y en el pecho un beso de ella, de acuerdo con las señas particulares que dieron a conocer las autoridades.
Según los familiares de Mónica Citlalli, Jesús Alexis participó en las primeras acciones para buscarla, pero después no supieron nada de él.