Borrell aboga por que la nueva relación con Reino Unido se base en la seguridad y la defensa

Londres, 2 may (EFE).- El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, defendió este jueves que la UE y el Reino Unido partan de la seguridad y la defensa como pilares para construir la nueva relación pos-Brexit.

En una conversación con corresponsales españoles en Londres, Borrell abogó por que los países comunitarios asuman que la seguridad de Europa no es algo que incumbe únicamente a la UE, sino que es un esfuerzo conjunto con los Estados que están fuera del bloque.

"Cuando hablamos de establecer nuevos vínculos con el Reino Unido hoy, además tal como se ha puesto el patio, la política de seguridad y defensa es seguramente la más fácil", dijo quien también ocupa una vicepresidencia y dirige la cartera de Política de Seguridad.

Borrell argumentó que la defensa es la política "más intergubernamental" y "menos federal" de la UE, y que un país como el Reino Unido, "que no tenía el espíritu comunitario tan desarrollado", alberga menos prejuicios institucionales para involucrarse en ella.

"Es una clara necesidad. Europa no es solo la Unión Europea. La UE puede ser la espina vertebral, pero Europa es una referencia geográfica y en ella hay Estados que no están dentro de la Unión (...) ¿La seguridad de quién? La del continente europeo, no solo de la UE. Y esa seguridad hay que construirla con los que no están dentro", subrayó.

Borrell se desplazará a Oxford para ofrecer allí este viernes la llamada Lectura Dahrendorf en el St Antony's College, en la que abordará precisamente la necesidad de ampliar al Reino Unido y otros países la defensa del continente.

La guerra de Ucrania, un despertador

El representante elogió la cooperación con el Gobierno británico desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania, al destacar que Bruselas y Londres se encuentran "en la misma línea".

Y cuestionado por la eventualidad de un retorno de Donald Trump a la Casa Blanca, Borrell destacó que el controvertido líder republicano tuvo la virtud de lanzar "un grito positivo para los europeos" al recordarles que no se estaban tomando lo bastante en serio la necesidad de asumir su propia defensa.

En ese sentido, ve la guerra de Ucrania como un "despertador" para los europeos, "pero una cosa es que te despiertes y otra que te levantes".

A su juicio, Europa ha tomado conciencia del problema pero no ha reaccionado todavía suficientemente deprisa, por lo que "venga quien venga en Estados Unidos, Europa tiene que tener eso que a mí me gusta más llamar 'responsabilidad estratégica'".

"Tenemos que hacer frente a un mundo mucho más conflictivo y peligroso de lo que nos gustaría que fuera. Entonces, hay un componente de nuestra actitud ante el mundo que es la capacidad, la fuerza", señaló, antes de recordar que a su llegada a Bruselas ya dijo que Europa debía "aprender a utilizar el lenguaje del poder".

En su opinión, el presidente francés, Emmanuel Macron "ha evolucionado" en sus posiciones respecto al conflicto al pasar de pedir que no se humillara a Rusia a alinearse con las posiciones más beligerantes con Putin.

Pese a defender la importancia del discurso como catalizador de la acción, Borrell recordó que otros países que no adoptan pronunciamientos tan explícitos colaboran "más que nadie" con Kiev, como ha hecho Alemania, incluso superando momentos de duda cada vez que hay un salto cualitativo en la ayuda militar que se brinda.

Y, como ingeniero de formación, recordó que Ucrania está expuesta a la llamada "fatiga de materiales" en una guerra de desgaste como la que mantiene con Rusia: "Puedes estar dándole golpes todos los días y no pasa nada, hasta que llega un día en el que pasa... y pasa de verdad".

(c) Agencia EFE