Copa Davis: la Argentina venció 3-0 a Finlandia en Manchester y regresa a los cuartos de final después de cinco años

La celebración del equipo argentino de Copa Davis en Manchester tras obtener la clasificación para el Final 8 de Málaga, en noviembre
La celebración del equipo argentino de Copa Davis en Manchester tras obtener la clasificación para el Final 8 de Málaga, en noviembre - Créditos: @Omar Rasjido/Prensa AAT

El equipo argentino de Copa Davis rompió las cadenas. En Manchester, sobre superficie dura y bajo techo (es decir, en condiciones menos amigables), el conjunto nacional se fortaleció después de haber caminado por un piso jabonoso y traicionero y logró un lugar en los cuartos de final de la competencia (del 19 al 24 de noviembre, en Málaga), instancia en la que actuó por última vez en 2019. De menor a mayor, corrigiendo errores y planificaciones poco lógicas del inicio de la semana, con química entre las distintas piezas de la maquinaria y alimentándose anímicamente con el correr de los días, los capitaneados por Guillermo Coria superaron la zona D de la fase de grupos de las Finales y regresan a la súper elite de la competencia colectiva más emblemática.

Molteni y González celebran en la cancha, el capitán Coria y el resto del equipo afuera: la Argentina se clasificó para el Final 8 de Málaga
Molteni y González celebran en la cancha, el capitán Coria y el resto del equipo afuera: la Argentina se clasificó para el Final 8 de Málaga - Créditos: @Omar Rasjido/Prensa AAT

Después de la victoria del viernes por 2-1 frente a Gran Bretaña, equipo que partió como el favorito por la localía y por contar con el reciente semifinalista del US Open, Jack Draper, los argentinos se plantaron frente a Finlandia (el más débil de la zona, que además no tuvo a su carta principal, Emil Ruusuvuori, lesionado), sabiendo que el 3-0 los enviaría directamente al Final 8 del Palacio de Deportes Martín Carpena de Málaga, sin depender del match entre los locales y Canadá de este domingo. Y así fue, en un largo día que tuvo momentos dramáticos y del corazón en la mano. Los triunfos de Tomás Etcheverry (34°) frente a Eero Vasa (703°) por 7-6 (7-5) y 6-3; de Francisco Cerúndolo (31°) contra Otto Virtanen (110°) por 6-7 (4-7), 6-1 y 6-0; y de los doblistas Andrés Molteni (30° de la especialidad) y Máximo González (34°) ante Harri Heliövaara (15°) y Patrick Kaukovalta (752°) por 6-7 (3-7), 6-4 y 6-3, le permiten a la Argentina regresar a un lugar al que pertenece por su rica historia y del que se había olvidado por los errores compartidos entre las capitanías de Gastón Gaudio y Coria.

Por el valor deportivo de la clasificación, la dificultad del escenario británico (los argentinos suelen tener registros negativos en condiciones indoor) y la celebración en una temporada agitada dentro y fuera de los courts (un triunfo angustiante en febrero en los Qualifiers de Rosario con Kazajistán, el conflicto con entre Coria y el doblista N° 1 del mundo Horacio Zeballos y la opaca tarea de las raquetas albicelestes en los Juegos Olímpicos de París 2024), el paso dado en Manchester representa la victoria más trascendente del equipo nacional en la Copa Davis desde que ganó la Ensaladera en 2016.

“Venimos con envión y buena energía”, había afirmado Coria, en funciones de capitán desde marzo de 2022. El Mago falló estratégicamente en la primera serie, contra Canadá (triunfo de los norteamericanos por 2-1), colocando a Sebastián Báez (bajo techo tenía un récord de 4-13; apenas un 23.5% de efectividad) en uno de los singles en lugar de Etcheverry (de mejor presente y registros sobre superficie dura e indoor). Justificó la presencia de Báez y de Cerúndolo en el primer día por la “mayor experiencia” que tenían en la competencia, pero tuvo perspicacia para cambiar durante el viaje, acertadamente dio un volantazo en medio de la semana otorgándole a Etcheverry la responsabilidad de jugar como single 2 y el platense le respondió frente a Gran Bretaña y, sobre todo, en la apertura de la serie con Finlandia, con el peso que representaba.

La clasificación para los cuartos de final es, sin dudas, un valioso respaldo (hacia el exterior, pero también puertas adentro) para cada protagonista del equipo. Para Etcheverry y Cerúndolo, que llegaron a Manchester con apenas un puñado de series y respondieron dentro de la cancha en momentos muy comprometidos. Para Báez, incluso habiendo perdido su partido ante Canadá, ya que gracias a él el equipo pudo cerrar y celebrar en febrero en la dramática serie con los kazajos. Para los doblistas Molteni y González, que no muestran el sólido rendimiento del año pasado pero pudieron sacar adelante los desafíos con Canadá y Finlandia. Y, especialmente, para Coria, el conductor, que vivió una temporada bajo la lupa y con cortocircuitos, entre otros motivos, por no involucrar a Zeballos. Después del martes, por la caída ante Canadá, las imágenes de Coria eran las de una persona apenada, que sabía que una eliminación lo quitaba del cargo; sin embargo, la clasificación lo energiza.

Así cerraron el partido Molteni-González

El destino, muchas veces, hace guiños cómplices o pega cachetazos. En febrero, en un clima sofocante, con Báez casi derrumbado sobre el polvo de ladrillo del Jockey Club rosarino, el kazajo Dmitry Popko no pudo aprovechar dos match points y el jugador de Billinghurst (partido de San Martín) no se amedrentó y se vistió de héroe para que la Argentina lograra la clasificación para la fase de grupos. Siete meses más tarde, en Manchester, los héroes fueron sus compañeros. Allá y acá, de un caminar zigzagueante a un trayecto con el pecho inflado, de la angustia a la euforia, una apasionada combinación para que el equipo argentino, finalmente, se desahogara después de tanto buscarlo.

El festejo en Manchester

Los clasificados para Málaga

Hasta el momento, con una jornada de la fase de grupos de las Finales por disputarse, los clasificados para el Final 8 de Málaga son la Argentina, Australia, España, EE.UU., Italia, Alemania. Este domingo entrará Canadá o Gran Bretaña y el segundo del grupo A: Países Bajos, Brasil o Bélgica.