La universidad marroquí que aspira a crear el Silicon Valley agrotecnológico de África

María Traspaderne

Benguerir (Marruecos), 21 mar (EFE).- En la localidad marroquí de Benguerir, entre Casablanca y Marrakech, se levanta desde hace siete años una universidad que pretende crear un Silicon Valley centrado en la agrotecnología, con la mirada puesta en África y una mayoría de alumnos becados.

Diseñada por el arquitecto español Ricardo Bofill y financiada por la fundación de la Oficina Jerifiana de Fosfatos (OCP) -la mayor empresa pública marroquí-, el campus de Benguerir de la Universidad Politécnica Mohamed VI (UM6P) es un oasis educativo en una pequeña y modesta ciudad del centro de Marruecos.

Sus modernas construcciones de tono ocre, un color parecido al de la tierra semidesértica de la zona, donde se ubica una mina de la OCP, se alzan en 80 hectáreas que acogen seis facultades centradas en la ciencia, la tecnología y la salud, con la escuela de agricultura como joya de la corona.

Un 60 % de estudiantes becados

Los 2.000 universitarios de la UM6P (sin contar a otros 1.000 de una escuela de programación computacional) se alojan en el campus, por donde se mueven en patinetes eléctricos y coches de golf, y disfrutan de dos auditorios para 3.000 personas, dos recintos deportivos, un edificio multifuncional y una serie de plataformas que pretenden llevar la investigación a las empresas.

Sara Ghanen ha visto crecer la universidad. Esta joven, que cursa último año de Gestión Hospitalaria, nació en Benguerir hace 21 años de un padre soldado y una madre maestra y reconoce que nunca hubiera imaginado estudiar en un sitio así, menos aún cerca de casa. "Tuve que pasar pruebas muy duras", dice a EFE.

La mayoría de estudiantes de Benguerir ingresan por sus aptitudes. Están en un 60 % becados (un 80 % de ellos, como Sara, con todos los gastos pagados, incluyendo alojamiento y comida), gracias a una potente inversión de la fundación de la OCP cuyo montante no fue facilitado por la universidad.

En marzo de 2023, el capital de la universidad (que tiene un campus más en Rabat y otro en la ciudad saharaui de El Aaiún) ascendía a 32.000 millones de dirhams (2.922 millones de euros) tras una inyección de la fundación de 10.000 millones para sus planes de ampliación, según recogieron varios medios marroquíes.

El objetivo de la OCP, dedicada a la extracción de los valiosos fosfatos usados como fertilizantes, es beneficiarse de los hallazgos de la UM6P para aplicarlos a su campo, en una apuesta simbiótica que aspira a autofinanciarse con el tiempo.

Por eso la escuela de Agricultura es la mayor de Benguerir (acoge 500 alumnos) y la que genera la mayoría de los 1.251 artículos científicos publicados en 2023 por la UM6P -un 26 % más que en 2022-, explica a EFE el presidente de la universidad, Hicham El Habti.

"Queremos convertirnos -afirma- en la referencia en el campo de la agricultura en el continente africano, para conocer mejor su suelo, sus cosechas. Por ejemplo, estamos desarrollando un modelo de previsión meteorológico africano. Ahora se usa el europeo o americano, sin contar con las especificidades del continente".

De hecho, entre las nacionalidades de sus alumnos internacionales (un 9 % ahora y la universidad aspira a llegar a un 20 % en 2025) predominan las del África subsahariana, con Nigeria, Senegal y Benín a la cabeza.

Casi 70 hectáreas para futuras industrias

La UM6P, que prioriza en sus clases el inglés, no se ha incluido aún en las principales clasificaciones de universidades mundiales, lo que hace difícil valorar su impacto académico, pero sigue en expansión.

Entre sus planes de crecimiento figuran un hospital universitario con 400 camas que se inaugurará en septiembre, un museo de la ciencia cuyos trabajos arrancan este año y la ampliación del laboratorio de empresas emergentes, Stargate, que pasará de los 3.000 metros cuadrados actuales a 26.000 con un segundo edificio ya en construcción.

Detrás de los edificios de Stargate, señala El Habti, se extienden además 67 hectáreas preparadas para acoger las industrias que esperan que, en un futuro, monten las 'start-ups'.

Por el momento, desde la puesta en marcha de Stargate en marzo de 2020 sus responsables afirman que seis de las siete primeras empresas emergentes marroquíes que han conseguido ganar 1 millón de euros pasaron por este laboratorio, que ha acompañado 800 proyectos de agricultura, minería, renovables o informática.

"Muchos nos comparan con Silicon Valley. Se trata de crear una ciudad de innovación en torno a un corazón: los laboratorios de investigación. Ahora apostamos por crear la demanda. Somos muy optimistas", dice El Habti, y avanza que para 2030 esperan albergar 30.000 estudiantes, profesores, empresas y sus familias. Hoy hay 4.400.

Cuando acabe sus estudios, Sara pretende comenzar su andadura profesional en Marruecos, aunque reconoce que muchos de sus compañeros quieren emigrar a Europa. Una fuga de cerebros habitual en el país magrebí que la UM6P intenta paliar desarrollando sus proyectos sin salir del ecosistema universitario.

(c) Agencia EFE