Terraza de la piscina del edificio de Surfside tenía ‘márgenes muy bajos de resistencia’, dice investigación

Investigadores del Instituto Nacional de Normas y Tecnología (NIST) publicaron el jueves un resumen preliminar de sus conclusiones sobre el catastrófico derrumbe del edificio de condominios Champlain Towers South, en el que afirman que la terraza de la piscina tenía “márgenes críticamente bajos de resistencia”.

Según el resumen, la terraza de la piscina estaba diseñada con márgenes de seguridad muy bajos en la parte de la terraza que se derrumbó siete minutos antes que cayera el resto de la torre, con un saldo de 98 fallecidos en la madrugada del 24 de junio de 2021.

Los investigadores observaron que los problemas, que empezaron con deficiencias generalizadas en el diseño estructural, se agravaron con la mala colocación y corrosión del acero de refuerzo de la terraza y la adición de jardineras y losas decorativas pesados que no se habían tenido en cuenta en los diseños originales.

Las conclusiones se hicieron eco de los reportajes realizados por el Miami Herald en consulta con ingenieros estructurales que identificaron debilidades similares en la estructura y otros problemas que se agravaron en las semanas previas al colapso. Entre ellos había zonas en las que la terraza de la piscina parecía hundirse peligrosamente, agrietando una jardinera cercana.

Glenn Bell, jefe adjunto del equipo de investigación, explicó cómo los ingenieros examinaron los códigos y normas de construcción originales de 1980 para determinar en qué aspectos podía haberse desviado la construcción. También analizaron las normas de diseño de concreto armado de hace 40 años.

Llegaron a la conclusión que el diseño no cumplía los códigos y normas y “la falta de cumplimiento fue más grave en la estructura de la terraza de la piscina”, dijo Bell.

Según Bell, la resistencia en algunos puntos de la terraza de la piscina era de solo la mitad de la exigida en el momento de la construcción y tampoco habría cumplido los códigos actuales. Dijo que las débiles conexiones entre la terraza de la piscina y las columnas de soporte eran vulnerables al cizallamiento por punzonamiento, un tipo de fallo en que la losa se desconecta de la columna en un colapso repentino y arrollador.

“Incluso en ausencia de cualquier sobrecarga repentina o iniciador obvio de un fallo en la noche del colapso, las condiciones presentes en la losa de la terraza de la piscina en ese momento representaban un grave problema de seguridad para el edificio”, dijo Bell.

Los investigadores afirmaron que siguen barajando dos docenas de hipótesis del fallo, pero están trabajando para descartar teorías y están considerando la terraza de la piscina la zona más probable de iniciación del derrumbe.

Ken Hover, profesor de la Universidad de Cornell que trabaja en la investigación oficial, dijo en la reunión del jueves que el comienzo del fallo en la terraza de la piscina era una “hipótesis principal”. Hover dijo que los investigadores no han encontrado hasta ahora evidencia de una explosión, accidente vehicular en el garaje u otro acontecimiento extraordinario que pudiera haber desencadenado el derrumbe.

Abieyuwa Aghayere, profesor de Ingeniería Estructural en la Universidad de Drexel y consultor en la investigación del Herald, dijo que el resumen del instituto sugiere que el colapso fue causado probablemente por factores que eran predecibles y obvios con una revisión básica de la estructura y su diseño.

“Resulta muy aleccionador que estas deficiencias no se detectaran antes del derrumbe y se perdieran 98 vidas”, dijo Aghayere.

Se espera un informe final sobre las causas de la catástrofe para mayo de 2025.

Una búsqueda continua de respuestas

Según los investigadores gubernamentales, hasta la fecha se han gastado más de $18 millones en la investigación. Se están realizando pruebas en dos grandes almacenes, donde se guardan más de 600 piezas de evidencia.

Sigue en marcha la búsqueda de evidencia, como las grabaciones de seguridad del edificio la noche del derrumbe. La investigadora principal, Judith Mitrani-Reiser, calcula que se han dedicado más de 100 horas a buscar esas imágenes.

Mitrani-Reiser agregó que los investigadores tienen un memorando de entendimiento con el FBI para mejorar los videos y las imágenes fijas que puedan aportar pistas, como un video tomado por un turista en un hotel cercano en el que se ve la parte norte de Champlain South momentos antes que se derrumbara.

Científicos especializados en materiales están intentando reproducir la mezcla de concreto usada en 1980, lo que ha resultado problemático porque los materiales empleados en el sur de la Florida han cambiado mucho con el paso de los años. Han obtenido 70 muestras de concreto, aproximadamente el 18% de lo que pretenden recoger.

“Hemos observado cambios microestructurales debidos a factores ambientales”, dijo el jefe del proyecto, Scott Jones. “Parece que era un concreto resistente pero no tan duradero”.

Los investigadores dijeron que hasta ahora han entrevistado a 33 personas, entre sobrevivientes, familiares de las víctimas y funcionarios del gobierno.

Varios errores y fallos en el diseño y la construcción de las Champlain Towers guardan una similitud “espeluznante” con lo que se descubrió tras el derrumbe de una pasarela aérea en el Hotel Hyatt Regency de Kansas City, dijo el jefe del proyecto, Jack Moehle. Las plataformas se desplomaron sobre el vestíbulo, matando a 114 personas e hiriendo a 200 el 17 de julio de 1981, el año que se construyó Champlain South.

Un investigador dijo a Bell: “Es preocupante que no encontremos un desencadenante obvio”.

Bell respondió que, según su experiencia en la investigación de fallos estructurales, no suele haber una causa única.

“La gente se pregunta qué ocurrió en las Champlain Towers el 24 de junio de 2021, pero puede tratarse más bien de un deterioro gradual de una estructura que se ha visto comprometida a lo largo del tiempo”, dijo.

A medida que se acerca el segundo aniversario del derrumbe del edificio, los familiares de las víctimas han seguido exigiendo respuestas. Bell, jefe adjunto de la agencia de investigación, calificó la reunión del jueves de “gran paso adelante”.

“Estamos haciendo todo lo posible para comunicar públicamente nuestras conclusiones”, dijo.