Wanda Díaz le declara la guerra a la basura en río de Panamá

Por Elida Moreno

CIUDAD DE PANAMÁ, 1 nov (Reuters) - El río Juan Díaz, uno de los más importantes de Panamá, nace a casi 1,000 metros sobre el nivel del mar en un paraje de selva tropical casi virgen. Imponente, cristalino y caudaloso, el torrente continúa su recorrido hacia la capital donde, antes de desembocar en el Pacífico, va llenándose de toneladas de basura plástica y desechos químicos que amenazan su subsistencia.

Buscando cambiar esta realidad, la ONG panameña Marea Verde instaló en su cauce a "Wanda Díaz", una especie de molino hidráulico autosustentable -el primero de su tipo en Latinoamérica- que recolecta, desde fines de septiembre, los desechos sólidos flotantes antes de que lleguen al mar.

El mecanismo incluye una malla que atrapa la basura. Luego, usando energía hidráulica y solar, una banda transportadora lleva los desechos hacia el interior para su clasificación, previniendo que lleguen al mar 700 toneladas diarias de basura desde Ciudad de Panamá. A su vez, contribuirá a que el istmo avance en el cumplimiento de la Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para el desarrollo sostenible.

"Queremos crear conciencia de que podemos evitar la muerte de un río tan importante", dijo a Reuters Sandy Watemberg, directora ejecutiva de Marea Verde, una asociación sin fines de lucro que desde 2017 intenta mitigar la contaminación por desechos sólidos en los ríos y costas de Panamá, uno de los países que más residuos genera en Latinoamérica.

"Wanda nos ayudará con eso, pero lo más importante es lograr un cambio en los hábitos para manejar la basura", agregó.

El nombre de Wanda surge como acrónimo de "wheel and action" y, tras una encuesta en redes sociales, se adoptó el apellido "Díaz" en referencia al río donde opera.

El Juan Díaz es considerado uno de los ríos más contaminados del país, una realidad asociada al mal manejo de la basura y el desarrollo inmobiliario desordenado: su cauce cruza por completo la capital panameña, la segunda mayor área metropolitana de Centroamérica con más de dos millones de habitantes.

Pese a ello, el río todavía alberga especies como lagartos, tortugas y aves que habitan los manglares que han sobrevivido a la intervención humana.

WANDA Y BOB

No es la primera vez que Marea Verde le declara la guerra al plástico. Antes de la pandemia del coronavirus ya trabajaba en la limpieza de playas y manejaba a "B.o.B." (acrónimo de Barrera o Basura), una malla flotante que detenía la basura en el río capitalino Matías Hernández. Hoy, Bob hace tándem con Wanda.

Entre 2019 y 2020 Bob atrapó más de 100 toneladas de basura y Marea Verde espera ampliar el impacto positivo ya que Wanda dispondrá de cámaras que operarán con inteligencia artificial que ayudarán a recopilar información que servirá para catalogar el tipo de plásticos que circulan por el río.

Wanda está inspirada en los llamados "Trash Wheel" que funcionan en la Bahía de Baltimore, en Maryland, Estados Unidos, operados por la firma Clearwater Mills, que también apoya el proyecto en Panamá.

"Limpiar las playas es bueno, pero más efectivo y barato es atrapar la basura en los ríos porque cuando llega al océano el costo ambiental y económico es demasiado alto", opinó el ingeniero Robert Getman, quien supervisó la instalación de Wanda.

(Editado por Diego Oré)