Vicente Fox, el hombre que no se atrevió a enfrentar a EEUU cuando fue presidente de México
El discurso con el que Donald Trump arrancó su campaña diciendo que de México llegaban a Estados Unidos narcotraficantes, delincuentes y violadores y para solucionar este problema propuso la construcción de un muro, por el que los mexicanos tendrían que pagar, causaron indignación y coraje entre los mexicanos, pero para el expresidente de México, Vicente Fox el tema se convirtió en una especie de “pleito personal” con el entonces candidato republicano.
No es de extrañar la beligerancia en el tema mantenida por Fox vía las redes sociales, por medio de las cuales envía mensajes de rechazo a Donald Trump. Así lo hizo durante la campaña cuando le mandó el siguiente mensaje: “I’am not to going pay for this fucking wall” (Yo no voy a pagar por ese puto muro)
Donald Trump respondió: “FMR PRES of Mexico, Vicente Fox horribly used the F word when discussing the wall. He must apologize! If I did that there would be a uproar!” (El expresidente de México Vicente Fox usó horriblemente la palabra con la letra ‘F’ cuando se refirió al muro. Él debe disculparse. Si yo lo hubiera hecho sería un escándalo).”
Con estos mensajes inició el intercambio entre los dos personajes. La respuesta de Donald Trump dio la pauta al expresidente Fox para continuar enviando mensajes que fueron tomados en las redes sociales y en diversos medios de comunicación de la Unión Americana, donde un mercado hispano es receptor de la polémica que supone la confrontación entre estos políticos. Uno que conquistó el poder y otro que desde el retiro no tiene nada que perder. El Trump empresario que llega al poder y Fox el agricultor que no supo para que era el poder.
Ellos no lo saben pero son muy parecidos, saben que las redes sociales sirven para hacer campañas y que para que los demás medios repitan sus mensajes deben decir barbaridades. En eso Vicente Fox es un maestro y lo sigue demostrando al mantener vigente su confrontación con el ahora presidente de los Estados Unidos Donald Trump.
Ante la insistencia del presidente Trump de construir el muro en la frontera de Estados Unidos con México y que lo paguen los mexicanos Vicente Fox le escribió en su cuenta de Twitter a Sean Spicer, vocero de la Casa Blanca “Sean Spicer, le he dicho esto a @realDonaldTrump y ahora te diré: México no va a pagar por ese jodido muro. #FuckingWall”.
El expresidente Vicente Fox había recomendado al presidente Peña Nieto cancelar su reunión con Donald Trump, por lo que lo felicitó cuando lo hizo, vía Twitter le dijo: “De ciudadano a presidente: ¡Bravo, @EPN! México merece dignidad y respeto, no podemos dialogar donde no existe ninguno de los dos”
Por esa misma vía Fox le dijo a Trump: “Te ganamos la partida, tuviste que recular, echarte para atrás, chiquitos pero picosos”.
“México, a @realDonaldTrump ya le dio comezón ¡Chiquitos pero picosos! Se ha dado cuenta que México es grande y firme.”
La actitud de confrontación de Vicente Fox, a través de las redes sociales, frente a Donald Trump y la reproducción de sus mensajes en los medios de comunicación, han creado la impresión de que es un defensor de los derechos de los mexicanos, incluidos los radicados en Estados Unidos y, por extensión, de los demás hispanos que se encuentran en ese país.
Pero no siempre fue así, es un hecho histórico que su actitud ante el presidente de Estados Unidos antes fue servil, esa conducta fue la que lo llevó a dar un trato irrespetuoso a Fidel Castro cuando en abril de 2002 al celebrarse la Cumbre Extraordinaria de Las Américas, en Monterrey, para evitar un inconveniente al presidente George W. Bush le dijo al comandante Castro “comes y te vas”, lo que desató uno de los incidentes más molestos de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
Estando en funciones, Vicente Fox invitó a su rancho a George W. Bush, donde lo agasajo, pero simularon una gira de trabajo por el estado de Guanajuato, posteriormente Fox se negaría a dar apoyo a Bush, cuando se le pedía para el ataque a Afganistán tras los atentados terroristas del 11 de septiembre, toda vez que México presidía en ese entonces el Consejo de Seguridad de la ONU. La estrategia de Fox ni siquiera fue elegante, simplemente se metió a un quirófano para no responder las llamadas de su homólogo estadounidense. El precio que pagó fue echar por el drenaje la tan esperada reforma migratoria, la ‘enchilada completa’ que jamás llegó.
La actitud servil de Vicente Fox motivó que el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, lo llamara “Cachorro del Imperio”. Hoy, cuando han pasado diez años en los que no está con los reflectores de los medios atendiendo sus “diarreas verbales” y sin tener nada que perder, desde su rancho San Cristobal, ingresa al mundo a través de las redes sociales para presentarse como defensor de los intereses de México. Es una oportunidad y él no la podía dejar pasar.
El éxito de Vicente Fox es su capacidad para crear imagen por la vía de hablar, hablar, hablar. Pero de todo lo anterior no se quiere acordar. Lo que hace hoy no lo hizo cuando fue presidente y eso es porque ahora no tiene nada que perder.