Siembran cuchillas en parques infantiles para herir a niños
¿Quién coloca ncuchillas de afeitar, ocultas y filosas, en el área de juegos infantiles de un parque con la premeditada intención de herir a los pequeños que allí se encuentren? Eso es lo que están investigando las policías de, al menos, dos ciudades en Estados Unidos.
En marzo pasado, en el parque Millenium de la ciudad de East Moline, en Illinois –no confundir con el famoso Millenium Park de Chicago– un niño de dos años fue herido por cuchillas colocadas en el juego conocido como pasamanos o barras de mono. De acuerdo a la televisora local WQAD, al investigar el lugar se encontraron más objetos filosos en ese parque, en varios de los juegos, incluso al final de la resbaladilla. Todas las cuchillas fueron colocadas de modo que cortaran a quien utilizara esos juegos. La identidad del autor de tal atentado no pudo ser identificada en su momento.
Poco después, apenas la semana pasada, en un parque infantil en San Diego, California, dos niños resultaron heridos con navajas sembradas en el prado del lugar. Cuando la policía registró la zona, de acuerdo a la televisora local ABC News10, fueron encontradas 19 navajas en el césped, colocadas de modo de que su filo pudiera cortar a quien pasara por allí.
Este tipo de atentados no es nuevo en San Diego. En el 2013 se hallaron 10 objetos cortantes en el parque, y poco después otros 20 fueron encontrados. Afortunadamente, solo una persona resultó herida.
Pero, al parecer, ni en California ni en Illinois se ha podido identificar a los autores de la colocación de esas cuchillas. Y en Pennsylvania se habría registrado un incidente similar también, según la televisora CBS. No hay tampoco datos que indiquen que ambos casos están relacionados. Pero todo indica que en estos incidentes las cuchillas fueron colocadas intencionalmente y de modo que pudieran lastimar en manos, brazos y piernas a quien jugara en esos parques.
Sea quien sea el autor o autores, los padres de los niños heridos, tanto en California como en Illinois, consideran a los responsables de esos ataques como verdaderos psicóticos. Algunos se preguntan qué habría pasado si sus hijos en lugar de la mano o el pie hubieran sido heridos por las cuchillas en lugares donde las heridas pudiesen haber sido mucho más graves. Se imaginan con perturbación muñecas o cuellos cortados. La reacción es sin duda de profunda inquietud y malestar.
El misterio continúa, y con él la posibilidad de que ataques similares se repitan en los mismos parques, u en otros, ya sea por los mismos sujetos o por alguien más. ABC News10 señala que se investiga si existen videos de seguridad de tiendas cercanas a los parques o DNA en las cuchillas que permita identificar a los responsables.
Lo cierto es que el miedo ha sido plantado y muchos tendrán que estar alertas la próxima vez que acudan con niños a jugar al parque.