Anmat. Aprueban un test nacional para detectar el virus del dengue: cómo funciona y qué ventajas tiene
La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) aprobó el primer test de antígeno nacional para el diagnóstico de dengue en Argentina: el kit Detect-AR Dengue. Este desarrollo es un logro del Laboratorio de Virología Molecular de la Fundación Instituto Leloir, dirigido por la investigadora del Conicet Andrea Gamarnik, en colaboración con el Laboratorio Lemos, que se encargará de su producción y comercialización. La aprobación de este test cobra gran relevancia tras la temporada pasada, cuando la Argentina registró un brote sin precedentes de la infección, lo que subraya la necesidad de herramientas accesibles y efectivas para diagnosticar la enfermedad.
El kit Detect-AR Dengue utiliza una técnica de Elisa (método de laboratorio usado para detectar la presencia de antígenos o anticuerpos en una muestra) para detectar el antígeno viral NS1, una proteína característica del virus que se encuentra en el torrente sanguíneo de los pacientes durante la fase aguda de la infección. Esto permite identificar cualquiera de los cuatro serotipos del virus en pacientes que ya presentan síntomas, como fiebre, dolor de cabeza y molestias musculares, pero que podrían confundirse con otras enfermedades. La posibilidad de confirmar el diagnóstico mediante un test específico es crucial, dado que el dengue puede evolucionar hacia formas graves y potencialmente mortales, como el shock hemorrágico. Aunque no existe un tratamiento específico para la patología, un diagnóstico preciso permite a los profesionales de la salud manejar los síntomas y prevenir complicaciones.
Para su aplicación, el test, que se debe realizar en un laboratorio de análisis clínicos, requiere una muestra de sangre, similar a la de un estudio de rutina, que se coloca en un pocillo recubierto con anticuerpos específicos para la proteína NS1 del dengue. Si esta proteína está presente en la muestra, queda retenida en el pocillo y genera un cambio de color, indicando un resultado positivo. Este proceso se realiza exclusivamente en laboratorios de análisis clínicos y no se vende directo al público debido a que la prueba de Elisa demanda personal capacitado y condiciones controladas. La naturaleza del test permite confirmar si una persona está cursando la infección en el momento de la prueba, pero no ofrece información sobre infecciones pasadas.
El desarrollo del kit fue una respuesta a las necesidades del sector de salud en la Argentina, particularmente en contextos de crisis sanitaria como el brote de principios del año pasado, donde la disponibilidad de insumos fue crítica. En palabras de Gamarnik, el equipo realizó una consulta con laboratorios clínicos antes de iniciar el proyecto, al detectar una fuerte demanda de métodos accesibles para identificar el antígeno viral NS1. En comparación con los métodos de determinación del ARN viral, como la PCR, esta técnica de Elisa tiene la ventaja de ser menos costosa y más sencilla, ya que no requiere de equipos complejos ni insumos adicionales. Además, es capaz de procesar hasta 96 muestras en simultáneo y proporciona resultados en un tiempo de aproximadamente tres horas, facilitando el diagnóstico rápido en momentos de alta demanda.
Hasta ahora, los test de Elisa disponibles en la Argentina para el diagnóstico del dengue eran importados, lo cual representaba un obstáculo en términos de costos y acceso. La producción nacional del Detect-AR Dengue, afirman los investigadores, no solo mejorará la disponibilidad de este tipo de herramientas en el país, sino que también permitirá un ahorro en importaciones y garantizará el acceso durante los brotes epidémicos. Belén García Fabiani, bioquímica y coordinadora del desarrollo, destacó que este test ofrece niveles de especificidad y sensibilidad comparables a los comerciales internacionales, cumpliendo con los estándares necesarios para su uso en laboratorios clínicos.
Según afirman sus desarrolladores, contar con este tipo de herramientas de producción local no solo facilita el diagnóstico en el ámbito clínico, sino que también fortalece el control sanitario y el seguimiento epidemiológico del dengue. En este sentido, Gamarnik enfatizó la relevancia de la cooperación entre el sistema científico y el sector de salud.
El kit será inicialmente producido en un lote de 500 unidades, lo que permitirá evaluar su aceptación y adopción en el ámbito clínico. Jorge Carradori, director técnico del Laboratorio Lemos, destacó que esta etapa es clave para consolidar su uso y su potencial de exportación en el futuro. Aún está pendiente la definición de un precio, pero se anticipa que será más económico que los test importados, lo que permitirá que tanto el sistema de salud público como el privado accedan a esta herramienta.