Kevin Lomónaco manifestó su arrepentimiento por haber participado en una apuesta deportiva: “Fue un error y aprendí mucho de eso”
En julio de 2024, durante el mercado de pases de mitad de año, Independiente abrochó la llegada de Kevin Lomónaco, defensor de 22 años que llegó desde el Red Bull Bragantino de Brasil a préstamo y sin cargo hasta junio del 2025. Por su parte, el futbolista cuenta con una historia particular respecto a las apuestas deportivas, uno de los fenómenos que más asusta a los dirigentes, sobre la cual aseguró que se arrepiente de haber participado: “Fue un error y aprendí mucho de eso”.
En mayo de 2023 estalló en Brasil un escándalo en el que muchos jugadores quedaron involucrados en acciones ilegales vinculadas a apuestas. Uno de ellos fue Lomónaco, entonces futbolista del Red Bull Bragantino, quien aceptó una compensación de 70.000 reales por hacerse amonestar en un encuentro de su equipo con el América-MG. El deportista cumplió, pero únicamente recibió los 30.000 de la seña, ya que lo estafaron.
Cuando se conoció el conflicto, el defensor pudo haber recibido una pena de hasta seis años de prisión, pero al confesar y arrepentirse, se convirtió en testigo de la investigación y no fue enjuiciado. Al respecto, expresó: “[El estafador] me dijo que iba a ganar dinero rápido, que sólo tenía que hacer que me saquen una tarjeta amarilla. Acepté. Estaba en la concentración, un día antes del partido, creo. Él insistía, me mandaba mensajes, me decía: ‘Vamos a cerrar, hermano, es dinero...’. Pero lo hice sin saber que era un delito, algo así. Lo hice normalmente, no le pregunté nada a nadie”.
En tanto, Lomónaco rompió el silencio sobre la sanción que lo alejó de las canchas por 380 días y lo obligó a pagar una multa de 5 mil dólares. “Me dejó una enseñanza en todo, en la vida”, comenzó su relato y aclaró: “Nunca hice algo ilegal. No sabía que no se podía hacer. Nunca lo conté, pero fue un error. Nunca supe nada, no pregunté nada, me metí y pasaron un par de años y ahí me enteré que no se podía hacer”, manifestó en diálogo con ESPN.
Además, el jugador sostuvo que le dejó una “enseñanza grande”. “Fue un momento duro. Aprendí mucho de eso y hoy me siento mucho más fuerte en todos los sentidos”, señaló, y continuó: “Soy muy agradecido a Independiente y Tigre por abrirme las puertas, porque no es nada fácil aceptar a un jugador después de eso”.
A su vez, luego de cumplir con su castigo, el defensor volvió a las canchas en mayo de 2024, vistiendo los colores de Tigre, en un partido contra Estudiantes tras poco más de un año sin jugar.
El diálogo de Lomónaco con el fiscal durante la investigación
Fiscal Fernando Cesconetto: ¿Se volvió a comunicar contigo para que hicieras qué?
Kevin Lomónaco: Sí, se puso en contacto conmigo, presentándose, dando su nombre y diciendo que hiciera uno... para ganar algo de dinero. Para hacer eso. No sabía mucho, nunca había hecho algo así con una apuesta, nada de eso. No entendí mucho, pero dijo que iba a ganar mucho dinero rápidamente, que solo tenía que tener una tarjeta amarilla. Siguió hablando mucho así, solo, porque no respondí el mensaje. Al principio no respondí el mensaje.
Cesconetto: ¿En algún momento aceptó la propuesta de Vinícius Ribeiro? (después, Kevin aclara que se llama Luis Felipe)
Lomónaco: Sí, lo hice. Estuve la concentración, creo que el día antes del partido. Seguía insistiendo, mandando mensajes, diciendo: ‘Cerremos hermano, es dinero...’. Seguí hablando con él en la concentración, y luego sí: me sacaron tarjeta amarilla. Pero lo hice sin saber que era un crimen o algo, lo hice normalmente, no le pregunte nada a nadie.
Cesconetto: ¿Qué partido era ese Kevin?
Lomónaco: Era con América.
Cesconetto: ¿5 de noviembre?
Lomónaco: Sí, sí.
Cesconetto: ¿Pero cuánto dinero te ofrecieron por esa amarilla?
Lomónaco: Me ofreció 70.000 reales. Y me dijo que le enviaría una seña antes del juego, que era de 30.000.
Cesconetto: ¿Envió la seña antes?
Lomónaco: Sí, envió una seña antes del partido.
Cesconetto: ¿Y te envió los 30.000 reales?
Lomónaco: Lo hizo. No recuerdo si fue el día anterior o el mismo día, pero antes del partido.
Cesconetto: ¿Te debía 40 mil reales y te seguía hablando?
Lomónaco: Sí, sí. Seguía queriendo una roja, un penalti, algo mucho más grande. No era mi intención hacer esto. Hice la amarilla solo porque pensé que no era algo que perjudicara al equipo. Pensé que era algo normal y tampoco pensé que fuera un crimen, algo así. Fue como dije, no le pedí nada a nadie, lo hice solo porque sí, luego en un momento, fue un día rápido allí.
Cesconetto: Está bien, pero reconoces que está mal recibir una promesa de 70 mil y recibir 30 mil en el bolsillo para sacar una tarjeta contra tu equipo. ¿Sabés que esto está mal?
Lomónaco: Sí, sí, sí.
Cesconetto: ¿Tanto que no les dijiste a tus otros compañeros que habías hecho eso?
Lomónaco: No lo hice.
Cesconetto: ¿Tampoco a tu entrenador?
Lomónaco: No, a nadie.