Por primera vez, USAID destinará $2 millones en ayuda a víctimas del huracán Ian en Cuba

La Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, la rama del gobierno que moviliza la ayuda humanitaria en todo el mundo y que las autoridades cubanas han acusado de ser un brazo de la CIA, ha dado el paso sin precedentes de destinar $2 millones para ayudar a las víctimas del huracán Ian en Cuba, que dañó más de 100,000 viviendas en el occidente del país.

En un comunicado el martes, un portavoz del Departamento de Estado, la agencia matriz de USAID, dijo que los fondos de ayuda de emergencia se canalizarán a través de organizaciones internacionales presentes en el país.

“Estados Unidos trabajará con organizaciones confiables e independientes que operan en el país y que tienen una larga presencia en las comunidades afectadas por los huracanes”, dijo Ned Price. “Actualmente estamos revisando solicitudes de organizaciones como la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja para brindar esta asistencia”.

Anteriormente, el Herald informó la semana pasada que USAID había enviado equipo de protección personal, incluidos uniformes para bomberos, a Cuba en respuesta a un devastador incendio en una instalación de almacenamiento de petróleo en el puerto de Matanzas en agosto. Pero la agencia no pudo certificar a los miembros del Congreso dónde fueron a parar los uniformes.

USAID envió uniformes de bomberos a Cuba tras devastador incendio. ¿Dónde están?

Si bien USAID dijo que utilizará a terceros para canalizar la asistencia, tal esfuerzo requiere el acuerdo de las autoridades de la isla para aceptar que la ayuda ingrese al país y sea distribuida por organizaciones no gubernamentales. El canciller de la isla, Bruno Rodríguez, confirmó que así fue en Twitter.

“Agradecemos el ofrecimiento de ayuda humanitaria de EEUU,” dijo Rodríguez. “El aporte material valorado en 2 millones de USD por vía de la Federación Internacional de la Cruz Roja contribuirá a nuestros esfuerzos de recuperación y apoyo a los damnificados por los estragos del Huracán Ian”.

Históricamente, Cuba ha rechazado sistemáticamente la ayuda humanitaria de Estados Unidos. Los funcionarios cubanos también han acusado repetidamente a USAID de apoyar a los disidentes cubanos y financiar programas encubiertos de cambio de régimen.

Pero en los últimos meses han aumentado las preocupaciones entre los funcionarios de la administración de Joe Biden acerca del deterioro de la situación en la isla. Casi 200,000 cubanos han ingresado a Estados Unidos en el último año fiscal, huyendo de la escasez de alimentos, el alza de los precios, los apagones diarios y el aumento de la represión.

Huracán Ian dañó o destruyó más de 77,000 viviendas en Cuba, dice el gobierno

Como resultado, funcionarios estadounidenses y cubanos han entablado conversaciones sobre la asistencia tras el incendio en Matanzas y la devastación que dejó el huracán Ian, que azotó las provincias de Pinar del Río y Artemisa y provocó el colapso de la anticuada red eléctrica del país.

La mayor parte de Pinar del Río aún no tiene electricidad. Los apagones de largas horas de duración ocurren a diario en todo el país, situación que ha provocado protestas en La Habana y en otras provincias.

El anuncio del martes tiene como trasfondo el debate sobre el envío de ayuda humanitaria a Cuba en un momento crítico. Varios activistas y organizaciones de exiliados habían instado a la administración de Biden a encontrar formas de canalizar el apoyo directamente al pueblo cubano a través de organizaciones no gubernamentales de confianza.