Cómo viven y qué hacen hoy los padres de Madeleine McCann, a 15 años de la desaparición de su hija
En 2007, Kate y Gerry McCann se tomaron 10 días de vacaciones junto a sus tres hijos, Madeleine (3), Amelie (2) y Sean (2), y amigos de la pareja, pero jamás imaginaron que durante este descanso en Praia da Luz, Portugal, se desataría su peor calvario: aquel 3 de mayo, hace 15 años, desapareció su hija mayor. Desde entonces, llevan a cabo una intensa búsqueda para encontrarla y, al mismo tiempo, enfrentan acusaciones que los señalan como los culpables del crimen de la menor, que hoy tendría 19 años.
Hasta ese 3 de mayo del 2007, Gerry y Kate McCann trabajaban en el hospital Leicester: ella era médica clínica y él, un reconocido cardiólogo; pero ambos dejaron sus puestos laborales para dedicarse de lleno a la búsqueda de Madeleine, a quien vieron por última vez cuando la dejaron durmiendo, junto a sus dos hermanos, en el complejo de departamentos donde se alojaron esas vacaciones.
Desde el comienzo, la masificación del caso tuvo dos contrapuntos: que todo el mundo estuviera atento a una posible aparición de la niña en cualquier lugar del planeta y que los padres fueran señalados por cada uno de los pasos que dieran.
Con una actitud avasallante y al mismo tiempo conservadora, se pararon una y otra vez frente a los medios para pedir por su hija, hasta que comenzaron a ser cada vez más atacados por los rumores. Desde entonces, mantienen un cierto hermetismo, aunque sin dejar de accionar para encontrar las respuestas que les permitan saber qué le sucedió a Madeleine.
Es que, en primer instancia, un sector de la sociedad puso en duda su versión y creía que ellos tenían relación con la desaparición. Incluso, hubo investigaciones que apuntaron hacia ellos, pero los resultados que arrojaron fueron negativos.
Mientras tanto, entre versiones cruzadas y pese a una búsqueda intensa que ya lleva 15 años, Madeleine McCann sigue sin aparecer.
A medida que pasaron los años, las noticias del caso fueron cada vez más escasas. Sin embargo, a principios de 2021, las autoridades informaron que están detrás de un sospechoso: Christian Brueckner, un ciudadano alemán condenado por delitos relacionados con la pedofilia y el tráfico de drogas, quien está preso por violar a una mujer estadounidense de 72 años en la zona donde se vio por última vez a la Madeleine. Se trata de la primera persona investigada formalmente como responsable de la desaparición de la menor.
En tiempos donde aún no había personas en el ojo de la Justicia, Kate y Gerry McCann se abocaron a la difícil tarea de obtener información, lo que los llevó a dejar sus trabajos profesionales. Sin embargo, con el pasar de los años, la pareja que se conoció, en 1993, en la facultad de medicina de la Universidad de Leicester, poco a poco, trató de reconstruir su vida.
De esta manera, Kate se convirtió en referente de diversas asociaciones de búsqueda de niños y fundó la ONG Find Madeleine. En 2020, conmovida por la situación que atravesó el mundo por la irrupción del coronavirus, volvió a ejercer como médica en hospitales locales para unirse a los profesionales que luchan contra el virus.
“Se ha reincorporado a tiempo completo para ayudar a los más necesitados. Existe una gran demanda de médicos durante esta situación sin precedentes y ella disfruta haciendo su pequeño esfuerzo por ayudar”, indicó tiempo atrás un familiar de los McCann en diálogo con The Sun.
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Por su parte, cuando desapareció su hija, Gerry dejó de atender a sus pacientes, pero -al cabo de un tiempo- retomó su labor y actualmente es profesor de la institución donde se graduó de médico.
A 15 años del suceso que cambió sus vidas para siempre, Kate y Gerry volvieron a tener una rutina diaria de trabajo. Pese a ello, y mientras cuidan de sus hijos mellizos, que hoy tienen 17 años, aún conservan la esperanza de saber que ocurrió con Madeleine aquel 3 de mayo de 2007 y cuál fue su destino.