Tras un golpe, anciana recupera la visión después de 20 años de ceguera

Habían pasado veinte años desde que Mary Ann Franco quedó completamente ciega; veinte años de molestias y de angustias tras haber quedado sin tan importante sentido.

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Mary Ann Franco después de su operación. (Foto: ABC News)

Ocurrió en 1995, cuando esta mujer residente en el estado de Florida fue víctima de un accidente automovilístico, por cuyas secuelas -aunque ya antes tenía problemas oculares- perdió completamente la visión.

Pero resulta que un ‘golpe’ del destino vino a remover el estado lamentable en que esta señora que ahora tiene 70 años se había visto sumergida.

Esta vez Mary Ann Franco fue víctima de un accidente doméstico que le dejó lesiones en el cuello y en un brazo. Tanto era el dolor de la mujer durante los meses posteriores a su caída, que tuvo que visitar al hospital, donde los médicos llegaron a la conclusión de que era necesario operarla de la lesión en el cuello, o de lo contrario seguiría con dolores por el resto de su vida.

Pues cuál no sería la sorpresa cuando la señora despertó de la anestesia, observó detenidamente a las personas que permanecían a su lado y sin pensarlo dos veces dijo:

“Señorita, la que va vestida entera de morado, ven aquí y dame algo para aliviar el dolor”.

De acuerdo con un reporte de Abc News, tanto las enfermeras como los familiares de la anciana se quedaron estupefactos: ¡Mary Ann veía, y ni siquiera seguía siendo daltónica, como antes de su primer accidente!

Interrogada por todos, Franco se limitó a asegurar que se trataba de “un acto de Dios”.

“La restauración de la visión de Mary Ann Franco es un verdadero milagro”, declaró John Afshar, el neurocirujano que dirigió la operación. “Realmente no tengo una explicación científica para ello.”

Sin embargo, a decir del especialista, existen muchas posibilidades de que durante la operación quedara desbloqueada una arteria que había permanecido obstruida a lo largo de veinte años, como consecuencia del accidente de auto.

Haber aligerado el paso de la sangre por este conducto durante la intervención quirúrgica, muy probablemente facilitó que el ojo volviera a ser irrigado y que como consecuencia la paciente recuperara la visión.

“Usted está en azul y en marr��n, y su corbata es de una especie de marrón…”, afirmó la anciana mientras conversaba con su médico. “Sí, eres tan guapo”, concluyó antes de provocar algunas risas.