Yahoo Noticias Terraza de la piscina sigue siendo el origen probable del derrumbe del edificio de condominios de Surfside, dicen investigadores federales
Una investigación federal sobre el derrumbe en junio de 2021 de una torre de condominios en Surfside que causó la muerte de 98 personas sigue apuntando a la terraza de la piscina del edificio como el punto de inicio más probable del colapso, dijeron investigadores el jueves en una reunión en Maryland.
En su primera actualización pública desde el otoño pasado de un esfuerzo de años para determinar qué causó la tragedia, los investigadores del Instituto Nacional de Normas y Tecnología (NIST) presentaron una visión detallada de cómo están analizando imágenes de video y entrevistas a testigos para acercarse a una conclusión.
Los investigadores afirmaron que existe “evidencia sólida” de que el derrumbe comenzó en la terraza de la piscina del edificio Champlain Towers South, de 12 pisos y en forma de L, aunque aún no han descartado un punto de fallo inicial “en alguna parte de la torre” que pudiera haber provocado el derrumbe de la terraza de la piscina.
“Creemos tener evidencia concluyente de que la terraza de la piscina se derrumbó antes que la torre”, declaró Glenn Bell, jefe asociado del equipo de investigación. “Lo que todavía estamos analizando es cuáles fueron los acontecimientos iniciadores”.
Se han gastado casi $30 millones en la investigación desde que comenzó en 2021, dijeron los investigadores el jueves. Además de analizar materiales del lugar del derrumbe y construir complejos modelos computarizados, los investigadores han estado entrevistando a sobrevivientes y otros testigos presenciales con ayuda de un equipo de la Universidad Internacional de la Florida (FIU).
También han estado analizando varios videos para comprender mejor la secuencia del derrumbe, incluido un video tomado por un turista la noche del derrumbe que mostraba agua entrando a chorross en el garaje y trozos de concreto cubriendo el suelo en el lado norte del edificio.
Los investigadores afirmaron haber trabajado con el FBI para mejorar el video, que ayuda a demostrar que la terraza de la piscina se derrumbó sobre el estacionamiento antes de que se desplomara la parte este de la torre.
Todavía falta más de un año para que se publique el borrador del informe de la investigación, previsto para mayo de 2025. El informe final se espera para septiembre de 2025 y tendrá implicaciones para millones de habitantes de rascacielos de todo el mundo, con recomendaciones sobre cambios en los códigos de edificación y las prácticas de construcción que pudieran evitar que se produjera una catástrofe similar en otros lugares.
“Queremos que nuestra investigación sobre este fallo tenga un impacto duradero”, declaró Judith Mitrani-Reiser, investigadora principal del NIST y oriunda de Miami. “Queremos que salve vidas y que garantice que esto no vuelva a ocurrir”.
Los hallazgos hasta ahora se hacen eco de una investigación del Miami Herald, que encontró que la terraza de la piscina se derrumbó varios minutos antes de que cayera la mitad de la torre. En consulta con ingenieros estructurales, el Herald identificó importantes puntos débiles en la estructura y otros problemas que se agravaron en las semanas previas al derrumbe. Entre ellos había zonas en las que la terraza de la piscina parecía hundirse peligrosamente, agrietando una jardinera cercana.
Según los investigadores, entre los puntos de inicio “más probables” estaban los fallos en las conexiones entre losas y columnas de la terraza de la piscina, que provocaron la caída de la losa alrededor de las columnas. Los “ruidos de golpes” que oyeron algunos habitantes antes del derrumbe refuerzan la idea de que los refuerzos de acero se habían fracturado en esos puntos de conexión.
En una presentación del pasado mes de junio, los investigadores afirmaron que la terraza de la piscina del edificio, de 40 años de antigüedad, tenía “márgenes críticamente bajos contra el fallo” debido a debilidades generalizadas en el diseño estructural que se vieron agravadas por la mala colocación y la corrosión del acero de refuerzo dentro de la terraza, así como por la adición de jardineras y adoquines pesados que no se habían tenido en cuenta en los diseños originales.
Aunque el equipo de docenas de ingenieros y otros expertos baraja unas dos docenas de hipótesis de fallo, intenta descartar posibilidades que parecen menos probables.
Entre ellas se incluyen factores subterráneos como un hundimiento de la piedra caliza bajo la torre o un asentamiento irregular de los cimientos del edificio. Los investigadores afirmaron el jueves que hay “muy pocas probabilidades” de que esos factores contribuyeran al derrumbe.
La investigación no ha encontrado pruebas de una explosión u otro acontecimiento extraordinario que pudiera haber desencadenado el siniestro.
Los investigadores aún no han explicado cómo el colapso de la terraza de la piscina pudo haber provocado la caída de la torre minutos después. Pero las simulaciones computarizadas realizadas por investigadores de la Universidad de Washington en colaboración con el Herald mostraron que, cuando la terraza se desplomó y se desprendió de un muro perimetral en el extremo sur de la piscina, los daños se habrían extendido por la torre a lo largo de la planta baja, cerca del gimnasio situado en el centro de la estructura en forma de “L”.
Los expertos que participaron como consultores en la investigación forense del Herald afirmaron que el derrumbe preliminar de la terraza habría tensado las columnas a lo largo de la mitad del perímetro de la torre, provocando su fractura y, en última instancia, su derrumbe hacia el interior junto con la mayor parte de la torre.
