Asesor de Trump imputado en caso de documentos sigue sin abogado en la Florida; se retrasó la lectura de cargos

Walt Nauta, un veterano de la Marina de Estados Unidos que ha trabajado como ayudante de Donald Trump en la Casa Blanca y en su mansión en Palm Beach, no pudo presentarse en el tribunal federal de Miami el martes para su comparecencia en el caso de los documentos de Trump porque su vuelo desde el noreste se canceló debido al mal tiempo.

Incluso si Nauta se hubiera presentado a su comparecencia, no habría podido presentar una esperada declaración de inocencia porque no ha contratado a un abogado defensor local, lo que es necesario en el Distrito Sur de la Florida. El abogado de Nauta en Washington DC, Stanley Woodward le dijo al juez Edwin Torres que su cliente espera contratar a un abogado local la próxima semana.

Torres fijó la comparecencia de Nauta para el jueves 6 de julio en el tribunal federal de Miami.

Nauta fue acusado de conspirar con el ex presidente para obstruir la justicia, ocultando documentos clasificados, reteniendo registros del gobierno y mintiéndole a las autoridades federales.

Nauta compareció con Trump en la comparecencia del ex presidente ante el tribunal federal de Miami el 13 de junio, pero no pudo declararse culpable o inocente porque no había contratado a un abogado local.

Mientras que esa primera comparecencia generó un circo mediático y político afuera del tribunal en el downtown de Miami, la comparecencia del martes de Nauta fue más discreta y atrajo a unas pocas docenas de periodistas, en lugar de los cientos que asistieron a la comparecencia de Trump.

Nauta, valet de Trump, enfrenta un juicio con el ex presidente en la división de Fort Pierce del Distrito Sur de la Florida, pero es probable que la fecha provisional del juicio, el 14 de agosto, se posponga al menos hasta diciembre o incluso hasta el próximo año debido a la complejidad del caso, que implica volúmenes de documentos secretos, según los registros presentados ante el tribunal por los fiscales del Departamento de Justicia (DOJ).

El acusado tampoco tiene precedentes: un ex presidente que sigue siendo uno de los principales candidatos presidenciales del Partido Republicano. Trump, de 77 años, está acusado en una acusación de 38 cargos de retener voluntariamente información de defensa nacional en violación de la Ley de Espionaje, conspirar para obstruir la justicia y hacer una declaración falsa a las autoridades, después que se emitió un citatorio de los materiales sensibles que trasladó de la Casa Blanca a su residencia y club Mar-a-Lago.

Acusaciones contra Nauta

De conformidad con la acusación, Trump le ordenó a Nauta que trasladara decenas de cajas con documentos clasificados desde un almacén de Mar-a-Lago a otras zonas de la propiedad y que luego devolviera algunas de ellas al almacén; supuestamente se le dijo que los ocultara al abogado de Trump y al FBI después que DOJ obtuviera una citación del jurado de instrucción sobre esos documentos en mayo de 2022.

Nauta fue visto en un video de vigilancia sacando las cajas del almacén antes que el FBI realizó un registro en la mansión del ex presidente en Palm Beach en agosto pasado, según el fiscal especial Jack Smith y su equipo. Los agentes federales encontraron más de 100 materiales secretos durante la redada, incluida información de defensa, armamento y nuclear de alto secreto.

Los fiscales también alegan que en una entrevista con el FBI en mayo de 2022 Nauta mintió al decir que no sabía cómo habían llegado las cajas a la mansión de Palm Beach, dónde estaban almacenadas o si Trump se había quedado con alguna de ellas.

En su plataforma Truth Social a principios de este mes, el ex presidente defendió a Nauta y acusó a los fiscales del DOJ de “intentar destruir su vida” y de “esperar que diga cosas malas sobre ‘Trump’”.

Nauta, quien nació en Agat, en el territorio estadounidense de Guam, se alistó en la Marina de Estados Unidos en 2001, ascendió hasta convertirse en especialista culinario jefe y trabajó en la cafetería militar de la Casa Blanca de Trump, quien lo ascendió a ayudante militar con el cargo de valet personal.

Nauta se retiró de la Marina cuando Trump dejó la Casa Blanca en enero de 2021. Según la acusación, se convirtió en asistente ejecutivo de Trump ese agosto, se trasladó de Washington DC a la Florida y luego continuó como ayudante del ex presidente en Mar-a-Lago.

El New York Times informó que Nauta es visto como una persona leal a Trump y no parece estar jugando un “juego lateral” a cambio de indulgencia por parte de los fiscales del DOJ.

Mientras tanto, la jueza federal de distrito Aileen Cannon, a quien se le asignó el caso al azar, denegó el lunes la solicitud del fiscal especial de presentar bajo sello la lista de 84 testigos del gobierno ante el tribunal, como parte de una condición especial de una fianza para que tanto Trump como Nauta no se comuniquen con ninguno de ellos en lo que respecta al caso.

Cannon reprochó a los fiscales que presentaran una moción defectuosa, entre otras cosas por no dar una razón para sellar la lista al público.

Un magistrado anterior, Jonathan Goodman, había impuesto la condición de la fianza y había pedido a los fiscales que presentaran la lista para que los dos acusados no se comunicaran con ningún testigo, pero el fiscal especial Smith fue un paso más allá y le pidió al juez que exigiera a Trump y Nauta que “reconocieran” que habían leído la lista de testigos por escrito.

Joseph DeMaria, un abogado defensor de Miami que una vez trabajó en la fuerza de choque contra la delincuencia organizada del DOJ en el sur de la Florida, dijo que Cannon tenía razón al negar la moción del fiscal especial porque no se presentó correctamente, según las normas del Distrito Sur de la Florida; también calificó de “trampa” la petición del fiscal especial para que Trump y Nauta firmen el formulario de reconocimiento, diseñada para atrapar a Trump si hablara con algún testigo sobre el caso.

“Están tratando de ponerle la soga al cuello” con esta propuesta, dijo DeMaria. “Están intentando atraparlo con obstrucción a la justicia”.