Cuándo se celebra el Día de Todos los Santos en la Argentina
El Día de Todos los Santos en la Argentina se celebra el 1° de noviembre, después de Halloween, en la Argentina. En esta fecha, que antecede al Día de los Fieles Difuntos, los católicos occidentales celebran a aquellas figuras que fueron canonizadas a lo largo de la historia, y también las que no lo fueron, pero hicieron obras meritorias y se considera que están en el Paraíso.
Se trata de una fiesta religiosa cuya fecha actual puede rastrearse hasta el papado de Gregorio III (731-741), que un 1° de noviembre dedicó a todos los santos y mártires una capilla en la Basílica de San Pedro de Roma, como explica la Enciclopedia Británica. En épocas previas, se celebraba solo a las personas muertas por adorar a Cristo el 13 de mayo, fecha que se tomó como inspiración del culto católico bizantino y más tarde pasó a remitir a la efeméride del año 609, cuando el Papa Bonifacio IV consagró el Panteón de Roma como una iglesia a la Virgen María y todos los mártires.
La colocación de esta fecha antes del Día de los Fieles Difuntos data del año 809, cuando el obispo de la ciudad alemana de Tréveris Amalario Fortunato de Metz decidió establecer las misas de esta forma para conectar el ejemplo de los santos, muchos de los cuales fueron mártires, con la memoria general de los difuntos.
Cuándo se celebra el Día de Todos los Santos en la Argentina
La fecha del Día de Todos los Santos quedó fijada entonces el 1° de noviembre para las iglesias católicas occidentales, mientras que en la Iglesia ortodoxa y las católicas de rito bizantino la festividad se realiza el primer domingo de Pentecostés.
Como se mencionó, la festividad ocurre en la víspera del Día de Todos los Fieles Difuntos (Día de los Muertos), una ocasión que las diferentes iglesias comparten para homenajear a quienes ya no están, por lo que uno de los rituales suele ser el de ir al cementerio a dejar un presente en la tumba de un ser querido.
Cómo es la oración para el Día de Todos los Santos
El poeta español Gustavo Adolfo Bécquer escribió esta plegaria que aparece contenida en el Devocionario Católico para rezar en el Día de Todos los Santos:
Padres espirituales a los que debemos nuestra fe, y vivisteis como Jesús, hace más o menos tiempo, a Él que venció a la muerte pedidle por nosotros.
Profetas que descifrasteis los signos de los tiempos y nos mostrasteis cómo Dios va actuando, a quien es la luz que ilumina la oscuridad pedidle por nosotros.
Almas puras, santos inocentes que cantáis a Dios junto a los ángeles, al que llamó a los niños a su lado pedidle por nosotros.
Apóstoles que llevasteis a la Iglesia una base sólida sobre la que levantarse, a quien es la Verdad pedidle por nosotros.
Mártires que llegasteis a la vida eterna desde la arena del circo, playas, iglesias y calles, a quien os dio fuerza en los ataques pedidle por nosotros.
Vírgenes parecidas a las flores que llevasteis la pureza al mundo a quien es fuente de vida y belleza pedidle por nosotros.
Monjes que en la lucha de la vida pedisteis paz en el silencio al que es la calma en las tormentas pedidle por nosotros.
Doctores que nos dejasteis tesoros de sabiduría y virtud a aquel de quien procede toda ciencia pedidle por nosotros.
Ovejas del rebaño de Cristo, santas y santos todos, pedidle que perdone nuestras culpas a Aquel que vive y reina entre vosotros.