Matan de hambre a un niño al que fanáticos religiosos creían “poseído”

Aracely Meza, arrestada en el caso de un niño que murió de hambre mientras le practicaban ritos por estar poseído. (Captura de video/WFAA)
Aracely Meza, arrestada en el caso de un niño que murió de hambre mientras le practicaban ritos por estar poseído. (Captura de video/WFAA)

La idea del diablo no es sólo cosa de películas de vibrantes efectos especiales o de reflexiones teológicas de iniciados con poco que hacer. A veces es un delirio que se vive con crudeza y, en pleno siglo XXI, se cobra víctimas inocentes no por los poderes peculiares de inasibles demonios sino por la patente torpeza e ignorancia de tono criminal de algunos seres humanos.

Y es que en ciertos lugares de Estados Unidos aún se vive y se sufre como en tiempos del Medioevo, y la superstición, el fanatismo y la violación de los derechos humanos campean de modos perturbadores. Eso puede decirse de lo que sucedió en la pequeña localidad de Balch Spring, Texas. Allí un pequeño niño de dos años fue sometido a inanición extrema y cuando murió de hambre su cuerpo fue entregado a una suerte de ceremonia para tratar de resucitarlo, según el relato del periódico Dallas Morning News. Todo al parecer porque, de acuerdo a los pastores de una iglesia de la localidad, el pequeño estaba “poseído” por el demonio.

Y, para añadir al escándalo, cuando uno de los feligreses de la iglesia en cuestión trató de alimentar al pequeño, los pastores se lo impidieron y le amonestaron.

Pero los verdaderos demonios eran otros. El diario Dallas Morning News señaló que Aracely Meza, de 49 años y quien se ostentaba como profeta en la "Iglesia Internacional Jesús es el Rey", que operaba en la misma casa en la que Meza vivía con su marido Daniel, que también sería pastor de esa iglesia, y otras personas, fue arrestada por cargos relacionados al maltrato y muerte del niño. Más arrestos estarían por venir.

El cuerpo del niño y los padres de éste estarían ya en Puebla, México, en donde tenían previsto enterrarlo. Pero las autoridades están inquietas porque aún no se ha practicado la autopsia, que sería útil para dilucidar la extensión del daño sufrido por el menor, las causas completas de su muerte y los posibles responsables. Y no es claro si eso podrá realizarse o esclarecerse a fondo.

La casa en Texas donde operaba una iglesia en la que se trató de resucitar a un nilo 'poseído' al que se dejó morir de hambre. (Captura de video/WFAA)
La casa en Texas donde operaba una iglesia en la que se trató de resucitar a un nilo 'poseído' al que se dejó morir de hambre. (Captura de video/WFAA)

De acuerdo a la televisora local WFAA, el menor fue mantenido sin alimentos durante 25 días hasta que murió. Pero, al parecer, esa fue solo la última y más extrema de las torturas a las que fue sometido a causa de la superstición de los adultos que lo rodeaban, pues al menos desde enero ya lo habían forzado a ayunos y que luego le daban comida solo si decía "Amén" durante las oraciones, de acuerdo a testimonios. La madre del menor también habría realizado ayunos e incluso Meza aceptó haberlo hecho también.

Y todo porque sus padres y los pastores de esa iglesia creían que estaba endemoniado y que ellos tenían, para completar el cuadro, la capacidad de hablar con Dios y resucitar al pequeño luego de su muerte. Testigos de los hechos habrían reportado el caso a la policía luego de consumada la tragedia, pero los padres ya se habían llevado el cadáver del menor a México cuando las autoridades llegaron a la casa donde opera la mencionada iglesia, que por cierto no tenía licencia para ubicarse allí.

No está claro qué es lo que tenía o hacía el niño que desató la trágica suposición de que estaba endemoniado, pero en todo caso la superstición y el fanatismo de los adultos implicados serían elementos clave.

Por lo pronto, a Meza se le impuso una fianza de 100,000 dólares y está arrestada. Los padres del niño están en el extranjero, por lo que está en duda si la justicia texana podrá alcanzarlos. Lo exorcizable, si cabe, debería ser la superstición y el delito.