Alba Rueda: “Valoran y celebran que haya una embajadora trans que está llevando adelante nuestras agendas”

Con una vasta trayectoria en el mundo académico y del activismo, Alba Rueda es la primera subsecretaria de Políticas de Diversidad de la Nación, organismo que depende del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad
Antes de asumir su cargo actual en la Cancillería, Rueda fue la primera subsecretaría de Políticas de Diversidad del Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad de la Argentina - Créditos: @Ricardo Pristupluk

WASHINGTON.– Sonriente, Alba Rueda se paró para la foto entre la primera Dama, Jill Biden, y el secretario de Estados Unidos, Antony Blinken. En la Casa Blanca, Rueda fue presentada como “una mujer transgénero que fue expulsada de las aulas, inhabilitada para rendir exámenes, rechazada en oportunidades laborales, sometida a violencia y rechazada por su familia”, y que “trabajó para acabar con la violencia y la discriminación contra la comunidad LGBTQI+ en la Argentina”.

Rueda, representante Especial sobre Orientación Sexual e Identidad de Género de la Cancillería Argentina, fue galardonada en el Día Internacional de la Mujer junto con otras 10 mujeres de Afganistán, Polonia y Ucrania, entre otros países, con el International Women of Courage Award, un premio que Estados Unidos le entrega a mujeres de todo el mundo en reconocimiento por su labor. El Departamento de Estado concede este galardón desde hace 16 años, y ha reconocido ya a más de 180 mujeres de 80 países. Rueda es la segunda argentina premiada: la primera fue Susana Trimarco, quien luchó contra la trata de mujeres y niñas para la prostitución.

“Cuando la Secretaria de Estado Condoleezza Rice lanzó esta iniciativa en 2007, lo hizo para honrar a las mujeres que crean futuros más brillantes, para ellas mismas, para sus comunidades y para las generaciones venideras”, dijo Blinken al abrir la ceremonia. “La defensa de los derechos de las mujeres y las niñas está arraigada en nuestros valores democráticos de derechos humanos y libertades fundamentales para todos. Y cuando avanzamos en la igualdad y defendemos los derechos de las mujeres, mejoramos la vida de todos”, agregó.

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La Primera Dama Jill Biden dijo que la ceremonia y los galardones le enviaban un mensaje a las niñas de todo el mundo: “Sí, tú importas. Sí, puedes marcar la diferencia”, dijo.

“Es por eso por lo que queríamos traer a los líderes que estamos honrando hoy, y las historias que comparten, al escenario más grande que pudimos: la Casa Blanca”, remarcó.

Antes de asumir su cargo actual en la Cancillería, Rueda fue la primera subsecretaría de Políticas de Diversidad del Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad de la Argentina, y trabajó 12 años en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. La Cancillería destacó su papel de “activista y militante trans”.

Feliz por el galardón, Rueda dijo en una entrevista con LA NACION que el premio enviaba un mensaje sobre la importancia de los movimientos sociales y el activismo, y remarcó que uno de los criterios para decidir los recipientes ha sido fortalecer a la sociedad civil, promotora de cambios. Y que era, además, un reconocimiento a las políticas de inclusión del país.

“Lo que fundamenta ese reconocimiento ha sido algo que en América Latina está sucediendo que es una enorme desigualdad a la comunidad trans, es una de las regiones más violentas para la comunidad trans en el mundo”, dijo. “Es un mensaje positivo para la agenda de las mujeres en este 2023. La doctora Biden tomó la palabra y en dos oportunidades mencionó que ponían en valor a las mujeres en toda su diversidad. Hay una valoración de las diversidades como un mensaje al mundo desde la agenda de política exterior de Estados Unidos”, enfatizó.

–¿Lo ve como un reconocimiento a las políticas de inclusión de la Argentina?

–Sí, porque también hicieron mención de lo que implica el desarrollo de la cuota laboral para personas trans en nuestro país, y sin duda eso es más importante. Contar con una representación especial. Somos uno de los pocos países en el mundo que tienen representantes especiales. Antes de nosotros estaban Estados Unidos, Reino Unido, Italia, luego Nueva Zelanda y Francia. Hay seis países que tienen una política con una agenda de derechos a la comunidad LGBTQI+, y la Argentina es uno de esos países. Valoran y celebran que haya una embajadora trans que está llevando adelante nuestras agendas.

–¿En qué falta avanzar en el país?

–Falta la profundización de muchas de las políticas públicas. El cupo es un paso importante pero hay que continuar implementándolo y cambiar esas lógicas binarias, esas lógicas que también existen en el Estado, y hay un mensaje que también es importante para la Argentina y para América Latina, que es asumir una agenda de transformación de las desigualdades en virtud de las condiciones de vida de nuestras poblaciones. Falta invertir en diversidad. Y eso tiene que ver con poner en valor mensajes que tienen que ver con un mensaje a todo el mundo para que preste atención a los derechos de las personas trans. Falta mucho, pero se ha desarrollado mucho también. Esta es una política exterior afirmativa de Estados Unidos. Se trata de poner en valor las cosas afirmativas, en las personas y en las agendas afirmativas. Suma una visión de la diversidad.

–Hay gente que rechaza esa agenda, ¿qué les dice?

–Esta es una agenda que no le quita derechos a nadie, reconoce derechos. Esta agenda de reconocimiento de derechos habla de una sociedad que existe y valora la diversidad. Los aspectos negativos de nuestras realidades tienen que ver con condiciones de vida, y son esas las condiciones de vida que tiene que cambiar y para eso se necesitan más herramientas pero también políticas. Hay un mensaje claro de que nuestra agenda es una agenda de cambios culturales, sociales, a partir de una agenda política. Esto no le quita derechos a nadie, sino que suma perspectivas de diversidad y refleja lo que somos como sociedad, una sociedad diversa.