La tarea de educar sobre la ideología socialista es vital | Opinión

{En la Florida muchos esperan con ansiedad que la nueva Ley Estatal “Civic Education Curriculum”, por fin sea implementada el próximo año escolar, bajo el amparo de la clase llamada “Gobierno”.

La ley en cuestión contempla educar a los estudiantes sobre los valores americanos vs el verdadero significado de la ideología socialista.

Conocidas las ultimas encuestas sobre la preferencia de los milenios y la generación Z por el socialismo, y después de vistos los resultados de las precedentes elecciones en América Latina, deducimos que la implementación en Florida de la nueva ley Estatal es de vital importancia para la preservación de nuestro sistema, tal y como lo conocemos hoy en día.

El padre de la educación pública en EE.UU, Horace Mann, dijo en 1841 que “la escuela pública es la Institución que puede recibir y entrenar a los niños en todo buen conocimiento y virtud”. Consideraba tan importante a la educación, que además dijo “Esta Institución es el más grande descubrimiento hecho por el hombre”.

A su vez, John Dewey, un reformador que vino después de Mann, tenía otras ideas. Mientras Mann fue a Prusia buscando inspiración educacional, Dewey fue a la Rusia Soviética de Lenín para aprender su mentalidad colectivista. Dewey, quién era socialista y Ateo, nunca ocultó su ideología para lo cuál escribió frecuentemente sobre su posición, en temas políticos, educacionales y religiosos.

La Declaración de Independencia de EE.UU establece que los derechos inalienables de los ciudadanos proceden del Creador, y que el gobierno existe para proteger esos derechos; Sin embargo, bajo el disfraz de separación entre la Iglesia y el Estado, esta verdad fue gradualmente expulsada de las escuelas, al igual que la Oración y la Biblia.

En este sentido, la ONU ha hecho su trabajo, sustituyendo a la Oración y la Biblia con su Declaración Universal de los Derechos Humanos, un texto que delinea derechos revocables sin base en el Creador.

La intervención de la ONU no es sorprendente ya que uno de sus fundadores fue el dictador Joseph Stalin.

Incluso, mucho más reciente, una miembro del Partido comunista Búlgaro, Irina Bokova, fue la encargada de Educación en la ONU, como Directora General de la UNESCO hasta el 2017. Bokova tuvo el valor de afirmar que “había usado a la escuela para cambiar las actitudes, los valores y las creencias de los niños”.

La ONU, con la ayuda fundamental de China, elaboró lo que se llama “el plan maestro para la humanidad” en su Agenda 2030, conocida como “Objetivos del Desarrollo Sostenible”.

Entre los 17 objetivos que contempla están la redistribución de la riqueza, el control del gobierno sobre la producción y el consumo, la acción climática y otros. En su Objetivo #4, el Plan establece que para el año 2030 “todos los estudiantes deben haber adquirido el conocimiento y las habilidades necesarias para promover el desarrollo sostenible”.

Al respecto, la consejera de política en el Depto de Educación bajo el gobierno del Presidente Ronald Reagan, Charlotte Iserbyt, escribió un libro titulado “El Embrutecimiento Intencional de América”, donde afirma que se trata de un plan deliberado donde los padres de los estudiantes son marginados.

Cuando ella estaba en su cargo, declaró en una famosa entrevista “Uno cree que el propósito de la educación es la Aritmética, Escritura y Lectura, cuando en realidad su objetivo es cambiar los pensamientos, las acciones y los sentimientos de los estudiantes.

Realmente, los estudiantes que creen más en las doctrinas socialistas son los milenios y la generación Z. Después del desarrollo de la Internet, simplemente la vida se les ha facilitado enormemente.

La promesa de libre matrícula, seguro médico gratis,y la asistencia en compra de víveres y transporte, han sido percibida por ellos como la única opción de seguir su vida, sin stress.

En efecto, antes los estudiantes iban a bibliotecas, escribían cartas y utilizaban teléfonos normales. Hoy en día tienen celulares desde niños y están circundados por muchas redes sociales que les prodigan una vida fácil de diversiones, sin compromisos ni esfuerzos.

Estas generaciones, escasamente conocen de historia. Y por supuesto, no saben que el régimen Nazi en Alemania o el Marxismo en Rusia no surgieron de la noche a la mañana, sino que fueron infiltrados poco a poco hasta lograr sus objetivos.

Por ejemplo, antes que los Judios fueran enviados a campos de concentración, Hitler unificó la fuerza policial, adoctrinó a los estudiantes y obligó a todos los ciudadanos a portar un carnet de identidad.

Después de haber visto como los adoctrinamientos se han llevado a cabo a través de la historia, y de como los jóvenes según las encuestas en EE.UU favorecen al socialismo, debemos concluir que la tarea de educar a nuestros estudiantes es algo por completo urgente.

En ese sentido, Teaching Anticommunism in America (TACA) Enseñanza del anticomunismo en Estados Unidos) deben de estar muy orgullosos que nuestro estado sea el primero y el único en la nación Americana, en adoptar esta ley de educación.

Benjamin F. DeYurre es un economista y periodista y el president de Teaching Anticommunism In America, Inc. ( Enseñanza del anticomunismo en Estados Unidos, Inc.) @DeYURRE