El camino sinuoso de Ron DeSantis a la presidencia de EEUU | Opinión

Ron DeSantis debe entender que la oportunidad de ser presidente de la república no es el 2028 o el 2032. El momento, o más bien su momento, es en estas elecciones presidenciales venideras, en noviembre de 2024.

Para el gobernador de Florida no existe un plan B o C, solo existe un solo camino que conduce a la Casa Blanca.

Antes, sin embargo, es necesario que se embarre en el camino lodoso de las primarias republicanas. En frente va a tener a un ser altamente viciado, corrupto, mentiroso; posiblemente el hombre más detestable que ha generado la política estadounidense, quién seguramente hará utilidad de todas las triquiñuelas para ser nombrado candidato de su partido político.

Por supuesto que una victoria de Donald Trump es posible toda vez que DeSantis no se presente como candidato en las primarias de los republicanos. En este sentido, DeSantis es el único conservador que puede derrotar a Trump.

El enfrentamiento contra Trump en las primarias republicanas va a ser muy difícil, tal vez mucho más tortuoso que un enfrentamiento con Joe Biden o cualquier candidato demócrata en las elecciones nacionales de noviembre de 2024.

DeSantis tiene que conquistar a un electorado republicano que sufrió transformaciones ideológicas desde la llegada de Trump. Algunos son conquistables y otros no.

Los que no tienen capacidad de cambio son aquellos grupos que provienen de las huestes radicales que anteriormente no tenían cabida en ninguno de los dos partidos políticos tradicionales. Esta gente, que anteriormente tomaba parte en los grupos de skinheads, neonazis, KKK, son partidarios republicanos que DeSantis no debe tratarlos, menos conquistarlos.

Otro gran porcentaje pertenece a las organizaciones religiosas del país. Son una multitud de votantes que están diseminados en todos los estados de la nación, especialmente en el sur y el midwest.

Todos ellos son prácticamente la base social-conservadora del Partido Republicano y apoyaron a Trump por solo conveniencia. DeSantis debe conquistarlos.

Otro grupo importantísimo está compuesto por los “demócratas de Reagan”, quienes se caracterizan por su ideología económica. Son poblaciones que viven en las zonas suburbanas de las principales ciudades del país; apoyan las políticas económicas que se inclinan a favor del sector privado y actualmente son conocidos por su autodenominación de “Never Trump” (Nunca Trump).

De momento, DeSantis debe ignorar el voto de las mujeres de clase media. Una gran mayoría de ellas fueron a parar a las filas del Partido Demócrata debido a la devastadora decisión de la Corte Suprema de Justicia en contra de los derechos reproductivos de la mujer.

El camino inicial (elecciones primarias) de DeSantis es difícil, pero es menos difícil que el camino principal a la Casa Blanca.

Humberto Caspa, Ph.D. es un investigador de Economics On The Move. E-mail: hcletters@yahoo.com.

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, saluda a sus partidarios durante un mitin en Freedom Park en la comunidad de jubilados de Solivita en Poinciana, Florida, el 3 de noviembre de 2022. (Stephen M. Dowell/Orlando Sentinel vía AP, Archivo)
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, saluda a sus partidarios durante un mitin en Freedom Park en la comunidad de jubilados de Solivita en Poinciana, Florida, el 3 de noviembre de 2022. (Stephen M. Dowell/Orlando Sentinel vía AP, Archivo)