El primer comisario general de policía de origen latino tiene raíces profundas en el Departamento de Policía de Nueva York

Edward Caban saluda al público luego de prestar juramento como el primer agente de policía latino en dirigir el Departamento de Policía de Nueva York, fuera de la comisaría 40 en el Bronx, el 17 de julio de 2023. (Jefferson Siegel/The New York Times).
Edward Caban saluda al público luego de prestar juramento como el primer agente de policía latino en dirigir el Departamento de Policía de Nueva York, fuera de la comisaría 40 en el Bronx, el 17 de julio de 2023. (Jefferson Siegel/The New York Times).

NUEVA YORK — Cuando era niño en el sur del Bronx en los años sesenta, Joseph Ayala solía ver agentes de policía irlandoestadounidenses patrullando las calles de su vecindario, donde la mayoría de los residentes eran negros o puertorriqueños.

Los oficiales eran altos, imponentes y dispuestos a propinar palizas a adolescentes puertorriqueños como él si sospechaban que habían cometido algún delito, relató.

“Los eludíamos a toda costa. Si veíamos que se acercaban, caminábamos en la dirección contraria”, narró Ayala, de 71 años. “Si nos buscaban, tratábamos de huir”.

Cuando Ayala se unió al Departamento de Policía en 1974, dijo que los agentes latinos debían demostrar sus habilidades para ser aceptados por los policías blancos. No fue sino hasta esta semana, más de 30 años después de su jubilación, que Ayala vio que alguien que se veía como él estaba al mando.

El lunes 17 de julio, Edward Caban, de 55 años, prestó juramento como el comisario general número 46 de la policía de la ciudad. El nombramiento se dio casi tres semanas después de que el alcalde Eric Adams lo designó comisario interino. Es el sucesor de Keechant Sewell, la primera mujer en ocupar el cargo, quien renunció de manera repentina debido a lo que sus aliados describen como frustración por la microgestión del gobierno de Adams.

El alcalde y Caban se conocen bien: Adams, antiguo capitán de policía que, sin remordimiento alguno, ha traído de vuelta tácticas más agresivas y ha tomado decisiones relacionadas con el personal del departamento, lo impulsó para que se convirtiera en comisario adjunto en 2022, circunvalando así los rangos de jefes de policía. A diferencia de Sewell, quien provenía del condado de Nassau y no conocía la política al interior del departamento, Caban ha dedicado toda su carrera a vigilar la ciudad y conoce a los altos mandos.

Edward Caban, al centro, de pie junto a su padre, Juan, y el alcalde Eric Adams mientras presta juramento como el primer agente de policía latino en dirigir el Departamento de Policía de Nueva York, fuera de la comisaría 40 en el Bronx, el 17 de julio de 2023. (Jefferson Siegel/The New York Times).
Edward Caban, al centro, de pie junto a su padre, Juan, y el alcalde Eric Adams mientras presta juramento como el primer agente de policía latino en dirigir el Departamento de Policía de Nueva York, fuera de la comisaría 40 en el Bronx, el 17 de julio de 2023. (Jefferson Siegel/The New York Times).

El lunes, Adams, quien necesitará el apoyo de la comunidad latina cuando presente su candidatura a la reelección en 2025, proclamó el nombramiento de Caban, cuya familia es de Puerto Rico, como una muestra de su compromiso con la diversidad.

Los latinos han esperado mucho tiempo para tener a su primer comisario, afirmó Ayala, pero agregó que esa persona no debía someterse a la voluntad de un alcalde que ha hecho de su influencia desproporcionada en el departamento una insignia política.

“Esto demuestra que los oficiales latinos pueden llegar a la cima”, dijo. “Pero no va a cambiar nada a menos que el alcalde le conceda la autoridad para dirigir su propio departamento. Si eso no sucede, bien podría estar Bozo el payaso al frente del departamento”.

Otros se mostraron jubilosos. Anthony Miranda, el alguacil de la ciudad, se refirió al 17 de julio como “un gran día para todos, sobre todo para los latinos”.

“El alcalde Adams también pasará a la historia como el único alcalde que, en su primer mandato, hizo historia en el Departamento de Policía de Nueva York al ascender a la primera mujer afroestadounidense y ahora al primer latino”, aseveró.

Caban, un hombre casado y padre de dos adolescentes, Ava y Eddie, se crio en el Bronx y, en 1991, fue designado a la comisaría 40 en el sur del distrito del Bronx. A lo largo de tres décadas, fue subiendo de puesto hasta convertirse en el agente latino de más alto rango en 2022, cuando se volvió el primer comisario adjunto y el segundo al mando de Sewell.

Su padre, Juan, fue un detective que también fungió como presidente de la Sociedad Hispana de la Policía de Tránsito. El lunes, luego del juramento de Caban, su padre se puso de pie a su lado con lágrimas en los ojos, mientras el comisario se maravillaba ante la trayectoria de su propia carrera.

“El agente Eddie Caban no podía entrar a la comisaría 40, mirar las fotos de los antiguos jefes en la pared e imaginar su futuro”, señaló. Su padre lo motivó a aspirar a cargos más altos.

“Haz la prueba, hijo”, recordó Caban que le dijo su padre. “‘Los ascensos te abrirán más puertas’”.

Describió el hecho de convertirse en el primer comisario latino como “el más grande honor”.

“Espero que haya un joven, un estudiante universitario o un veterano militar que se entere de mi nuevo puesto hoy y se pregunte: ‘¿Y si yo…?’”, expresó. “A ellos les digo que el Departamento de Policía de Nueva York los quiere aquí, los necesita y su comisario tiene bastante trabajo para ustedes. Así que únanse a nuestro equipo”.

El ascenso de Caban también tuvo sus altibajos. En 1997, la Civilian Complaint Review Board, una agencia de supervisión de denuncias, recomendó que fuera sancionado luego de que se rehusó a proporcionarle a una mujer los nombres de dos agentes que fueron acusados de insultarla y amenazarla. En 2006, la agencia determinó que Caban había abusado de su autoridad como capitán cuando arrestó a un hombre por cargos de alteración del orden público luego de que se rehusó a mostrarle una identificación.

The Legal Aid Society, el mayor proveedor de servicios de asistencia penal y civil para clientes indigentes en la ciudad, mencionó que Caban tiene mucho trabajo por hacer para ganarse la confianza de los residentes, quienes, según la entidad, temen que la policía se esté volviendo demasiado agresiva en los barrios más pobres y asolados por la delincuencia.

“Esto empieza con el reconocimiento de que la fuerza policial no es la panacea para muchos problemas comunitarios”, declaró la entidad en un comunicado y agregó que las iniciativas que examinan la delincuencia como un problema de salud pública son más efectivas que la típica actuación policial que se ejecuta con severidad.

No obstante, los dirigentes de la policía y de la ciudad afirmaron que Caban se ha congraciado con las bases de la fuerza policial y muchos miembros de la comunidad, que lo consideran accesible y racional. Él ha motivado a los agentes más jóvenes a hacer las pruebas para subir de puesto.

En 2022, cuando entró en funciones como primer comisario adjunto, les dio a los miembros de la Gay Officers Action League (la liga de agentes de policía de la comunidad LGBTQ) su número de teléfono y les expresó su preocupación genuina de que el departamento no había ascendido a más agentes gays, relató Brian Downey, detective y presidente del grupo.

“Es una persona sumamente sociable”, sostuvo Downey. “Quiere ayudar a las personas y creo que esa es la razón por la que muchos de nosotros queremos ser policías en primer lugar”.

c.2023 The New York Times Company