Yahoo Noticias Una monja de 116 años supera el coronavirus: “Ni siquiera se dio cuenta de que lo tenía”
Una monja de 116 años, que se piensa es la segunda persona más anciana del mundo, ha sobrevivido a la infección por coronavirus.
La hermana Andre, cuyo nombre de nacimiento es Lucile Randon, superó la enfermedad que se ha cobrado 12 vidas en su residencia de ancianos, según el diario francés Nice Matin.
El personal de la residencia de Sainte Catherine Labouré en Tolón estaba “realmente preocupado” después de que le diagnosticaran la enfermedad el 16 de enero pues se sabe que la COVID-19 afecta más a las personas mayores. La hermana Andre es la persona más longeva de Europa.
Sin embargo, la hermana Andre, quien ha perdido la vista y se encuentra en una silla de ruedas, insistió en que “ni siquiera se dio cuenta de que lo tenía”, y planea celebrar su 117 cumpleaños el próximo 11 de febrero.
“Aunque cuidamos de todos nuestros residentes por igual, tener en nuestra residencia a la persona más anciana de Europa es un orgullo y una inmensa responsabilidad”, le dijo a Nice Matin, David Tavella, el encargado de comunicaciones del Sainte Catherine Labouré.
“Ella no me preguntó por su salud, sino por sus hábitos”.
“Quería saber, por ejemplo, si cambiaría la hora de la comida o de ir a dormir. No temía a la enfermedad. Sin embargo, estaba muy preocupada por los otros residentes”.
La hermana Andre, que proviene de Alès en Gard, se mantuvo asintomática durante semanas y dio negativo hace unos días. Fue uno de los 81 ancianos de la residencia que contrajeron la COVID-19, de los 88 que viven allí.
La residencia ha planeado celebrar su 117 cumpleaños cumpliendo con las precauciones vigentes.
La persona viva verificada más longeva del mundo es Kane Tanaka, de Japón, quien tiene 118 años.
Will Taylor
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