Acribillaron en un balneario de España a un piloto ruso que había desertado de la guerra de Ucrania
MOSCÚ.- Un hombre que fue acribillado la semana pasada en España fue identificado como Maxim Kuzminov, un desertor ruso que escapó a través de la línea del frente y llegó a Ucrania en septiembre del año pasado en un helicóptero militar, según confirmaron fuentes de la Guardia Civil a El País este martes.
El cuerpo fue encontrado en la rampa de un garaje comunitario el pasado 13 de febrero en La Cala, una localidad cercana a la ciudad portuaria oriental de Alicante. El hombre había recibido seis disparos y luego fue atropellado por el auto en el que huyeron los agresores, según la agencia de noticias estatal española Efe.
El auto fue hallado poco después en llamas en la vecina localidad de El Campello.
Según aseguraron fuentes de investigación del Instituto Armado a El País, fue un vecino quien alertó hacia las 18.30 de la tarde de la presencia de un cuerpo con heridas de bala. Varios residentes de la zona aseguraron que aunque no lo conocían mucho, creían haberlo visto “trabajando en una obra de la zona”.
La identidad de la víctima fue confirmada a través de sus huellas dactilares ya que portaba documentos falsos que lo identificaba como un ciudadano ucraniano de 33 años.
Según informó en su momento el jefe del GUR ucranio, Kirilo Budanov, Kuzminov cruzó la frontera volando por debajo del área de detección de los radares junto con otros miembros de la tripulación que no sabían de los planes del piloto y murieron cuando intentaban huir después del aterrizaje.
Defence Intelligence of Ukraine (GUR) has shown the Russian pilot who handed over the Mi-8 helicopter to Ukraine.
The man was shown in the announcement of the documentary "Downed pilots of Russia" from the series "Military Intelligence of Ukraine".
"No one wants this war. You… pic.twitter.com/sNTEkmdIdN— Anton Gerashchenko (@Gerashchenko_en) September 3, 2023
Budanov también explicó entonces que la inteligencia militar ucrania había logrado sacar de Rusia a la familia del piloto desertor, según informó la agencia Efe.
El piloto contó que le garantizaron su seguridad, le ofrecieron nuevos documentos y una compensación de medio millón de dólares antes de proceder a planificar la operación.
Kuzminov se graduó en la Escuela de Aviación de Sizran y fue destinado a servir en el Lejano Oriente ruso, donde entre sus compañeros tenía fama de ser una “persona tranquila” y pedir “trabajo pacífico”, operaciones de carga que no tuvieran que ver con misiones militares, según el canal de Telegram ruso Baza, citado por El País.
El propio Kuzminov explicó que había desertado porque estaba en contra de la invasión rusa de Ucrania. “Lamento lo que está ocurriendo, los asesinatos, las lágrimas, la sangre”, dijo en un documental difundido por los servicios de inteligencia, asegurando que en Ucrania no había “ni fascistas ni nazis” como aseguraba Moscú. “No quiero ser cómplice de los crímenes rusos”, sostuvo.
Andrii Yusov, un representante de la inteligencia militar ucraniana, confirmó el lunes a los medios locales que el ex piloto ruso había fallecido en España, pero no proporcionó detalles. No está claro cómo ni por qué Kuzminov habría viajado a España.
Sin embargo, un vocero que confirmó la muerte de Kuzimov al medio ucraniano Ukrayinska Pravda afirmó que “decidió mudarse a España en lugar de quedarse aquí”. “Lo que sabemos es que invitó a su exesposa a unirse a él y luego lo encontraron muerto a tiros”, añadió.
Por su parte, Alexei Danilov, el secretario del Consejo de Seguridad y Defensa Nacional de Ucrania dijo que el gobierno ucraniano había sugerido que Kuzminov permaneciera en el país, donde estaría protegido.
Tras conocerse la noticia de su muerte, el jefe del Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia, Sergei Naryshkin, dijo a periodistas rusos que Kuzminov era un “traidor y criminal” que se convirtió en un “cadáver moral” tan pronto como comenzó a planear “su sucio y terrible crimen”, según la agencia de noticias estatal rusa Tass.
Preguntado sobre el caso, el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, aseguró que no tenía información al respecto y que Moscú no había recibido ningún tipo de notificación a través de canales diplomáticos.
Kuzinov tenía una causa abierta en el Comité de Instrucción militar por “traición”, y los familiares de sus dos compañeros que fueron asesinados tras el aterrizaje en Ucrania pidieron que pagara con su vida por lo que hizo. Los compañeros de tripulación, abatidos al intentar huir, fueron condecorados post mortem por las autoridades rusas.
Agencias AP y Reuters