Temporal en California: mansiones al borde del colapso y un estado de emergencia por inundaciones
Desde hace dos semanas que los habitantes del estado de California sufren las consecuencias de una serie de tormentas históricas. Debido al fenómeno meteorológico conocido como Pineapple Express -en el que ríos atmosféricos transportan humedad, lluvias y vientos desde Hawái hasta las poblaciones de la costa oeste-, varias regiones reportaron el colapso de acantilados por las intensas inundaciones. El mayor problema radica en que, como es habitual en la zona, los precipicios que bordean la costa están poblados de grandes mansiones que ahora enfrentan la posibilidad de caer al océano.
El canal local FOX 11 Los Ángeles compartió las imágenes de tres casas casi “tambaleándose” en el borde de un acantilado en el barrio Scenic Drive, en Dana Point, una ciudad ubicada a menos de 100 kilómetros del centro de Los Ángeles. Las lluvias torrenciales y las ráfagas de viento huracanado se llevaron una porción de la tierra, lo que dejó la parte trasera de las viviendas a sólo metros del borde.
Pese al millonario valor en el que están valuadas (que está estimado entre los US$12,9 y los US$15,9 millones), las mansiones no se salvaron de verse afectadas por el fenómeno climático. Por ahora, las autoridades del condado de Orange informaron que están siendo monitoreadas, pero que parecen “estar fuera de peligro” por el momento. Sin embargo, agregaron que los propietarios aún no están fuera de peligro, dado que el terreno está saturado y se esperan más lluvias.
“Parece más dramático de lo que realmente es”, aseguró la supervisora del condado de Orange, Katrina Foley. Algunos de los barrios más afectados presentaron muros de contención derrumbados, piedras y árboles tirados en las rutas y a la Interestatal 5 y otras carreteras importantes cerradas momentáneamente.
Mientras tanto, el gobernador de California, Gavin Newsom, declaró el estado de emergencia para ocho condados alrededor de la ciudad de Los Ángeles, en donde se estima que viven más de 22 millones de personas. Esto se debe a que sólo en la última semana, la segunda ciudad más poblada de Estados Unidos registró 562 deslizamientos de tierra.
“California, esta es una tormenta grave con impactos peligrosos y potencialmente mortales. Por favor, presten atención a las órdenes de emergencia o alertas de los funcionarios locales. Estamos preparados con un número récord de activos de emergencia sobre el terreno para responder a los impactos de esta tormenta”, declaró el mandatario californiano en un comunicado emitido este domingo por la noche.
Los condados de California que están considerados bajo estado de emergencia son Los Ángeles, Orange, Riverside, San Bernardino, San Diego, San Luis Obispo, Santa Bárbara y Ventura. En estas zonas, el Servicio Meteorológico Nacional emitió advertencias de vientos fuertes, inundaciones e incluso efectos de tormenta invernal en algunas zonas altas.
Las intensas inundaciones que azotaron especialmente durante las últimas 48 horas, dejaron al menos tres muertos, resultado de caídas de árboles provocadas por las fuertes precipitaciones. Uno de ellos era un hombre de 82 años que fue encontrado aplastado en el patrio trasero de su casa.
Mientras tanto, el NWS lo calificó como uno de los tres sistemas de tormentas más lluviosos de la historia de Los Ángeles, y podría dejar récords “históricos” de lluvia acumulada de más de 15 centímetros. Además, los fuertes vientos dejaron a más de 200 mil hogares y negocios sin electricidad en toda California.