Veteranos renuncian por el entrenamiento y misión militarista de la Guardia Estatal de DeSantis

Cuando la primera clase de reclutamiento de la nueva Guardia Estatal de la Florida del gobernador Ron DeSantis se presentó para la capacitación el mes pasado, tenían experiencias y expectativas variadas.

Durante 30 días de junio, adolescentes que habían terminado la escuela secundaria y veteranos militares retirados llegaron a Camp Blanding, la base de la Guardia Nacional cerca de Jacksonville.

A muchos se les dijo que serían voluntarios de una Guardia Estatal resucitada con una misión no militar: ayudar a los floridanos en momentos de necesidad o catástrofe.

En cambio, la Guardia Nacional del estado capacitó a los voluntarios para el combate: los jeans y los pulóveres informales fueron sustituidos por uniformes de camuflaje, a los voluntarios a los que se les había dicho que podían conservar su vello facial se les ordenó que se afeitaran y se les enseñó cómo hacer rapel con cuerdas, navegar por el bosque y responder a incidentes bajo mando militar.

Cuando DeSantis anunció en 2021 que quería reactivar la Guardia Estatal, que llevaba mucho tiempo inactiva, prometió que ayudaría a los floridanos en situaciones de emergencia, pero en el año transcurrido desde su lanzamiento, el personal clave y una misión definida siguen siendo difíciles de alcanzar. El estado está buscando el tercer líder del programa en ocho meses. Según los registros revisados por Herald/Times y entrevistas con voluntarios del programa, varios reclutas renunciaron después de la primera clase de capacitación el mes pasado porque temían que se estuviera volviendo demasiado militarista.

Semanas después de esa capacitación inicial en junio, un voluntario, un capitán retirado discapacitado de la Infantería de Marina, llamó a la Policía para denunciar que fue golpeado por instructores de la Guardia Nacional de la Florida cuando lo metieron a la fuerza en una furgoneta después de cuestionar el programa y su liderazgo.

La oficina de DeSantis remitió las preguntas al general de división John D. Haas, quien que supervisa la Guardia Nacional de la Florida.

En un comunicado, Haas dijo que la Guardia Estatal era una “organización militar” que se usará no solo para emergencias, sino para “ayudar a la aplicación de la ley con los disturbios y la inmigración ilegal”.

“Estamos conscientes que algunos elementos que fueron retirados están descontentos”, dijo Haas. “Es de esperar con cualquier curso que exija rigor y disciplina”.

Anayiah Gilbert, voluntaria de la Guardia Estatal de la Florida, se arrastra bajo un alambre durante una capacitación en un video publicado por la cuenta del gobernador Ron DeSantis en Twitter. En el video, Gilbert dijo que era estudiante universitaria y que tuvo una experiencia muy positiva en la capacitación. Captura de pantalla de un video de DeSantis en Twitter

Elegido como líder, este veterano renunció el primer día

Tres antiguos miembros dijeron a Herald/Times que el programa se desvió de su misión original.

“El programa fue secuestrado y se convirtió en algo de lo que estábamos tratando de alejarnos: una milicia”, dijo Brian Newhouse, un veterano retirado de 20 años de la Marina que fue elegido para dirigir una de las tres divisiones de la Guardia Estatal.

El equipo de liderazgo original se imaginó un equipo de respuesta ante catástrofes formado por veteranos y civiles con diversas habilidades prácticas, de acuerdo con Newhouse. Otros dos veteranos militares, quienes pidieron no ser identificados por temor a posibles represalias y que renunciaron más tarde, expresaron preocupaciones similares sobre un cambio en la misión de la Guardia Estatal.

El primer día de capacitación, Newhouse dijo que fue escoltado fuera de la base después de presentar varias quejas, entre ellas que el calendario de la Guardia Nacional exigía capacitarse los domingos, en lugar de permitir a los miembros usar esos días para servicios religiosos y tiempo personal, como era el plan original.

Dijo que anteriormente se había quejado de que la Guardia Nacional no tuviera médicos a la mano durante la capacitación.

“Ni siquiera creo que el gobernador sepa lo que está pasando. No creo que esto esté en su radar en este momento”, dijo Newhouse, señalando que el propio DeSantis es veterano.

“Creo que estaría horrorizado de que un veterano —un veterano discapacitado— fuera objeto de abuso por otros militares”.

Reclutas de la Guardia Estatal de la Florida recibieron instrucción de habilidades acuáticas por parte de soldados de la Guardia Nacional de la Florida y contratistas civiles para en un ejercicio de capacitación de supervivencia acuática en Camp Blanding, Florida, el 14 de junio de 2023. . Sargento Marc Morgenstern, Ejército de Estados Unidos.
Reclutas de la Guardia Estatal de la Florida recibieron instrucción de habilidades acuáticas por parte de soldados de la Guardia Nacional de la Florida y contratistas civiles para en un ejercicio de capacitación de supervivencia acuática en Camp Blanding, Florida, el 14 de junio de 2023. . Sargento Marc Morgenstern, Ejército de Estados Unidos.

La visión del gobernador para la Guardia Estatal

El renacimiento de la Guardia Estatal de la Florida empezó modestamente.

DeSantis propuso traer de vuelta a la fuerza de la era de la Segunda Guerra Mundial para complementar la Guardia Nacional de la Florida debido al exceso de trabajo y falta de personal. Aunque algunos demócratas criticaron que se le diera más poder a DeSantis, el año pasado los legisladores estatales le dieron al gobernador el doble de voluntarios de los que pedía: 400, y un presupuesto de $10 millones.

A diferencia de la Guardia Nacional, los miembros de la Guardia Estatal no pueden ser desplegados por el gobierno federal, ellos solo responden ante el gobernador.

Los legisladores en 2022 añadieron estipulaciones que decían que los miembros solo podían ser llamados en caso de emergencia y no podían operar fuera del estado. Esos requisitos se eliminaron un año después.

El programa, abierto a los floridanos de entre 18 y 60 años, recibió miles de solicitudes, según DeSantis.

En junio del año pasado, DeSantis nombró director de la Guardia Estatal a un condecorado marine y ganador de un Corazón Púrpura de Miami que murió por suicidio en octubre, en que el trastorno de estrés postraumático fue un factor, según un reporte policial. En enero, DeSantis nombró al subdirector del programa Luis Soler, quien gana $165,000 al año, para dirigir la fuerza.

Soler, capitán de la Reserva de la Marina de Estados Unidos, empezó a reclutar personal. Se le pidió a Newhouse y a otros que recorrieran todo el estado, entrevistaran a los reclutas de la Guardia Estatal y buscaran personas con diversas habilidades. Se supone que los voluntarios reciben estipendios de $200 por los días que son llamados a trabajar.

Newhouse dijo que él y Soler veían el programa más como un equipo de respuesta de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) que una unidad de la Guardia Nacional, evitando rangos y uniformes camuflados. Dijo que veía la Guardia Estatal como una forma de mejorar el currículo de los estudiantes universitarios y que los veteranos y otras personas siguieran sirviendo a sus comunidades.

Sin embargo, en marzo, la visión del estado empezó a cambiar.

Ese mes, los legisladores estatales y el gobernador revelaron que querían asignar a la Guardia Estatal $89 millones para comprar barcos, aviones y helicópteros; querían que una unidad especializada tuviera poderes policiales y capacidad para portar armas.

Y querían aumentar la Guardia Estatal a 1,500 miembros. En lugar de ser activados solo durante emergencias dentro de la Florida, podrían ser enviados a cualquier estado para “proteger y defender al pueblo de la Florida de amenazas a la seguridad pública”.

Reclutas de la Guardia Estatal de la Florida recibieron instrucción de habilidades acuáticas por parte de soldados de la Guardia Nacional de la Florida y contratistas civiles para un ejercicio de capacitación de supervivencia acuática en Camp Blanding, Florida, el 14 de junio de 2023.. Sargento Marc Morgenstern, Ejército de Estados Unidos.
Reclutas de la Guardia Estatal de la Florida recibieron instrucción de habilidades acuáticas por parte de soldados de la Guardia Nacional de la Florida y contratistas civiles para un ejercicio de capacitación de supervivencia acuática en Camp Blanding, Florida, el 14 de junio de 2023.. Sargento Marc Morgenstern, Ejército de Estados Unidos.

Aunque casi la mitad de los estados tienen guardias estatales voluntarios, normalmente con estructuras militares, pocos o ninguno parecen tener poderes equivalentes. Texas, por ejemplo, desplegó su Guardia Estatal en la frontera entre Estados Unidos y México, pero sus miembros no pueden llevar armas ni efectuar detenciones y no disponen de aviones.

DeSantis, candidato a la presidencia, envió a miembros de la Guardia Nacional de la Florida y agentes de la ley del estado a la frontera de Texas y dijo que está dispuesto a trabajar con gobernadores y jefes de Policía afines para hacer más esfuerzos dirigidos por el estado en la frontera con México.

“Creo que los estados tienen que ser más agresivos”, dijo DeSantis en términos de tomar medidas sobre la aplicación de la ley federal de inmigración.

Veterano discapacitado denunció malos tratos

Los primeros voluntarios del programa llegaron en junio al centro de capacitación de la Guardia Nacional en Camp Blanding.

Los asistentes dijeron al Herald/Times que la capacitación no fue dirigida por Soler, el director del programa; en su lugar, fue dirigida por el teniente coronel de la Guardia Nacional de la Florida Peter Jennison, piloto, abogado y oficial de capacitación que además compone música, y por el nuevo jefe de Personal de la Guardia Estatal Ben Fairbrother, antiguo agente político que desde entonces ha trabajado para agencias estatales como la División de Gestión de Emergencias.

Según los calendarios obtenidos por el Herald/Times, el programa incluía capacitación relacionada refugios de la Cruz Roja, reanimación cardiopulmonar y rescates en el agua. Se trataba de un campamento de Orientación Básica y Capacitación de Operaciones, con instructores de ejercicios militares y un “ritmo de batalla” que hacía que los voluntarios se levantaran a las 6 a.m. y se fueran a la cama a las 10 p.m.

A los miembros se les enseñaba a seguir una jerarquía militar y debían cumplir determinados requisitos físicos en función de su edad; a algunos también se les enseñaban tácticas defensivas y de desescalada, “técnicas de combate” y a disparar armas sin munición real en un entorno similar al de un videojuego, según consta en los registros.

Sin embargo, la capacitación solo se parecía vagamente a un campamento militar, según Newhouse y otros dos voluntarios que juntos pasaron décadas en el Ejército. Describieron a los instructores de la Guardia Nacional de inexpertos y la capacitación de chapucera.

A diferencia de un campo de capacitación militar, los voluntarios de la Guardia Estatal apenas recibían material escrito de capacitación y no se les examinaba lo que aprendían. A pesar de tener que superar pruebas de aptitud física, ningún médico los examinaba para determinar su salud.

Algunos veteranos militares se encontraron con que les ladraban miembros de la Guardia Nacional mucho más jóvenes y con mucha menos experiencia.

Otros dos voluntarios, quienes completaron la capacitación y hablaron bajo condición de no ser identificados porque no estaban autorizados a hablar con periodistas, dijeron que el programa sí había cambiado desde que se inscribieron. Los reclutas y los instructores comentaban a menudo que estaban “pilotando el avión a medida que lo construíamos”, dijeron los dos voluntarios, pero eso era de esperarse.

Un reporte de incidentes de la Policía del Condado Clay reveló que las tensiones se sentían durante la capacitación.

En la mañana del 23 de junio, un voluntario que era capitán retirado de la Infantería de Marina abordó a Jennison en los dormitorios para hacerle preguntas sobre la capacitación que, en su opinión, “no habían sido respondidas”, expresa el reporte.

“¡Así que usted es el líder del grupo!”, dijo Jennison, según el reporte, señalando al ex marine, cuyo nombre fue tachado.

Jennison “aparentemente se refería a uno o más miembros que criticaban la nueva organización”, escribió el policía.

Después de hacer preguntas, los dos se dieron la mano y el marine retirado tomó el autobús hacia el comedor, pero, una vez allí, dijo que dos sargentos de la Guardia Nacional lo sacaron de la fila y le ordenaron hacer flexiones.

“Se negó, diciendo ‘¡No, no puedo!’, porque está 100% discapacitado y le dolía una prueba de aptitud física del día anterior”, dice se lee en el reporte de la Policía.

“¡Entonces tienes que volver a casa!”, le gritaron los sargentos, dijo.

Finalmente accedió y llegó una furgoneta blanca. Como no se sentía seguro, se negó a subir y dijo que iría andando hasta su auto, que estaba a cierta distancia, según el reporte.

Como oficial retirado, se le permitió usar la base, pero los sargentos “lo agarraron y lo empujaron a la furgoneta”.

“Protestó porque estaban agrediendo a un oficial mientras intentaba salir de la furgoneta y le dijeron que no era un oficial, sino solo un recluta”, indica el reporte.

Cuando la Policía preguntó, un teniente de la Guardia Nacional le dijo a un policía que el marine retirado “había cuestionado el programa desde que entró y discutía con los mandos”.

Otro voluntario, un marine retirado de 30 años, presenció el incidente y presentó una declaración ante la Policía, afirmando que los sargentos actuaron “con bastante dureza” y que le dijeron a la presunta víctima que “no les importaba que fuera un capitán retirado [de la Infantería de Marina], que solo era un recluta”.

El policía archivó el caso, determinando que el capitán retirado de los marines no había sido agredido ni encarcelado falsamente.

El ex capitán abandonó la Guardia Estatal ese mismo día y lo mismo hizo el testigo.

Según la doctrina y la capacitación del Ejército, los instructores tienen prácticamente prohibido tocar a los alumnos, salvo en contadas ocasiones, como para ayudarlos a superar un obstáculo, según la sargento mayor Teresa King, jubilada y primera mujer que dirigió la Escuela de Sargentos de Instrucción del Ejército en Carolina del Sur.

King leyó el reporte y dijo que los instructores de la Guardia Nacional estaban “equivocados” y que, en su lugar, deberían haber llevado al marine retirado para que recibiera asesoramiento.

“Por respeto a la persona que está capacitando, nunca, nunca toque a un soldado. Jamás”, dijo.

Reclutas de la Guardia Estatal de la Florida recibieron instrucción de habilidades acuáticas por parte de soldados de la Guardia Nacional de la Florida y contratistas civiles para un ejercicio de capacitación de supervivencia acuática en Camp Blanding, Florida, el 14 de junio de 2023. Sargento Marc Morgenstern, Ejército de Estados Unidos.
Reclutas de la Guardia Estatal de la Florida recibieron instrucción de habilidades acuáticas por parte de soldados de la Guardia Nacional de la Florida y contratistas civiles para un ejercicio de capacitación de supervivencia acuática en Camp Blanding, Florida, el 14 de junio de 2023. Sargento Marc Morgenstern, Ejército de Estados Unidos.

El programa se quedó sin líder

Newhouse dijo que ha estado hablando con otros antiguos voluntarios de la Guardia Estatal y que todos quieren que el programa salga adelante.

“No estamos aquí para echar abajo el programa”, dijo Newhouse. “Estamos aquí para corregir un error”.

Haas dijo en un comunicado que era “algo desafortunado que algunas de estas personas recurrieran a las quejas a los medios de comunicación”.

“La inmensa mayoría de los participantes han elogiado la capacitación y, de hecho, han agradecido la oportunidad de reflexionar y convertirse en mejores ciudadanos”, dijo.

Ni Haas ni la oficina del gobernador respondieron preguntas sobre la queja del capitán retirado y tampoco sobre por qué los voluntarios recibieron capacitación con armas.

La teniente coronel Miranda L. Gahn, portavoz de la Guardia Nacional de la Florida, dijo que los miembros que capacitaron a los voluntarios de la Guardia Estatal fueron llamados de sus trabajos diarios “en función de sus habilidades y experiencia únicas”.

“La investigación del caso que usted menciona determinó que no se cometió ningún delito y el caso se cerró”, dijo Gahn en un comunicado.

El 30 de junio, la Guardia Estatal graduó a su primer grupo, 120 reclutas, muy por debajo de los 1,500 que los legisladores estatales aprobaron este año.

Jennison y Fairbrother hablaron en la graduación. Soler no asistió y tampoco DeSantis, quien estaba en Filadelfia hablando con el grupo conservador de derechos de los padres Madres por la Libertad de ese día. Su oficina envió un comunicado de prensa felicitando a los “soldados” de la Guardia Estatal que se graduaban.

Una semana más tarde, la oficina de DeSantis anunció, a través del medio de noticias conservador Florida Standard, que Soler renunció por “razones personales”. Soler no pudo ser contactado para hacer comentarios.

El programa ahora no tiene líder por segunda vez en menos de un año. La mayoría de los líderes originales nombrados por Soler han dimitido.

Entre los miembros de la primera promoción de la Guardia Estatal estaba el representante estatal Tom Fabricio, republicano de Miami Lakes, un abogado sin aparente experiencia militar. El futuro presidente de la Cámara de Representantes de la Florida, Sam Garrison, asistió a la ceremonia y tuiteó una foto con Fabricio con su uniforme de camuflaje.

Respondiendo a las preguntas solo por escrito, Fabricio dijo que la capacitación era lo que esperaba.

“No me sorprendió que el campo de capacitación de FSG fuera un campo de capacitación militarista”, escribió Fabricio. “Esto se debe principalmente a que, para decirlo claramente, se llama ‘campo de capacitación’ y estaba en una base de capacitación militar”.

Reclutas de la Guardia Estatal de la Florida recibieron instrucción de habilidades acuáticas por parte de soldados de la Guardia Nacional de la Florida y contratistas civiles para ejecutar un ejercicio de capacitación de supervivencia acuática en Camp Blanding, la Florida, el 14 de junio de 2023. Sargento Marc Morgenstern, del Ejército de Estados Unidos.