Turquía insiste en que no puede dar un sí al ingreso de Suecia en la OTAN
Budapest, 31 ene (EFE).- El ministro de Exteriores de Turquía, Mevlut Çavusoglu, dijo este martes que el ingreso de Suecia en la OTAN no es posible en la actualidad y culpó a Estocolmo de no atender las preocupaciones de seguridad de Ankara.
En una rueda de prensa conjunta con el ministro húngaro de Exteriores, Peter Szijjarto, el jefe de la diplomacia turca repitió que su país apoya la ampliación de la OTAN y comprende las preocupaciones de Suecia y Finlandia en materia de seguridad tras la invasión rusa de Ucrania.
"Pero es inaceptable que no se atiendan las preocupaciones de Turquía en materia de seguridad", agregó Çavusoglu.
Según Çavusoglu, Ankara no tiene problemas con Finlandia, el otro país candidato a entrar en la Alianza, pero en Suecia "la financiación del terrorismo, el reclutamiento de personas y la propaganda continúan".
"No es posible que digamos sí al ingreso de un país en la OTAN si no se cumplen estos requisitos. Se trata de cuestiones de seguridad y de lucha contra el terrorismo", subrayó el ministro turco.
Ankara se opone al ingreso de Suecia alegando que sus políticas respecto a los grupos armados kurdos son contrarias a los intereses de Turquía.
También ha criticado que se permitan manifestaciones de simpatizantes de milicias kurdas de Siria (YPG) o la guerrilla kurda de Turquía (PKK) y por no extraditar a personas que Ankara considera criminales fugados pero que han pedido asilo político en Suecia.
Aunque el PKK es calificado también como terrorista por la Unión Europea, las YPG son aliadas de EEUU y la coalición antiyihadista en su lucha contra el Estado Islámico. Para Turquía las YPG son una mera filial del PKK.
A esta situación se une la quema de un Corán en Estocolmo por parte de un ultraderechista frente a la embajada de Turquía, lo que suscitó la irá del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
Erdogan aseguró que después de lo sucedido Suecia no podía esperar el visto bueno de Turquía para su ingreso en la OTAN.
El ministro de Exteriores de Hungría indicó por su parte que entiende la posición de Turquía sobre la quema del Corán.
"Como cristiano puedo asegurar que quemar el libro santo de otra religión es absolutamente inaceptable. Decir que eso es parte de la libertad de expresión es una estupidez. Si un país quiere ser miembro de la OTAN y necesita el apoyo de Turquía debe ser más cuidadoso", afirmó Peter Szijjarto.
(c) Agencia EFE