La arropan líderes de Morena y los ciudadanos
CIUDAD DE MÉXICO, octubre 6 (EL UNIVERSAL).- Fue un día de arropo para Clara Brugada, con ella caminaron lo mismo líderes de Morena que decenas de capitalinos, muchos de Iztapalapa.
La ahora jefa de Gobierno llegó respaldada por la presidenta de México, Claudia Sheinbaum; el secretario de Economía, Marcelo Ebrard; el director de ISSSTE, Martí Batres (mandatario saliente), y Alejandro Encinas, secretario de Planeación, Ordenamiento Territorial y Coordinación Metropolitana. Todos, por cierto, exjefes de Gobierno de la Ciudad de México.
Brugada arribó a las 9:00 horas a la calle Donceles del Centro Histórico, donde ya la esperaban para el acto solemne el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Rafael Guerra, diputados de todas las bancadas, los gobernadores electos de Puebla, Alejandro Armenta, y de Chiapas, Eduardo Ramírez, y el mandatario de Veracruz, Cuitláhuac García.
Entre porras y aplausos la mandataria descendió de su camioneta para caminar hacia el Congreso de la Ciudad de México, arropada también por autoridades del gobierno federal, como la consejera jurídica Ernestina Godoy y Jesús Ramírez, coordinador de asesores de la Presidencia de la República.
Adentro del recinto legislativo ya la esperaban Andrés Manuel López Beltrán, secretario de Organización de Morena, y la dirigente del partido, Luisa María Alcalde.
Mientras se desarrollaba la sesión solemne en el recinto legislativo, afuera las personas que esperaban detrás de las vallas se mostraban emotivas y, en ocasiones, cansados, aunque el día nublado ayudó para aminorar la fatiga.
Clara Brugada portó un vestido blanco con bordado gris. Con una gran sonrisa saludo a la gente. Ciudadanos que a su paso gritaron "¡Jefa de Gobierno!", "¡Es un honor estar con Clara hoy!" Otros portaron retratos de ella, incluso ondeaban banderas del movimiento LGBT+.
Brugada salió de la sede del Congreso acompañada por Claudia Sheinbaum, luego se dirigió al Teatro Metropolitan, donde encabezó el acto de celebración por la toma de posesión; al concluir su mensaje se trasladó hacia la esquina del Eje Central y 5 de Mayo, donde encabezó la Caravana de la Capital de la Transformación.
Si bien la jefa de Gobierno no caminó con las decenas de asistentes, pues llegó en un carro de golf por cuestiones de salud, los asistentes la vitorearon durante todo el trayecto.
"Es un honor que la nueva jefa de Gobierno salga de nuestra alcaldía, siempre fue una mujer de lucha, de apoyar a la mujer y a los más necesitados, por eso estamos con ella", dijo la señora Julieta.
"En Iztapalapa hizo muchas cosas, dejó las utopías y creo que hará lo mismo en toda la Ciudad. Es un mensaje muy fuerte para todas las niñas y niños de Iztapalapa de que sí se puede, que si se hacen las cosas bien, todo se puede lograr", dijo otra mujer.
La lluvia que por momentos se percibió en el Centro Histórico no fue impedimento para que las personas se unieran a la caminata, en la que también participaron integrantes del gabinete y alcaldes de extracción morenista.
"Es interesante que las mujeres sigan al frente de los gobiernos, son más honestas y más trabajadoras que los hombres, sin duda alguna, y la mayoría de su gabinete será de mujeres, de eso se trata, de impulsar a todas y buscar un mejor país", comentó Manuel, quien dijo ser habitante de Iztapalapa y participó en la caravana.
Al llegar a la plancha del Zócalo, Clara Brugada fue recibida con aplausos y vítores de "¡Sí se pudo, sí se pudo, sí se pudo!" y "¡Jefa de Gobierno, Jefa de Gobierno!".
Frente al Antiguo Palacio del Ayuntamiento, que fue adornado con gigantes mariposas moradas, mujeres de pueblos originarios de la Ciudad de México realizaron una ceremonia de investidura tradicional, con la que externaron su reconocimiento a Clara Brugada como jefa de Gobierno.
Ahí vistieron a la mandataria con un huipil de chaquira y otras vestimentas características de pueblos de Xochimilco y Milpa Alta; le colocaron una corona de flores y le entregaron un cirio encendido como símbolo de claridad y toma de buenas decisiones para su gobierno.
Durante la breve ceremonia, Brugada Molina recibió el bastón de mando de parte de mujeres indígenas de las comunidades triqui y mixteca, como un símbolo para reconocer su autoridad y liderazgo.
Luego de la ceremonia, Clara Brugada bajó del templete e ingresó por primera vez como jefa de Gobierno a las instalaciones del Antiguo Palacio del Ayuntamiento, donde estará su oficina durante los próximos seis años.
Minutos más tarde de haber ingresado, al igual que las y los secretarios que la acompañarán en su gestión, Brugada Molina salió por el balcón de su oficina y ofreció un gesto de despedida a los asistentes que aún aguardaban por ella.
Fue un día de arropos para Clara Brugada, de los líderes de Morena, con quienes, afirmó, trabajará de la mano para consolidar el segundo piso de la transformación en la Ciudad; de los capitalinos, a quienes dijo: "No tenemos derecho a fallar".