El jeque tuvo que firmar una camiseta en la inauguración del Mundial, pero los nervios le jugaron una mala pasada
El Mundial de Qatar tuvo su estreno este domingo con la victoria de Ecuador sobre Qatar, el país anfitrión, por 2-0 con un doblete del atacante Enner Valencia a los 16′ y 31′ de la primera parte. Anteriormente, como sucede en este tipo de eventos, la inauguración se llevó todas las miradas con varios artistas en escena, quienes se sumaron a una inmensa coreografía llena de color y profesionales que abarcaron todo el espectáculo en el país de Medio Oriente.
Ante la atenta mirada de los espectadores situados en el Estadio Al Bayt, se empezó a generar un clima acorde para el ingreso de los jeques a la cancha, quienes fueron aplaudidos por una gran parte de los espectadores y se ubicaron en una parte preferencial de una de las plateas del recinto, acompañados del presidente de la FIFA, Gianni Infantino.
Con motivo especial de su asistencia, la organización confeccionó un video para homenajearlos sobre su pasado como deportistas. En dicho material, se observa al jeque Tamim Bin Hamad Al Thani y su papá, Hamad Bin Jalifa Al Thani, dos figuras importantes de la sociedad qatarí, en medio de un partido de fútbol que se disputó en el desierto.
Copa Mundial 2022: los mejores memes por la ceremonia inaugural
Bajo el lema de la inclusión y la unión entre las diferentes naciones, el video concluyó y las cámaras se enfocaron en el gesto de Tamim, quien sacó de una bolsa de tela la camiseta de color naranja del equipo que integraban para pedirle que le hiciera un autógrafo sobre la misma.
Al generar un clima de emoción en el ambiente, la escena terminó con un pequeño desliz: primero a Hamad bin Jalifa se le resbaló el marcador por los nervios, y luego, una vez que logró agarrarlo, quiso firmar, pero el fibrón dejó de funcionar, por lo que el autógrafo salió entrecortado. Ambos tomaron este momento con una sonrisa y la ceremonia siguió su curso normal.
La particular historia del influencer que abrió la inauguración
En el comienzo de la Copa del Mundo, una persona llamó la atención de los espectadores y conmovió a los mismos con su aparición en medio de la ceremonia inaugural. Se trata del influencer local Ghanim Al-Muftah, quien, junto al artista estadounidense Morgan Freeman, encabezaron el inicio con un afectuoso saludo.
A la par de ellos, las miradas también estuvieron puestas en Jung Kook, de la banda surcoreana BTS, quien fue el único artista internacional que estuvo presente junto al cantante local Fahad Al Kubaisi y un staff repleto de bailarines profesionales.
Al-Muftah nació el 5 de mayo de 2002 con una enfermedad poco habitual llamada Síndrome de Regresión Caudal (SDC), la cual se manifiesta con una malformación congénita y trae anomalías viscerales con diferentes grados de afectación.
“En lugar de permitir que la condición atrofie su vida, ha aprendido a superar los obstáculos con positividad y liderazgo, esto es lo que lo convierte en un personaje excepcional e inspirador”, relata su sitio web oficial, dando a las claras su predisposición y entrega ante la compleja circunstancia de vivir con esta rara enfermedad.