Arabia Saudí cruza todos los límites: 30 años de cárcel por escribir en Twitter

Arabia Saudí es una nación en la que están presentes la tortura, las detenciones arbitrarias y la falta de derechos humanos. Sus ciudadanos no tienen permitida la libertad de expresión ni pueden reunirse libremente. Un lugar en el que el papel de las mujeres está sometido al hogar y al cuidado de los hijos, sin ningún tipo de oportunidad para su desarrollo, tal y como revela Amnistía Internacional.

Un país autoritario, en definitiva, en el que ir en contra del régimen, puede suponer multas, penas de prisión o la muerte. Y eso incluye también los mensajes en las redes sociales. A diferencia de cualquier país occidental, en el que las sociedades pueden cuestionar a los gobernantes, en Arabia Saudí estos reproches pueden suponer un importante castigo: 30 años entre rejas.

Es lo que le ha ocurrido a Fatima al-Shawarbi, una mujer joven de unos 20 años que acaba de ser condenada a tres décadas de prisión, tal y como ha revelado ALQST, una organización de derechos humanos con sede en Reino Unido. ¿El motivo? Criticar en Twitter el proyecto de Neom, una megaciudad futurista que el país está construyendo en el desierto y con la que quiere atraer a multitud de turistas.

Unos simples mensajes en las redes sociales, como los que podríamos publicar cualquiera, pero que en Arabia Saudí suponen una vida entera privada de la libertad. En este caso, la mujer publicó una serie de mensajes anónimos en los que criticaba el trato dado por Arabia Saudí a las personas expulsadas de sus hogares para construir esta nueva ciudad sostenible.

Cabe recordar que ha habido mucha polémica a nivel global porque el régimen está desalojando por la fuerza a las tribus locales sin respetar los derechos humanos, una circunstancia que ya han reportado organizaciones como Naciones Unidas.

La joven, además, también criticó el trato que reciben las mujeres en el país y pidió una monarquía constitucional en lugar del régimen dictatorial que existe hoy en día. Aunque no se conoce la manera en la que las autoridades descubrieron su identidad, sí que se sabe que la detención se produjo en 2020. Normalmente, a las mujeres encarceladas se las priva de todo contacto con el exterior, incluyendo familia y amigos.

ALQST ha reportado que recientemente Al-Shawarbi se ha unido a una huelga de hambre con otras mujeres prisioneras, aunque se desconoce su estado de salud. Entre las huelguistas estaría también Salma al-Shehab, una estudiante que fue detenida por publicar unos mensajes en Twitter en defensa de los derechos de las mujeres. Esta mujer estudiaba en Reino Unido, pero fue arrestada cuando visitó el país y condenada a 27 años entre rejas y otros 27 años con la prohibición de viajar.

Un lavado de cara que no se cree nadie

En los últimos años, Arabia Saudí está intentando lavar su imagen internacional, aunque con escaso éxito. Todavía resuena en la memoria el brutal asesinato cometido sobre el periodista crítico Jamal Khashoggi, que ocurrió en el consulado saudí en Estambul (Turquía).

El régimen está centrándose en el deporte para hacer olvidar esta y muchas otras barbaridades. De esta manera, está potenciando su liga de fútbol con fichajes millonarios como los de Cristiano Ronaldo o Benzema, ha adquirido un club inglés, como es el caso del Newcastle, o en su territorio se celebra la Supercopa de España.

Mientras tanto, su población sigue sufriendo la tiranía de un Gobierno represor, dispuesto a cualquier cosa para silenciar las críticas. Fatima al-Shawarbi solo es una más en una campaña de terror en el que expresar una opinión supone una condena.

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