Liga de España: Atlético de Madrid no tuvo buena puntería, le anularon dos goles y empató 0-0 con Espanyol

Riquelme, que estaba adelantado, llegó a tocar sobre la línea la pelota cuando era gol de Koke y el VAR anuló el gol de Atlético de Madrid ante Espanyol.
Riquelme, que estaba adelantado, llegó a tocar sobre la línea la pelota cuando era gol de Koke y el VAR anuló el gol de Atlético de Madrid ante Espanyol. - Créditos: @Captura de pantalla

Atlético de Madrid empató sin goles este miércoles a Espanyol en un partido por la tercera fecha de la Liga de España. En el equipo dirigido por Diego Simeone fueron titulares Julián Alvarez, Rodrigo De Paul y Nahuel Molina, mientras que Ángel Correa ingresó en el segundo tiempo y Juan Musso y Giuliano Simeone se quedaron en el banco de suplentes. En tanto, el ex delantero de Rosario Central Alejo Véliz partió como uno de los delanteros en el visitante.

Muy participativo y con su movilidad característica, La Araña tuvo su primera gran oportunidad a los 5 minutos, en un arranque furioso del conjunto colchonero. El arquero Joan García tuvo grandes reflejos para estirarse y desviar el remate de primera de Álvarez tras un centro atrás de Rodrigo Riquelme. El argentino se desmarcó en el área y buscó la definición junto a un palo.

Y enseguida, De Paul participó de un ataque por derecha en la que el mediocampista, tras un movimiento de calidad de Julián al dejar correr la pelota y desairar a su marca, terminó dejando mano a mano a Samuel Lino, cuya definición dio contra el palo ante la salida del arquero.

A los 15 minutos, un tiro de esquina desde la derecha se convirtió en otra posibilidad de gol para Álvarez, que ganó la posición en el segundo palo y llegó a conectarla de aire, pero el remate se fue apenas por encima del travesaño. Cerca, otra vez. Ante un rival acorralado y con pocas ideas en los pocos momentos que tiene la pelota.

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Los primeros 22 minutos se jugaron casi por completo en el campo del Espanyol. Hasta que encontró un córner que no llevó ningún peligro. Sí, de inmediato, otro centro fue a la cabeza de Véliz, que incómodo definió por encima del travesaño. Fue un respiro que se tomó el Aleti, cuya respuesta fue otra chance clara: el centro atrás parecía que iba a ser conectado por Julián, pero el noruego Alexander Sorloth se le anticipó y definió desviado, tras impactar la pelota algo mordida. El olor a gol era cada vez más intenso.

“¡Olé, olé, olá, Cholo, Cholo!”, se escuchó desde las tribunas al llegar a la media hora. Eso precedió al momento de hidratación, que atentó contra la intensidad que imponía el local, y a una primera jugada relevante del visitante, que Javi Puado desperdició al resolver desviado, de frente al arco. Véliz había iniciado la acción y luego apareció en el área para dejar correr el balón hacia un compañero mejor posicionado. Atlético de Madrid tomó aire y volvió a la carga, en una primera etapa que se esfumó impensadamente sin goles.

Para el segundo tiempo, dado que Atlético de Madrid visitará el sábado a Athletic de Bilbao y se le enciman los partidos, Simeone apeló a tres cambios en el entretiempo, lo que incluyó la salida de Julián para el ingreso del francés Antoine Griezmann. Tras jugar apenas un puñado de minutos en la primera fecha, la Araña estuvo 81 en el campo el domingo pasado en la segunda. En el inicio de la temporada, le dosifica los esfuerzos el Cholo, que se molestó mucho por la vuelta con demora del rival desde los vestuarios.

La imagen del Atlético se había deslucido. Y generó de pronto una jugada colectiva que terminaba en gol de Koke, pero Riquelme, que estaba adelantado, la tocó sobre la línea en un impulso. El VAR advirtió el hecho y frustró el festejo, en un dèja vú de una situación muy similar que el sábado pasado invalidó lo que era un gol de Alejandro Garnacho para Manchester United en la Premier League.

A poco menos de media hora del final, De Paul salió para el ingreso de Correa, que apenas unos segundos tardó en patear al arco y en generar otra acción de peligro con un desborde. Pero el Atlético sufría: el marroquí Walid Cheddira se jugó una patriada por derecha y su tiro cruzado encontró las manos firmes del esloveno Jan Oblak para evitar el gol. Y Simeone siguió modificando piezas, con el mozambiqueño Reinildo uniéndose al ataque, en un equipo que había perdido el orden, la intensidad y la brújula.

“Necesitamos correr y sostener el ataque. Vamos a defender bien”, les reclamó el Cholo a sus dirigidos en una pausa en el juego. Tuvo otra más Correa faltando ocho minutos y le bloquearon el remate, a pasos del arco. Nadie podía creer lo que veía. “¡Qué mala suerte, por favor!”, exclamaba Simeone, intenso, junto a la línea.

El enojo de Diego Simeone, una acción repetida en varios momentos del segundo tiempo en Atlético de Madrid - Espanyol.
El enojo de Diego Simeone, una acción repetida en varios momentos del segundo tiempo en Atlético de Madrid - Espanyol. - Créditos: @PIERRE-PHILIPPE MARCOU

Cumplido el tiempo reglamentario, el partido tuvo ocho minutos más para cambiar el destino del 0-0. Ambos lo intentaron, pero la puntería falló (y otra vez Riquelme anotó en posición adelantada). Y Simeone, frustrado, se fue al vestuario pateando una botella.

La síntesis

Las posiciones