La vitamina D combate bacterias que atacan al sistema inmunitario

CIUDAD DE MÉXICO, abril 12 (EL UNIVERSAL).- Mantener fuerte a nuestra salud depende de vitaminas, minerales, proteínas, fibras y demás nutrientes que interfieren en el funcionamiento de nuestro organismo. La alimentación es la principal acción mediante la cual podemos aportárselos al cuerpo, por lo que saber elegir qué alimentos consumimos es fundamental para que el sistema inmunitario nos mantenga protegidos.

En esta oportunidad pondremos especial atención en una vitamina, de las más importantes, que nuestro cuerpo produce gracias a la intervención de algunos alimentos y de la exposición al sol. Los especialistas recomiendan no descuidarla y tenerla siempre presente ya que tiene la capacidad de combatir las bacterias y virus que atacan al sistema inmunitario.

El Instituto Mayo Clinic señala que el sistema inmunitario se encarga de defendernos del ataque de bacterias y virus. Las primeras son organismos unicelulares responsables de enfermedades como faringitis estreptocócica, infecciones del tracto urinario y tuberculosis. En cuanto a los virus, se trata de organismo mucho más pequeños que las bacterias y pueden causar una multitud de enfermedades que van desde el resfriado común hasta el Sida.

Conociendo estos detalles, resulta muy importante que sepamos mantener fuerte a nuestro sistema inmunitario, por tal motivo es que destacamos a la vitamina D como esencial en este aspecto. Este componente tiene una función similar a la de una hormona ya que se encarga de regular todos los procesos químicos y físicos del organismo que precisan de energía.

Al respecto, los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos precisan que la vitamina D ayuda a que el organismo absorba el calcio, fundamental para los huesos, los músculos y los nervios, pero sobre todo es necesaria para mejorar la capacidad de nuestro sistema inmunitario. Además, destacan que suministrarle esta vitamina al cuerpo puede hacerse a través de suplementos farmacéuticos o de alimentos como el pescado graso, el hígado, la ricota, la carne roja, la leche, la palta, las yemas de huevo, los cereales fortificados y los hongos.

Y más allá de esto, las personas deben exponerse al sol ya que esta vitamina se sintetiza en el tejido cutáneo. Esto se da a partir de moléculas de colesterol, mediante las cuales se activan y se manifiesta dentro del organismo.